Diario De Un Chico Suicida

Cap 3: Ahora lo entiendo todo

¿Que pasó con tu instinto maternal, madre? ¿Que pasó con saber todo lo que le pasa a tus hijos?... Cuando necesitaba un abrazo dónde estabas.

Octubre 26, 2018.

Hoy es mi cumpleaños saben, pero al parecer nadie se acordó, ni siquiera mi madre, baje a desayunar; pensé que este día tal vez no me iría tan mal, todavía tenía un poco de esperanza.
Bajé y al momento me arrepentí, no me vieron, ni yo a ellos, pero...pero los escuche.

-Por que no mataste a Evan cuando era un bebe, así nos hubiéramos ahorrado tantos problemas,- dijo mi padre.

Me pare en seco, me dolió; no voy a mentir y decir que no por que la verdad si me dolió.

-Yo también pienso lo mismo debió de haber muerto. Nada más nació para causar problemas.

No quería hacerlo pero lo hice, lágrimas empezaron a brotar de mis ojos. Y subí a mi habitación, de dónde no debí de haber salido.
Ya había escuchado suficiente no quería escuchar más, no se que esta mal en mi, yo a decir verdad no se ni tan siquiera se el porque tuve que nacer, yo no lo pedí, si no me querían, porque no me abortaron, me hubieran hecho un gran favor, por que... Por que yo...por que a mí.

No quiero vivir

Me duele... Me duele mucho... Y sabes que es lo irónico de todo esto... Estoy llorando... No puedo evitarlo...quiero dejar de sentirme así... Te estoy contando mi historia por que ya no aguanto más, lo que es la realidad.
La música ya no puede anestesiarme, ya no surte efecto en mi, solo estoy aquí en mi cama abrazando mis piernas y meciéndome, quiero que el dolor pase, pero sigue doliendo; me duele... Me duele el pecho... Me duele que la sangre de esas personas corran por mis venas; si pudiera me arrancaba la piel.
Maldita vida.

Nunca me ha gustado la vida, pero hoy más que nada, no quiero seguir viviendo.

Lo siento se que mi vida no es la mejor historia, yo tampoco me siento bien contándote esto, lo hago para desahogarme; pero más que nada lo hago para que cuando tengas un hijo o una hija; sepas que podemos sentir su odio por nosotros, aunque nunca lo decimos, pero... Lo hacemos. Yo lo sé; se que mis padres nunca me han querido, sólo me duele más por que creí que algún día se sentirían orgullos de mí y que me amarían.

Llegados a este punto ya no se que más hacer, me siento más perdido, que de costumbre.

Te contaré un poco como fue mi niñez, para dejar de llorar, por que sabes no dejado de hacerlo. A lo mejor no te importa; pero bueno.

Cuando era niño, no entendía que era lo que me hacía diferente a mis hermanos, pero sabía que había algo, aún recuerdo aquella mañana en la que me levanté y quería darle un beso, me fui a su cuarto, le di un beso; pero ella me empujó y me echó de su cuarto.
Ahora que recuerdo, un día papá no llegó dormir y yo estaba un poco enfermo. Cuando fui al cuarto de mamá para decirle que me sentía mal... Recuerdo... Recuerdo que cuando ella me vio entrar... Ella... Ella me jaló del pelo y me... Y me tiró al suelo, me empezó a patear. Lo recuerdo a la perfección ese día; todavía puedo recordarla mirándome desde arriba, mientras descargaba toda su furia en mí también recuerdo a mis hermanos viendo lo que sucedía y ellos no hacían nada para ayudarme, mientras que mis costillas me dolían a más no poder.
Me dejo tirado en el piso, sin importarle si me había roto algo, simplemente se fue, y tuve que levantarme e ir recargandome en la pared para poder llegar a mi cuarto.

Todo este tiempo he vivido lleno de esperanzas, pero al parecer no sirve para nada.

Ahora que recuerdo fui muy fuerte cuándo era niño, esto no va a poder más que yo .
Me levanto y me cambio son a las once de la mañana. Creó que las cosas no pueden empeorar más.