Kouki no sabe que hacer exactamente cuando sostiene esas rosas en sus manos.Son exageradamente caras, que por un segundo a pensado en que si las vende puede comprarse su comida por una semana.
Admira el gran ramo lleno de rosas rojas, son hermosas y exalan un aroma increíble.
Si le regalaran un ramo así, definitivamente no las vendería, esa idea es algo estúpida que solo pensó un segundo, claro que jamás vendería algo tan hermoso y delicado como el arreglo, pero si pasara eso las cuidaría con su alma.
Kouki nunca a recibido un obsequio y menos rosas rojas.
Entonces ¿Qué hace el sosteniendo un obsequio caro como ese?
Bueno, es su trabajo hacerlo.
Y en los años que lleva trabajando nunca había recibido como orden entregar un pedido tan caro y tan hermoso.
La dirección está anotada en un papel, así que toma el pequeño auto pintado de verde y estampado de diversas flores y arranca.
La casa se encuentra en una recidencia aún más cara que ese arreglo.
La casa, bueno la mansión o casi castillo está rodeada de una cerca de metal enorme pero aún así hermoso y se puede ver un portón de color blanco, detiene el coche.
Escucha que le dicen "Bienvenido a la mansión Akashi, ¿necesita algo?"
El solo balbucea lo más rápido que puede, la voz se escucha muy seria y tenebrosa.
-V-Vengo de "Arreglos y Flores Sakura" el ¿S-Señor Akashi? Envía estas rosas.
Dice y la voz le pide bajar del coche y caminar hasta la entrada de la casa.
No hace más que obedecer, así que camina a paso rápido hacia la casa, el portón se a abierto y el observa una fuente.
Es tan linda.
Si el tuviera eso en su hogar está casi seguro que sus hermanos la ocuparían para jugar en los días de calor.
Camina un poco más, hasta el suelo que está hecho de granitos de colores se ve caro.
Toca la puerta y acomoda un poco su uniforme.
Esta se abre y se puede ver a un chico, dios, Kouki respira tratando de tranquilizarce.
El chico es simplemente lindo y hermoso.
Sus ojos son grandes y de color miel, su pelo está un poco desordenado pero se ve estupendo, lleva una bata puesta, esta un poco abierta pero Kouki se sorprende al ver que la piel de chico está sudada y hasta tiene chupetones por todos lados.
Kouki ya sabe que es eso, no es tan ingenuo como todos piensan, cree que a interrumpido al chico en un momento inoportuno con su amante.
No es tan ciego para saber que el hombre que a enviado las rosas hermosas que aguardan en sus manos es el esposo o novio del chico.
Obvio las envío a su propia dirección, claramente viven juntos y claramente el chico lo engaña.
Que estúpido, piensa Kouki, si el tuviera un novio millonario que lo lleva a vivir con él, que lo tiene bien vestido y bien comido, que le envía rosas tontamente caras, no lo engañaria.
O no sabe, no lo engañarla en su propia casa.
Un tipo sale detrás del lindo "propietario" y le besa el cuello.
El chico le da un empujón y le dice "espera en la habitación".
El otro se va sin rechistar y el lindo peligris lo mira.
-¿Necesitas algo? ¿Por qué te dejaron entrar?
Le pregunta, su voz es linda pero tiene un toque arrogante, Kouki no soporta ese tono y solo espera terminar rápido ese encargo, tiene que llegar rápido a su segundo trabajo.
-El señor Akashi le envía estas rosas y está nota.
Le dice, entregando el arreglo.
-¿Puede firmar aq...
Está apunto de terminar su trabajo, hacer que el chico firme la hoja de entregado y correr de nuevo al coche.
Pero ve un dedo que lo calla.
El chico lee la nota y su cara está llena de desconcierto.
Lo próximo que ve es el piso.
Ese chico se ve muy menudo, pero incluso es unos centímetros más alto que él y puede apostar que más fuerte también.
-¿Es una broma?
Pregunta mirando a Kouki - como si el supiera la respuesta- desde arriba, aún está en el piso, ¿porqué lo a tirado?
-¡Nadie rompe conmigo!
Grita y lo próximo que ve es como el ya no tan lindo chico le tira el arreglo a la cara.
Y después le da una patada en la misma.
Puede sentir su boca sangrar, sus manos tiemblan sobre ella pero no quiere tocar la zona y se pregunta porque mierda se desquita con él.
-Te mando Akashi ¿no? Apuesto que te acuestas con él, pero mirame soy mejor que tú. No firmare nada así que lárgate de mi casa, si te veo otra vez no solo tendrás la boca rota. ¡Asqueroso chico repartidor!
Tiene dignidad y mucho miedo, así que no pregunta porque cree que él a sido cómplice de lo que sea que tuviera escrito esa nota y solo levanta las pobres rosas y la nota arrugada y sale de ahí.
Cuando llega al auto arranca y va lo más lejos posible de la mansión, más tranquilo solo le queda llorar.
Maldición él solo era el repartidor.
¿Por qué tenían que meterlo a problemas ajenos?
Su rostro dolía y las rosas le habían lastimado los ojos.
Solo pudo leer el papelito arrugado, curioso.
"Querido ex prometido.
Ni siquiera puedo pronunciar tu nombre, y tampoco puedo verte a la cara sin pensar en romperte los dientes.
Nunca me perdonaría golpearte, solo por los viejos sentimientos.
Lo negué un millón de veces porque en realidad te amaba pero mis amigos notaban lo que yo no.
Así que solo te diré que tu y tu asqueroso amante salgan de mi propiedad, se que no tienes donde quedarte pero me alivia un poco pensar que ahora lo tienes a él.
¿Pensabas que las rosas dirían que "te extraño" como las demás?
Lo siento pero no será así.
Sin rencores. Akashi Seijuro...... "
Kouki leyó y solo una sonrisa surco su rostro, baya sus teorías habían acertado.
Ahora sabía porque el chico estaba tan enojado.
Su cara ya no dolía tanto.
¿Quién rayos era Akashi Seijuro?
Merecía una disculpa.
××
Editando otra vez, denme ánimos para continuar🙈
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«El Chico De Las Flores» [Akafuri]
RomanceKouki solo tuvo un mal día en su trabajo como repartidor de flores. -Akafuri