Mi madre estaba en la cama convaleciendo por su enfermedad. Tenía cáncer terminal.
Acababa de cumplir seis años y esta fue la noticia que recibí.
Estaba al lado de la cama de mi madre con su cabeza al lado de sus delgados brazos — mi niña, por favor se fuerte — dijo mamá acariciando mi cabello suavemente con hilo de voz — te pido que luches muy duro, y que cuides a tus hermanos por mí — me sonrió dejándome ver su delgado y blanquizco rostro.
Su cabello castaño rizado se había transformado en nada, ahora solo había un pañuelo cubriendo su cabeza, los ojos café tan brillantes que siempre nos miraban con tanta ternura, poco a poco se iban apagando.
No quería dejarla ir, ¿quién quiere dejar ir a su madre? Pero debía de parecer fuerte ante ella, para que no tuviera más preocupaciones, aunque me dolía el alma y un gran nudo se formaba en mi garganta, le sonreí sintiendo como las lágrimas rodaban por mis mejillas —Sí mami, te amo mucho — dije llorando. La abrasé fuertemente para así poder grabarme por última vez su aroma y el calor que de ella emanaba.
Sentí sus labios sobre mi frente —te quiero mi niña, y siempre va a ser así, voy a estar cuidándote en todas partes, cuando me extrañes solo mira al cielo — sonrió tristemente —yo voy a estar ahí escuchándote - dijo acariciando mi pelo.
—Te voy a extrañar mucho — sorbí mi nariz.
Vi como una lagrima se deslizó por su rostro —Ustedes fueron lo mejor que me ha pasado Nicol, y los voy a extrañar mucho.
Pese a mis quejas y súplicas, mi padre me sacó de la habitación para que mis otros hermanos se pudieran despedir de mamá.
James, quién era mi hermano mayor por dos años, me abrazó — ¿Qué te dijo mamá?
Sorbí mi nariz y Jame me limpio las lágrimas —-Que cuidara de los chicos, ¿y a ti?
—Lo mismo.
Ahora éramos los grandes de la casa, él era mi soporte y yo era el de él.
Me aferre más a él. Era con uno de los que podía hablar y me escucharía pacientemente, me daría consejos y lo resolvería.
Luego de que todos habláramos personalmente con mamá y nos despidiéramos de ella, estábamos en el pasillo tomados de la mano y esperando a que mi padre terminara de hablar con mamá.
—Niños — papá abrió la puerta, sus ojos llorosos y rojos eran los mismos que todos teníamos, pero trató de darnos una sonrisa — pasen, su madre quiere hablar con todos.
Sorbí mi nariz levantándome de la silla y entramos a la habitación. Todos mis hermanos estaban alrededor de la cama de mamá, nadie decía nada, solo tratábamos de grabarnos su imagen.
—Mis niños —mamá nos miró a todos uno por uno— lo siento mucho por tener que dejarlos. Pero quiero que sepan que los amo con todo mi corazón y que nunca los olvidaré, estaré ahí para ustedes en su corazón cuando más lo necesiten. Quiero que sean fuertes, sé qué clase de familia tengo y me voy tranquila, sabiendo que tengo a los mejores hijos que pude haber deseado. Mami los ama con todo su ser — nos dio una última sonrisa
—Niños — la voz de papá se comenzó a cortar — salgan por favor, quiero hablar con su madre — dijo cubriéndose el rostro, no quería que lo viéramos llorar.
Esa fue la última vez que mí a mi madre.
UN AÑO DESPUÉS
—Con un demonio — seguí tocando la puerta — ya sal Scott — dije esperando el baño
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Y fuiste tú
Romance¿Qué pasaría si tienen cinco hermanos hombres?, vivir en la misma casa, convivir en la misma escuela. ¡el mismos baño!. pues esta es mi vida. mis cinco hermanos son los más "populares", de la universidad, si es una forma de llamarle que se acuestan...