Elena Nott había sido una de las mejores amigas de la pelirroja desde que tenían casi ocho años. Se habían conocido en el callejón Diagon, mientras acompañaban a sus hermanos junto a sus padres para comprar todo lo necesario para entrar a Hogwarts.
Aunque sus personalidades eran muy diferentes y habían acabado en distintas casas, nunca perdieron su amistad, al contrario cada año que pasaba parecían hermanas.
Por eso los demás alumnos se habían acostumbrado a ver a una Gryffindor y a una serpiente caminar por los pasillos, con los brazos entrelazados y riendo,
como si hubiesen escuchado el mejor chiste de todo el mundo mágico.-Es nuestro último año en Hogwarts, ¡lo tenemos que aprovechar al máximo!- Exclamó contenta Elena zarandeando a su amiga.- Por cierto, aún no me has dicho lo que quieres hacer al terminar.
Clarisse rió.
-Es porque aún no lo he decidido, ahora todo el mundo va a trabajar al Ministerio, o se hace auror o incluso medimagos. Todos los Ravenclaw de nuestro curso quieren irse a San Mungo, ¿te lo puedes creer?
-Bueno, ¿entonces que otra cosa podríamos hacer?- Preguntó la castaña.- No hay tanta variedad, al menos en Londres, eso si no te quieres ir a otro lugar del mundo...
-Estoy pensando en estudiar una profesión muggle.
Elena abrió mucho los ojos y miró a su amiga como si estuviera loca.
-¿Enserio? ¿Una profesión muggle? Eso es algo estúpido, y todo tu potencial con la magia se ha ido al garete, ¡yo ni me lo habría imaginado!
Pese a todos los gritos de su amiga, Clarisse ya le había echado ojo a un trabajo muggle, del que se había estado informando el último verano gracias a que la cuñada de su madrastra, Giselle Delacour se había casado con su hermano, y vivían en Francia, exactamente en una casa al estilo muggle que se habían comprado.
El verano se lo había pasado allí.Las chicas llegaron a las afueras de Sortilegios Weasley. La tienda estaba a rebosar, no cabría ni un alfiler adentro, es más, había algunas personas que empujaban para poder salir de aquel sitio.
Clarisse que se había agarrado al brazo de Elena intentaba pasar, Gringotts estaba al otro lado y el padre de Elena, el señor Nott la había mandado a por dinero.
Pero una chica que iba corriendo para entrar a la tienda se chocó con ellas, causando que Elena cayera y sino fuera por los reflejos de Clarisse ella también. Pero sostuvo a su amiga en peso y la chica, de pelo castaño rojizo también cayó.
Elena la reconoció como Dominique Weasley, hermana de Louis Weasley, un Ravenclaw rubio que ella había engatusado para que le hiciera los deberes. Pese a ser Louis menor que Elena había podido hacerles perfectamente las tareas, sacando un extraordinario y supera las expectativas.
-Lo siento.- Se disculpó Clarisse tendiéndole la mano a la otra chica.
-Oh no, la culpa es mía no miraba.- Se sonrojó Dominique por la vergüenza.- Después miró a Elena y frunció el ceño, sabia que había hecho con su hermano.
Al parecer la castaña se dió cuenta por lo que sonrió, como si fuera un logro.
Un hombre pelirrojo con pecas y una gran cicatriz en la cara acompañado de una rubia (que parecía veela) se aproximaron a las chicas.
-Nique cariño, ¿Estás bien?- Preguntó el pelirrojo ayudando a su hija.
-¡Peggo si es la pgequeña Claga!- Gritó una rubia de ojos azules que parecía veela, se aproximó hacía Clarisse para después abrazarla.- Cuanto has cgecido.
-Es Clarisse señorita Delacour.- Musitó la pelirroja casi sin aliento.
-¡Oh! No me llames así cagiño, soy Fleur, ¿sabes? Giselle me ha hablado mucho de ti.
Elena que estaba aun en el suelo frunció el ceño y se levantó con toda la dignidad que pudo, sin dejar la mala mirada.
-¿Conoces a la señora Weasley?- Le Preguntó en el oído a su amiga cuando se separó del abrazo.
Clarisse asintió.
-Es hermana de Giselle Delacour, ¿te acuerdas no?
Dominique que estaba siendo atendida por su padre no le gustó nada como su madre había abrazado a la chica, ni siquiera se acercó a mirar si estaba bien, sólo atendió a la pelirroja, que estaba acompañada de la perra que había engañado a su hermano y lo había utilizado.
Y encima sonreía, pensó mosqueada alejándose de su padre.
-Cagiño, ella es Clara.- La pelirroja susurró Clarisse.- ¿Te acuegdas de ella? Se ha quedado en vegano en casa de mi hegmana, Giselle.
Bill sonrió a la chica que aún estaba siendo estrujada por La medio veela.
-Un gusto.
La castaña carraspeó molesta.
-Lo siento, pero tenemos cosas que hacer, si nos permite nos vamos, Weasley.
Elena cogio del brazo de su amiga y se perdieron entre la multitud.
-Maldita serpiente.- Gruñó Dominique por lo bajo, mientras su madre le hechaba una mala mirada y su padre en cambio, una sonrisa.
De todos sus hijos, Nique era la que más detestaba a los miembros de la casa de Slytherin, como única excepción a su primo Albus. Scorpius Malfoy tampoco le caía demasiado bien.
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Treasure - James Sirius Potter
FanfictionClarisse aún siendo una orgullosa e intrépida leona, se llevaba especialmente bien con los Slytherin, hasta el punto de sentarse con ellos a comer y pasar más tiempo en las mazmorras que en su propia sala. Lo cual, para los Gryffindor era por así de...