Tardes de domingo (Lo demás es lo de menos II)

Capítulo I

-Te dije que me encantan estos aniversarios heladosos..? - Dijo Flor, mientras se acercaba a darle un beso.

-Heladosos???

-Si... heladosos... creo que es algo que nos identifica el helado, no?

-Eeemm si, ponele... el helado como concepto... porque lo que es gustos... - Jazmín revoleo los ojos, provocando una carcajada en Florencia.

Hoy se cumplía otro año de convivencia. El segundo, más precisamente... y ese día fue decretado como el día de su aniversario. Algo así como el día de su "boda"... ya que a pesar de que Jazmín pudo resolver finalmente su divorcio, a ninguna de las dos le interesaba demasiado ese tipo de formalidades.

Pero eso si, les gustaba eso de tener otra excusa para planear algo especial... algo lindo... Aunque fuese algo tan simple como salir a tomar un helado luego de una larga caminata al atardecer, como en este caso.

Una vez más estaban en la plaza que tanto les gustaba, y en el banco de siempre... el de ellas, como también lo habían decretado. Y como si el universo estuviera de acuerdo con ellas, siempre lo encontraban desocupado... cosa que les causaba mucha ternura.

El helado ya era historia, pero ambas disfrutaban tanto del momento que ninguna tenía intenciones de moverse.

Jazmín jugaba con un bucle de su novia, mientras Florencia descansaba sobre su hombro y le hacía mimos en la panza.

-Mirá ese nene Flor... - Cortó el silencio de repente. -Desde hoy lo veo dando vuelta... Es muy chiquito... con quien estará?

-Ay no se... no se ve a nadie cerca. - Contestó, incorporándose para mirarlo. -Cuantos añitos tendrá? Tres, Cuatro... Como lo van a poner a vender tarjetitas?!?! le puede pasar cualquier cosa...

Como si el nene hubiese notado el interés, empezó a caminar hacia ellas.

Estirando su bracito, les ofreció una de sus tarjetas... esas con dibujitos y frases.

-Hola mi amor! Gracias! - Dijo Jaz, tomando la tarjetita que le entregaba junto con una nota.

El nene sonrió un poco tímidamente ante su reacción. Era evidente que estaba acostumbrado a pasar mas bien desapercibido...

-Estas solito? - Le preguntó Florencia... pero no obtuvo respuesta.

- "Hola soy Nahuel, mi mamá esta muy enferma y necesito ayuda para comprar remedios y comida" - Leyó la nota.

-Hola Nahuel. Que lindo nombre! - Saludo "formalmente" Florencia. -Yo me llamo Florencia y ella Jazmín.

-Debés tener frio vos, solo con esa remerita... - Dijo Jazmín, al darse cuenta de la escasa vestimenta del nene. -Te querés poner mi campera?

Nahuel negó con la cabeza, sin levantar la mirada... parecía como si supiera que "debía" irse, pero la satisfacción de que alguien muestre tanto interés en él, era más fuerte.

-No tenés frio?!?! - Exageró Jazmín, con voz chistosa...

Estaba a punto de esbozar una sonrisa cuando un estornudo se hizo presente.

-Mepa que alguien sí tiene frío... - Intervino Florencia. -Querés mi buzo mejor... mirá es re lindo y no pica... - Dijo, mostrándole la prenda. -Te lo pongo?

-Si... - Habló finalmente.

Jazmín actuó indignación... estaba a punto de hacer un comentario, pero se arrepintió... tuvo miedo que su nuevo amigo tome a mal el chiste.