Capítulo III

334 69 10
                                    

Sin mirar atrás, al dar el toque de salida, me dirijo con los chicos de último grado para recoger lo de siempre y para mi sorpresa el castaño aún no se presenta.
Ya me había hecho la idea de que no vendría, pero para asegurarme, me quedo a charlar un poco con los chicos, apenas y pude escuchar tres palabras de cada uno y ya me aburro.
El chico no llega así que me decido por dirigirme a ningún lado pero apenas unos pasos fuera de la escuela, detrás mío se escuchan pisadas fuertes y rápidas, por puro instinto me apresuro a poner mi mano sobre el bolsillo donde guardo mi navaja y me giro de golpe hacia la persona que viene.
Relajo mi postura al ver que es el chico erección de quien se trata.
<Creo que mi madre puede esperar>habla agitado y acomoda el flequillo de cabello que se formó.
<Bien niño>quito la mano de mi bolsillo, me giro dándole la espalda y sigo caminando dejando que me siga.
Está algo callado, tal vez intenta agradarme con su silencio, pero el chico parece ser de esos que no pueden cerrar la boca por más de dos minutos.
<¿Qué haremos?>pronuncia entusiasmado, giro ligeramente la mirada hacia él y de nuevo al camino.
<Estamos caminando, eso es hacer algo>la verdad no había pensado en eso, ni siquiera estaba seguro de que vendría, pero no puedo decirle eso, lo ahuyentaría de inmediato.
Escucho ya su respiración tornarse pesada y a pesar del clima nublado, nuestros cuerpos comienzan a emitir calor por lo que ambos nos quitamos los abrigos dejando ver la camisa de la escuela, yo aflojo un poco la corbata azul.
<¿Podríamos por lo menos dejar las mochilas en algún lugar?>comienza a arrastrar los pies, su postura se encorva y me mira rogando.
Podría seguir caminando cargando mi mochila sin quejarme pero el chico parece no aguantar más.
No le respondo pero me desvío del camino, con la mirada busco algún buen lugar para dejar las mochilas y entre el pavimento encuentro un buen lugar, el pasto está algo alto y hay bastantes flores.
Me acerco al lugar mientras retiro las correas de mis hombros, dejo que el chico me observe para que así después él copie mi acción.
<¿Aquí?>se acerca lentamente y mira como dejo caer mi mochila sobre el pasto.
<Preguntas demasiado>giro los ojos sin que él lo note pero quiera o no, va a dejar ahí sus cosas porque no voy a hacer ninguna pausa si se cansa demasiado.
Ni siquiera estoy seguro del porqué le dije que me acompañara, no es como que suela salir con compañía, seguramente mi cerebro quiso decirme algo.
Le dije a mis padres que llegaría tarde y eso haré.
<¿Eres de aquí?>por primera vez empiezo una conversación, el chico al notarlo levanta su mirada hacia mí.
<Nací en Italia pero nos mudamos cuando tenía apenas cuatro meses>muestra una sonrisa en los labios.
Aparento mostrar interés con una mueca.
<Entonces debes conocer algún lugar interesante aquí>detengo mi caminar y giro la mirada hacia sus ojos.
Tuerce la boca y mira hacia otro lado, sigo mirándolo notando el cómo sus ojos se iluminan con la poca luz del día.
<Bueno... tengo una cabaña no muy lejos, está por el lago>dijo nervioso, seguramente por tan solo imaginarse a nosotros dos solos.
Mis impulsos me forzaron a imaginarme en esa cabaña con el chico, yo engañándolo con un beso, intentando ganarme su confianza para después derramar su sangre en la fresca madera.
Mi respiración se agita, muerdo mi labio inferior aún imaginando la escena, su frágil cuerpo sobre el suelo rodeado de una mancha roja.
<Vamos>parpadeé un par de veces, aclaré mi garganta y dejé que el chico me guiara hacia el lugar.

Y tal como lo dijo, nos comenzábamos a acercar al lago y ya no tan lejos se distinguía una cabaña de madera, miro ansioso al chico caminar frente a mi, miro su cabello moverse a causa del viento.
Llegamos a la puerta, se gira hacia mí dejando ver su rostro, muerde su labio, está nervioso.
<¿Está bien si fumo dentro?>hablo haciendo referencia a un cigarrillo que guardé en mis pantalones, niega con la cabeza.
Enciendo un cigarrillo, doy unas cuantas caladas y empiezo a frustrarme ya que el chico sigue estático frente la puerta.
Estoy por decir algo pero el chico da un paso adelante, estira su cuerpo hacia arriba intentando alcanzar algo pero su estatura no le ayuda, intenta ponerse sobre las puntas de los pies pero falla.
Giro los ojos, doy dos pasos y también me estiro, paso mi mano por sobre la puerta hasta que algo metálico y frío hace contacto conmigo.
Le entrego la llave al chico quien enseguida abre la puerta.
El lugar es lindo por dentro, tiene algo de polvo pero es acogedor.
<Hace un poco de frío aquí, si quieres puedes tomar algo>se adentra y abre una pequeña puerta donde se puede ver algo de ropa.
<Estoy bien>respondo dándole más caladas al cigarrillo. Exploro el lugar a detalle con la mirada.
Mientras paso mis ojos por la sala noto al chico mirarme, sus manos están a sus costados y su rostro algo tenso.
Un beso por su confianza.
<¿Dónde duermes?>pregunto con simplicidad, el chico se apresura a caminar e inmediatamente voy detrás de él.
<Está algo sucio, venimos en los días soleado>pronuncia algo nervioso al llegar a una puerta. Esta vez sin dudarlo entra por ella.
El lugar es lindo, tiene una ventana con vista al lago y además resalta la madera del lugar.
Me siento en la cama esperando a que el chico tome asiento junto a mí.
Está demasiado tenso, el hecho de estar completamente solos en una habitación lo pone nervioso. Eso va a mi favor, me da más señales de que podré engañarlo fácilmente.
<Ven>le indico golpeando un par de veces el colchón y lentamente su cuerpo se mueve hacia donde me encuentro<Frank ¿verdad?>pregunto, el chico asiente con la cabeza. Si, todo este tiempo supe su nombre, vamos el tipo toma las mismas clases que yo.
<No hace falta que me digas tu nombre>llega hasta mí, al principio duda un poco pero termina tomando asiento.
<¿Quieres un poco?>saco el cigarrillo de mi boca y lo acerco a su rostro, su boca de nuevo se tuerce, sus cejas se fruncen ligeramente, me mira y le acerco aún más el cigarro.
Su mano se interpone, me quita el cigarrillo de la mano, admira cómo se consume y después comienza lentamente a pegar sus labios, al momento de la primera calada se ahoga y tose dejando salir al mismo tiempo el humo. Río un poco y le quito el cigarro de la mano.
<¿Tienes hambre?>pronuncia aún tosiendo.
Miento negando con la cabeza, hambre, no pensé en eso durante este tiempo pero en el instante que dijo esa palabra, mi estómago parecía golpear por dentro rogando por comida. Pero tengo a Frank justo donde lo quiero. Es demasiado claro darse cuenta de que es homosexual y que obviamente se interesa en mí.
Miré sus ojos mientras aún consumía la nicotina. Fue en ese instante que recuerdo mi plan perfecto, aún puede ser ejecutado y se me hará más fácil tomando esta ventaja.
<Iré por algo de com...>habla pero lo interrumpo al instante tomando con fuerza su corbata, confundido me mira.
Retengo humo en mi boca, me giro rápidamente para apagar el cigarrillo usando una mesita como cenicero, tiro de la corbata hacia mí dejando nada de espacio entre nosotros, nuestras narices se juntan, sus labios están ansiosos por llegar a los mío pero soy yo quien decide cuando hacerlo.
Aprieto la tela, doy un pequeño salto en mi trasero para acercarme, mis pulmones no soportan más así que me adentro a explorar los labios del castaño, mientras nos besamos dejo salir el humo por mi nariz. Sus labios son torpes, aún no logran sincronizarse con los míos, así que le doy algo de "motivación" posando mi mano libre en su muslo, Frank da un pequeño brinco por el tacto.
Intensifico el beso poniendo presión entre nuestros labios, suelto su corbata para tomar su rostro. Escucho pequeños suspiros entre nuestros labios y es que quiere más. Su mano se tienta por tocarme, la posa ligeramente en mi muslo y comienza a subirla a mi entrepierna. Le permito que la suba aún más hasta llegar a mi miembro, lo cubre con su palma y pone algo de presión en él.
El chico intenta no separar sus labios de los míos para subir por completo en la cama, me deja debajo y junta su cuerpo al mío apegando nuestros miembros.
Al perecer Frank quiere ser el dominate aquí, no estoy totalmente de acuerdo pero debo dejarlo si quiero que la confianza se haga aún más fuerte.
<¿Quieres hacerlo?>despego por primera vez nuestros labios y hablo antes de comenzar a desabrochar su camisa.
Su cabello cae por los costados de su cabeza, me mira agitado, aprieta sus labios.
<¿Ahora?>pregunta y al instante siento nuestros miembros hacer presión entre ellos.
<Mjm>acaricio su espalda hacia abajo.
Se retuerce un poco por mis caricias, da un largo suspiro e inesperadamente quita su cuerpo del mío.
Me ofende que el bastardo me haya dejado con una erección. Pero solamente hago esto para acercarme a él y esperar el momento indicado para derramar sangre.
<Entiendo>pronuncio algo molesto<Mejor regresamos por nuestras cosas>me pongo de pie de golpe dejando la habitación.

Un beso y puedo conseguir lo que sea.
El asesinato Perfecto, mi plan desarrollado a detalle.
Lo único que hacía falta era encontrar a la persona.
Frank es el indicado, tiene algunas inseguridades, tiene afecto hacia mí lo cual será más fácil manipularlo.

Frank es Perfecto.


___________
Dedicatoria a yesmont porque fue la primera en leer la historia

&quot;Psychotic Kid&quot; [frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora