Blind Eyes 【myg+pjm】

「14」

Yoongi jamás hubiera imaginado que despertar con Jimin entre sus brazos, escuchando el mar de fondo y con la escasa luz que lograba entrar por las ventanas podría hacerlo tan feliz.
Pero allí estaba, sonriendo como tonto al ver a su lindo omega con la mejilla aplastada en su pecho mientras emitía quejidos al intentar acomodarse.

Una vez el rubio encontro una posición comoda ,con su rostro escondido en el cuello del alfa, un tembloroso suspiro escapo de sus labios, estremeciendo a Yoongi quien inconscientemente afianzó más su agarre entorno al cuerpo del menor. Jimin sonrio entre sueños, murmurando un ininteligible "Yoonnie" que enternecio al mayor.

Suaves golpes en la puerta lo sacaron de la burbuja que creo el dulce aroma de su omega, volteando hacia la pequeña figura de Baekhyun quien los miraba enternecidos.

-La cena esta lista, bajen cuando quieran. -Sonriendo dulcemente los dejo solos, encantado por lo adorables que se veían.

Yoongi suspirando intento incorporarse, fracasando cuando el peso de Jimin lo volvió a recostar en la cama.

-Yoonnie, no... -Gimoteando como un niño se abrazo al cuello del mayor, restregando su pequeña nariz en el lugar donde el aroma de su hyung se volvía más fuerte, marcándolo con su propio aroma a frutas.

-Jiminnie, no me marques, que pensara mi suegra y tus tíos. -Avergonzado intento alejarse de su novio, consiguiendo que este se sentara sobre sus piernas aun abrazándolo.- Joder...

-No maldigas... -Con un puchero levanto su rostro, dejando ver un lindo sonrojo que encanto al pelinegro.- Quedemonos aqui, hyung...

-Debemos bajar a comer, dormimos todo el día, no seas flojo...

-No soy flojo, solo... -Arrugando su nariz se removió en las piernas del mayor, sonrojándose a más no poder.

Yoongi extrañado ante el actuar de su omega se sentó en la cama, llevando sus manos hasta la cintura de este, quedando con su rostro a escasos centímetros.
Fue ahí cuando el fuerte aroma a menta y moras llego a su nariz, aturdiéndolo y provocando que su lobo se removiera inquieto.

-No me digas que... -Jimin asintió con un pequeño puchero que fue besado dulcemente por el alfa.- Pero aun te falta más de un mes para volver a entrar en celo ¿cómo paso?

-¡N-no lo se! Y-yo... -Con los ojitos llenos de lágrimas mordió sus labios, moviendo sus orbes con nerviosismo.- S-senti el olor de hyung y... N-no se, se s-sentía bien...

-¿Qué se sentia bien? -Pregunto acariciando con suavidad la espalda del omega.

Jimin se encogió en si mismo, escondiendo su rostro en el pecho del pelinegro, sollozando sin saber porque, solo sentia que queria llorar, y las caricias de su hyung en su espalda no lo ayudaban demasiado.

De repente la puerta de la habitación fue abierta por un alfa de cabellera roja quien, al ver la comprometedora situación en la que se encontraba su mejor amigo se arrepiento de haber entrado sin golpear.

-Mierda, Yoongi lo siento, no sabía-

-No pasa nada, Hoseok, tranquilo. -Para sorpresa del nombrado su amigo estaba sumamente tranquilo, aun con su omega en celo y llorando. Pues las fuertes feromonas que el omega había comenzado a liberar eran claramente producto de un celo no controlado.

Algo confundido junto la puerta de la habitación y se acerco a la cama donde estaba la pareja, cuando se iba a sentar la afilada mirada del mayor se lo impidió. Ahí estaba el alfa, protegiendo a su omega. Al parecer sabia que Hoseok no era una amenaza, pero se negaba a compartir su lugar junto al rubio.