{🌺Borusara🌺} One-shots

¿fuerte o fragil?

Tanto Sarada como Boruto habían cambiado, demasiado para el gusto de muchos, dr casi todos sus conocidos e incluso de ellos mismos, en una terrible y catastrofica guerra habían perdido a tantas vidas preciadas, habían perdido sus personas a seguir, su ingenuidad, la niñez que aún quedaba dentro de ellos, la paz en sus corazones.

Sarada iba cada noche al monte donde estaban tallados los rostros de los hokages, recién reeconstruidos al igual que todo, veía desde hay todo seguir su curso y se preguntaba ¿cuando haría ella lo mismo? ¿cuando volvería a ser la uchiha orgullosa y firme que era? ¿cuanto tiempo más debía pasar para que el dolor se fuera? Se sentía como una completa mierda, porque ella no era la única que sufría, su madre en casa lloraba todos los días la muerte de su querido sasuke, y Sarada hacía lo posible para reconfortarla y consolarla pero cuando su madre se ponía así a ella le dolía aún más y no resistía, sentía las ganas de llorar con ella y se negaba a que su propia madre la viera derramar una lágrima, bastante tenia con sentirse inultil para luego sentirse como una carga al llorar frente a su madre y preocuparla más.

Y cada noche que iba a la cima del los monumentos, se posaba sobre la cabeza del septimo y difunto hokage Naruto, su persona a seguir, esa que la hacía ver más allá y esa que le dio el sueño de volverse hokage, pero ahora lo más que hacía era estar hay y ponerse a la orilla para ver hacía abajo, para ver lo alto que estaba del suelo y preguntarse ¿que pasaría si ella se lanzase de hay? ¿moriría al instante? ¿o sobreviviria con dolor? ¿que pasaría si ella se lanzase y muriera de una maldita vez oor todas?

Ella se lanzó de hay.

Y como ha estado pasando seguido, fue atrapada por lps brazos de él, de Boruto, quien la veía cada noche en aquel lugar, sin embargo no se acercaba a ella sino después de que ella se lanzase, naturalmente había empezado a observarla para serciorarse de que nada le pasará y eso se volvió una pequeña constumbre

Sarada: dime lo que hago mal

Pidió Sarada, como dije antes ella no era la única que sufría, Boruto también vivía con dolor la muerte de su padre, se arrepentia de corazón el haberlo tratado mal de adolescente, se sentía un mal hijo, el peor, pero su estado con el de la uchiha tenía una pequeña diferencia...

Boruto: fingir que eres fuerte

Bajo los azulados ojos del uzumaki se veian sombras, prueba de que a diferencia de la uchiha, él dejaba ir todo lo que podía para estar mejor y cuidar de la amada familia que aún le queda, su hermana menor y su madre, Sarada creía que la mejor forma de cuidar a otros era mostrarse fuerte y firme como siempre, sin saber que lo único que hacía era romperse aún más por dentro, los humanos somos tan complejos que no distinguimos muchas cosas, entre ellas nuestra verdadera fortaleza o fragilidad.

Entonces Sarada lloró, lloró y chillo apegada al rubio, no era la primera vez que lo hacía, desde unas noches atras, había empezado a hacerlo pero aún no era suficiente, Boruto lloraba junto a ella y la vez la reconfortaba, abrazando la y dandole de su calor, acariciandola y brindalole todo lo que podía atraves de sus miradas y roces, como si de alguna forma le pudiera pasar su energía, ambos se sentaron en el suelo, aún abrazados

Boruto: llora todo lo que quieras porque yo estaré aquí siempre para cuidar de ti

Con tan solo esas palabras, Sarada sentía como bastante oeso era eliminado de su corazón, no sabía si confiar o no pero lo que si sabía era que con boruto, se sentía mejor y por ello confiaria en el ciegamente, le daría sus lágrimas así como él le daba las suyas, mutuamente trataban de armar y ensamblar lo que estaba quebrantado, con cuidado y dedicación lo lograrían entre ellos, aún si el proceso sea lo más doloroso

Fin