Conocí a Lu cuando tenia 21 años, en la universidad. Ella estaba en el último año de Arte y yo en el tercer año de Leyes. Nunca estudiamos juntos. Ni siquiera me encontré con ella antes de la universidad, pues siempre vivimos en ciudades muy distintas. Ella era tan extraordinaria. Esa clase de chicas huracanes que vienen y arrasan con todo. Yo en cambio era un chico mas calmado. Mas tranquilo. Mas lógico. Ella era lo contrario a mi. A su lado yo no llegaba ni a llovizna. La primera vez que la vi fue en la biblioteca. Recuerdo que estaba leyendo un libro de estatuto social mientras ella dibujaba algo en su libreta. Ella no me vio a mi. Pero yo si la vi a ella. Recuerdo muy bien su libreta. Siempre llevaba esa libreta a todos lados. Tenia un decorado lleno de estrellas de distintos colores y en el fondo un graffiti que decía Lu. Su nombre real era Luminis Finix. Su nombre significaba Luminosidad. Significaba Luz. Pero le gustaba que le llamaran Lu. O bueno eso decía la libreta. Había oído mucho de esa chica. Tenia una mala reputación. Decían que estaba loca. Incluso algunos le tenían miedo. Pero a mi parecer solo era una chica que nadie comprendía y que todos querían comprender. Eso es la definición real de las personas locas en realidad. Había por alrededor de aquella cuidad 13 graffitis firmados con el remitente Lu. Sabía que eran de ella. Tenia un estilo muy particular. A veces dibujaba cosas tristes tanto así que te daban ganas de llorar. Y otras veces dibujaba cosas felices tanto así que querías reír. Yo tenia esa extraña teoría de que ella dibujaba según su estado de animo. Esperaba entonces que todos sus dibujos fueran alegres, pero no todos lo eran. Recuerdo también que a cada obra le agregaba estrellas con mensajes subliminales. Yo había descubierto algunos cuantos. Pero jamás los revele porque eran subliminales. Mensajes ocultos que cada persona debe descubrir por su propia cuenta. Cada cosa que ella hacia era Arte. Ella era Arte. Lu era esa clase de chica que todos ven pero nadie quiere acercarse, por mala suerte. Era esa típica película que te deja con intriga a pesar de que ya la viste. Esa clase de película que quieres vivir una y otra vez aún sabiendo que hay un final. Lu era una chica hermosa y no me refiero a lo físico. Me refiero a su intelecto. Su personalidad. Sus gustos. Su arte. Me refiero a todo lo que la engloba. Todo en ella era hermoso.
Recuerdo que la observaba mucho. Ella iba todos los días a la biblioteca a dibujar. Nunca entendí porque pero supongo que el lugar le daba paz e inspiración. Y yo iba todos los días a la biblioteca a verla. A verla pintar. A verla a ella. Nunca entendí mucho el arte. Tampoco entendí porque dibujaba lo que dibujaba. Pero sé que no me importaba entenderlo mientras me transmitiera algo. Y con Lu todo me transmitía algo. Me sentía infinito. Supongo que no era entenderlo sino vivirlo. Y con Lu yo me sentía vivo. Ella me proporcionaba vida. Lu era rebelde mas de una vez estuvo en problemas. Las personas solían definirla como un problema sin solución. Una enfermedad sin cura. Yo en cambio tenia otra teoría pues para mi ella ya era la solución. Ya era la cura. Pero por supuesto el mundo como siempre sólo quería destruir aquello que no comprendía. Por miedo como de costumbre. Pero Lu era valiente nunca dudo ni un poco. Nunca temió de verdad. Hay pocas cosas que se de Lu pero a la vez es como si conociera todo de ella. Pero un día fui a la biblioteca a verla. Ella no estaba. Fui los días siguientes. Y la busque por toda la universidad. Pero no estaba. Lu se había ido y no pensaba volver. Muchos rumores decían que la botaron. Que no pudo terminar su carrera a pesar de que le faltaba tan poco. Muchos decían que se fue. Que estaba cansada de las críticas y huyó. Yo siempre pensé que eso era imposible. Lu no era esa clase de chicas que huyen. Huir no siempre significa irse. Huir va mas allá de eso. Y ella no hacia eso. Pero la cosa es que Lu se fue y no volvió. Jamás lo hizo. No se porqué o cómo. Pero espero que este donde este siga haciendo aquellas obras de arte. No puede privarle al mundo de semejante belleza. Conocí a Lu cuando tenía 21 años. Ella tenia 23 años. Era un huracán viviente. Una película sin explicación. Era Luz. Pero se fue y no volvió. Nunca me arriesgue con ella y no puedo vivir toda mi vida preguntándome que hubiese pasado si hubiese hecho algo. No puedo preguntármelo aunque lo hago. Lu se fue el 6 de Agosto de 1981. Se fue y jamás volví a verla. Jamás volví a ver Arte aunque lo que ella transmitía siempre se quedará conmigo. Supongo que si puedes cambiar el mundo con tan sólo una palabra. Lu sería esa palabra. O por lo menos cambiar mi mundo. Lu se fue una noche y no volvió ni lo hará. Pero lo que provoco en mi siempre estará. Ese es el resultado de impactar en la vida de una persona. Y ella. Ella impacto en la mía. Lu aquella chica Arte. Lu.
-Lumo
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La historia perdida
PoetryHay historias que no han sido contadas. Historias que son mucho para la humanidad. Historias que pesan tanto que duele contarlas. Historias que conectan a muchas personas. Historias que duelen, destruyen y rompen. Historias difíciles, fuertes y tris...