Capítulo 5

1.6K 82 14
                                    

Hobbit emprendió su vuelo y yo me sostuve de Andrew para no caerme ya que estaba en la punta, pude divisar de nuevo la maravillosa ciudad de New York bajo mis pies la cual lucía diferente de día, pero hermosa aún, muy pronto llegamos de nuevo a aquel bosque de anoche, el cual de día lucía mucho mejor, nos fuimos acercando de nuevo a aquella cueva pero en vez de aterrizar en el frente de ésta, Hobbit aterrizó en la parte trasera, donde se encontraba aquella hermosa laguna, ahí pude ver la perfecta y musculosa figura de Jake recostada en el tronco de un árbol.

-Hoy comenzaremos con algo sencillo -Dijo Hovarth bajando del lomo de Hobbit al igual que nosotros- ¿Quién quiere empezar primero?
-Yo, veamos que pueden hacer estas manos -Contestó Andrew.
-Primero que todo, Andrew, debes concentrarte, despejar tu mente, no pienses en otra cosa más que en tus poderes, tratarás de hacer una pequeña bola de agua, supongo que puedes hacer eso ¿No?
-Pff claro ¡Sencillo!

Así que Andrew puede controlar el agua, con tantos sucesos no pude concentrarme en pensar que poder podría tener cada uno, de Andrew ya me esperaba que fuera ese, como él me lo dijo en natación, el agua está en su sangre, el de Johanna... Tal vez sea fuego, en la escuela me dijo que yo era como ella y yo boté fuego de mis manos, sin embargo, no estoy del todo segura, no tengo ni idea de cuáles pueden ser los de Blair y Jake, tendré que esperar a verlos en acción.

Andrew respiró profundo y observó sus manos, pude notar su cara de concentración en ellas, pasaron varios segundos y nada, éste dio un suspiro de resignación y volvió a intentarlo, esta vez, una pequeña gota de agua se estaba formando, pero aún no era una bola grande, y después de unos segundos, explotó, Andrew dio un grito de enojo y frustración.

-No es tan sencillo como parece ¿No? -Interrumpió Hovarth riendo- Sigue intentando muchacho, pronto lo lograrás. Básicamente todos deben seguir los mismos pasos que ya dije, deben concentrarse, despejar su mente, enfocarse en su poder... Zoe, me gustaría que comenzaras primero haciendo una bola de luz, Johanna, tú una de fuego, Jake, quiero que trates hacer florecer una pequeña flor de la tierra y Blair, intenta mover aquella hoja con el viento hacia mi dirección

Y como ordeñó, así se hizo, cada uno estaba intentando hacer su tarea de su respectivo elemento, traté de concentrarme en mis manos, pero era difícil escuchando tantos ruidos y quejas provenientes de los demás, observé a mi alrededor y pude notar como Andrew aún luchaba con aquella pequeña gota, Johanna ya comenzaba a botar chispas de sus manos, Jake estaba agachado en el piso moviendo sus manos, tratando de que aquella pequeña flor saliera a la luz, y Blair, también estaba agachada intentando mover aquella hoja seca que se posaba en el césped. Yo aún no conseguía nada, es extraño porque en mi casa cuando lo practiqué si lo pude hacer, pero nunca practiqué con la luz, además, en mi casa no estaba bajo presión, todo era tranquilo y silencioso, podía concentrarme sólo en mí, aquí... Era un poco más difícil.

-¡Lo logré! Es, Es una bola de agua, ¡Lo logré! -Gritó Andrew con alegría mientras sostenía en el aire aquella mediana bola de agua.
-Bien hecho Andrew, ahora apunta y tírala con todas tus fuerzas a ese tronco de allá -Andrew asintió y lo hizo, pero la bola salió rebotando en todas partes menos en el lugar que le había indicado Hovarth- Repite todo otra vez hasta que logres darle al blanco

Andrew no muy contentó volvió a repetir el proceso, yo aún seguía en lo mío, tratando de si quiera aparecer una pizca de luz, pero no tenía muy buen resultado, de repente, una fuerte ráfaga de viento salió de mis manos sin querer volviendo el cabello de Johanna un completo desastre, automáticamente comencé a reírme, Johanna me dio una mirada asesina.

-¡Lo hiciste apropósito! -Dijo enojada acercándose a mí.
-Juro por dios que no fue apropósito -Respondí sin parar de reír.
-Eres una... -Johanna gruñó enojada y enseguida llamas salieron de sus manos, pare de reír y mire sus manos nerviosa, ella era capaz de incinerarme viva si quería.

ElementsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora