XXIV

107 12 3
                                    

La limosina se detuvo fuera de la escuela y el chófer nos abrió la puerta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La limosina se detuvo fuera de la escuela y el chófer nos abrió la puerta.

La escuela lucía impecable, los jardines rebosantes de flores y las farolas estaban adornadas con guirnaldas, y una alfombra de terciopelo vino nos invitaba a entrar al salón, era como el sueño de cualquier chica de nuestra edad, aunque la mayoría de nosotros eramos de familias destacadas, era algo que no vivíamos a cada momento.

Kino nos tendió el brazo a Yuuri y a mí, y los tres entramos juntos.

Kino quería que nos sentaremos hasta el frente, pero preferí que fuéramos a los asientos del centro, eramos las ovejas negras de la familia. si los otros Sakamaki llegaban, nos quitarían.

Un rubio y arrastraba a su hermano hasta nuestra fila, era Kou jalando a Azusa, seguidos de Yuma, quienes se sentaron a nuestro lado, sin embargo, Ruki lo hizo con esa mirada de mala gana.

Los "otros" Sakamaki, como lo habría predicho, se sentaron en primera fila.

Alzamos la vista, y Mama y y mi tío estaban ubicados entre los demás padres.

Cuando llegó la hora, el rector subió al escenario y dió la bienvenida al evento, para dar paso a un hombre que tenía años sin hacerce presente en nuestro colegio como lo había hecho éste año, (al menos no encubiertamente), El director, Tougo Sakamaki, nuestro padre, quien fue recibido por aplausos.

Después de las clásicas palabras, mi padre comenzó a hablar de la situación de éste año, para después entregar los premios y diplomas.

-Al parecer nuestra sociedad al avanzar, lleva consigo un lastre que nosotros mismos nos hemos negado a soltar, tal vez ha sido inconscientemente, incluso con dolo, me refiero a la discriminación en todas sus variantes. Éste año nuestra academia se vió enfrentada a éste gran mal, con una situación que solo fue la punta del iceberg que tratabamos de ocultar.
Sin embargo, hoy entregaremos premios al valor a los jóvenes que han aprendido sobre la vida.

Mi padre tomó una medalla.

-El Instituto Ryutei otorga ésta medalla al mejor deportista en éste año, y no solamente por sus habilidades físicas, sino por su espíritu deportivo, de trabajar en equipo; aunque en un principio no fue así, eso es lo que lo hace merecedor de éste reconocimiento, su actitud de reconocer su error. Ayato Sakamaki- él extendió la medalla hacia el público- pasa por favor.

Ayato se quedó desconcertado, pensó que sería para alguien más, y pasó lentamente. Se le colocó la medalla, nadie aplaudía, al parecer tampoco creían que fuera para él, sin embargo, yo había presenciado aquel cambio y comencé a aplaudir y se unieron Kino y Yuuri, despues se fueron uniendo más y más.

Kuro ★ Diabolik LoversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora