Carpe Diem

Eres el chico malo más bonito que he conocido.

-Oh, basta, deja de moverte.- Habló Louis, colocando la goma de su lápiz sobre la mejilla de Harry.

-Así que... ahora me estás dibujando sin mi permiso.- Louis soltó una leve carcajada ante su comentario mientras asentía alegre.

Éste se limitó a sonreír mostrando sus hoyuelos sin quitar la mirada de la carretera. Comenzaba a ser bastante tarde lo cual significaba que tendrían que parar en algún motel o dormir en el colorido auto, y sinceramente no pensaba dormir así de incómodo y mucho menos tan cerca del joven risueño a su lado.

Lo cual era lo único que le molestaba en ese momento, con las horas que había estado con el muchacho se dió cuenta que tal vez algo de compañía no estaría mal para un viaje tan largo, pero Harry no era estúpido, sabía que había algo más que un simple "No le busques razón a lo que hago".

Miró de reojo a Louis, el pequeño chico estaba sentado con las piernas cruzadas sobre el asiento del copiloto dibujando supuestamente su rostro, estaba tan sumido en sus propios pensamientos que ni siquiera se percató de la intensa mirada sobre él, aquella imagen le trajo una oleada de tranquilidad al mayor; Aún no sabía en qué se metía y todo esto era un verdadero revoltijo de ideas sobre su cabeza pero al hacer caso a todo lo que el ojiazul repetía tal vez había certeza en eso, ¿Qué objetivo tenía mantenerte preocupado por todo?, o tal vez esto no aplicaba en delincuentes fugitivos.

-¿Cuántos años tienes, Hazz?.-Preguntó de repente sorprendiendo a Harry.

-¿Cómo me llamaste?.- Frunció el ceño girando por completo su cuerpo hacia el menor.

-Hazz.- Susurró Louis, sin evitar teñir sus mejillas de un rosado intenso.

-¿Por qué?.-

-Por que suena bonito y todos merecen ser tratados con cariño, ¿No lo crees?.- Louis sonrió al lo último, sin poder sentirse orgulloso de lo que acababa de decir.

-En ese caso no estoy acostumbrado a ese cariño. Me pone incómodo.- Dijo serio, volviendo a mirar al frente.-A tu primera pregunta; tengo 28 años.-

-Wow, si haces algo malo ya te pueden meter a prisión.- Louis llevó ambas manos a su boca con sorpresa.

-Eso es algo de lo que no me había percatado.- Habló con ironía.

-Hazz.-

-¿Si?.- Levantó una ceja mirando nuevamente a su dirección.

-¿Por qué te incomoda ese tipo de cariño?.- El menor se hizo más pequeño en su lugar, creyendo que tal vez estaba siendo muy entrometido.

-Por que tal vez no tengo la mejor de las relaciones con él.- Respondió sin un ápice de emociones.

-¿Estaría siendo muy grosero si pregunto por qué?.-

Harry soltó una sonora carcajada sin mirarlo ni un momento.

-Sí, es muy grosero.- Respondió seco.

-Oh, lo lamento.- Bajó su mirada y continuó dibujando.

Aquello no lo mantedría triste, Louis sólo cayó en una pequeña decepción al darse cuenta que Harry aún no confiaba en él.

-Había un niño de unos... cuatro años.- Habló Harry de repente, atrayendo toda la atención del menor.-Éste niño vivía en un orfanato junto a su hermana y todos los días se enfrentaban a los insultos, golpes y malos tratos que todos ahí les daban y sin una pizca de cariño,  el niño desconoció el significado de la palabra así que al crecer simplemente no sabía cómo demostrarlo.- Harry pareció dubitar por un momento antes de seguir. -Entonces, el pequeño niño recibiendo el peor de los tratos se sintió feo y débil, y sumando que era huerfano supongo que su vida era una verdadera mierda.- Sus ojos comenzaron a aguarse sin soltar lágrimas.

-Hazz... si te pone incómodo contarme sobre esto está bien, fui muy grosero por preguntar.-

-No, está bien, supongo que algún día saldría de todos modos.- Con su mano derecha retiró las lágrimas que en poco comenzarían a brotar. -En fin, el niño y su hermana sólo huyeron lejos, vivieron un largo tiempo en la calle hasta que el pequeño comenzó a tomar aquellas cosas que no le pertenecían al darse cuenta que su hermana necesitaba más atención y bueno, nunca hubo tiempo para recibir afecto más que el de su pequeña hermana, así que no, supongo que por esa razón el niño que se convirtió en hombre no obtuvo cariño de ese tipo.- Louis podía notar lo que había en la mirada de Harry.

Su abuela siempre le habló de ser bueno con aquellos que lo necesitaban, ser bondadoso y amable; Louis sólo quería hacer sentir mejor a Harry y no era exactamente por que sintiera lástima por él.

-¿Y el niño... siguió sintiendose feo y débil?.- Preguntó Louis colocando su mano sobre el brazo de Harry.

-Lo hizo hasta que conoció la violencia, entonces se dió cuenta que su físico nunca fue el problema realmente y dejó de importarle.-

-Yo creo que ese niño fue muy valiente, Hazz. Y aunque tomó malas decisiones tiene un gran corazón.- Dijo el menor, mirando directo a los ojos de Harry.

-¿Ah si?, ¿Lo crees?.-

-Yo lo creo, ¡Ese niño podría ser la mejor persona del mundo!. Todos en el orfanato fueron unos estúpidos con él, las hermanas fueron muy estúpidas también, y aún así el niño cuidó a su hermana e hizo todo lo que él podía en ese entonces, ¿Pero sabes? aún con todo esto yo creo que eres el chico malo más bonito que he conocido.-

Harry soltó una estruendosa carcajada por lo último.

-En verdad que eres un caso único.-

Louis se lanzó a abrazarlo cuidando que Harry siguiera viendo al frente de la carretera.

-Louis.- Advirtió.

-¿Si, Hazz?.- Susurró, mantenía su cabeza en el cuello del mayor con los ojos cerrados mientras olía el aroma de Harry.

-No quiero la lástima de nadie.-
Louis lo soltó para mirarlo directamente a los ojos.

-Debes ser muy tonto si crees que yo te abrazaría sólo por lástima.- El menor se estiró para tomar su cuaderno y mostrarle el dibujo a Harry.-Eres muy guapo.- Dijo, mirando su creación.

Más sin en cambio Harry no miró en ningún momento el dibujo, más bien quitó su mirada del frente para posarla sobre el muchachito revoltoso que tenía a un lado de él.

-Gracias, Lou.-

-Gracias por tenerme confianza, Harry.-