unico y fiel protector

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Como todos saben, el sueño de Sarada es convertirse en una buena hokage para konoha, quería ser lo suficiente gentil, inteligente, astuta, protectora y por encima de todo, lo suficientemente fuerte, en fin, para ser una buena hokage tenía que ser la mejor en todas esas cosas.

Ciertamente no solía ser la más gentil pero tenía astucia y grandes ganas de proteger con su vida su hogar y para ello entrenaba hasta el cansancio para ser lo suficiente fuerte y poder sostener a konoha, entrenaba más de lo que sus compañeros imaginan, en especial cuando no tenía a nadie quien la ayudara, aunque no lo admitiera, en realidad no era capaz de saber si sus duros entrenamientos tenian frutos pues no tenia a alguien para confirmarlo claro que eso no seria igual en ese día pues boruto estaba un poco apartado del campo de entrenamiento.

¿porque el uzumaki estaba hay? Había pasado uno de los tantos inconvenientes con su padre y enfadado salió de su casa, lo típico prácticamente, quería ir a un lugar solo y sin nadie, no se le ocurrió otro que el campo de entrenamiento pero no esperaba que la uchiha estuviera hay, apenas y había llegado, como sea, la presencia de la azabache no fue impedimento alguno para entrar por completo al campo.

Pero una vez la contraria se dio cuenta de la presencia de este se sintió un poco disgustada, lo menos que quería era alguien que la interrumpiera

Boruto: ¿porque pasas tu tarde aquí?

Preguntó cuando estuvo más cerca

Sarada: entreno ¿que haces tu aquí?

Boruto: estaba aburrido y vine aquí

Mintió, Sarada solo rodó los ojos

Sarada: claro, yo seguiré entrenando si no te importa no quiero que estes fastidiando

Boruto: podría entrenar contigo

Sarada: serías un estorbo

El rubio fruncio su ceño ante el tono de suficiencia que uso Sarada

Boruto: ¿que te hace creer eso?

Sarada: ¿que te hace creer a TI que podrias entrenar contigo?

Boruto: siempre tan egocéntrica apuesto a que yo te ganaría

A Sarada le causaba gracia en el fondo lo estúpidamente lanzado que era su compañero y por eso varias veces le gustaba provocarlo pero de pronto una idea se le vino a la cabeza, sabía que boruto exactamente debil no era, a pesar de lo impulsivo que era estaba a un buen nivel ¿que haría de malo entrenar con el y probar un poco que tan fuerte se había hecho ella? ¿que tanto habían subido sus habilidades y capacidades?

Sarada: ¿eso apuestas...?

Boruto: ¡por supuesto!

Sarada: ok hagamos una pelea de entrenamiento ¿aceptas?

Boruto: si

Para ese entonces ya a Boruto hasta se le había olvidado porque estaba enfafado con su padre, haría una pelea de entrenamiento con Sarada y ganaría, ambos tormaron su distancia, con kunays a la mano se pusieron a la defensiva, y en menos de un segundo con miradas desafiantes empezaron la pelea, corriendo el uno contra el otro, el choque de ambos metales rezonaba en todo el campo, la fuerza y rapidez con la que se movían también se encuchaba en el solitario campo.

Para incomodidad del uzumaki se sentía presionado, acorralado a pesar de seguirle con dificultad disimulada el ritmo a su compañera, no eran los movimientos por los cuales se sentía sino el aura extrañamente agresiva en la que se veía envuelto, la mirada fiera de la azabache lo intimidaba pero ahora más que nunca, para cuando se dio cuenta se veía retrocediendo mientras bloqueaba ataque por ataque, lo cuales parecían hacerse más rápido a cada segundo, Boruto se arrepentiria de haber aceptado ese duelo.

{🌺Borusara🌺} One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora