Reto de drabbles

Parte 1 Un dia en la playa

El maldito calor era asfixiante, el sol quemaba. Sesshomaru buscaba entre la multitud a la azabache con la que se había quedado de ver pero no la encontraba. Estaba a punto de largarse de aquel asador humano, cuando a lo lejos distinguió a un grupo de chicas saliendo de las olas del mar. Era imposible no notarla, destacaba de entre las demás por esas curvas perfectas y ojos azules como el mismo mar.

Llevaba puesto un traje de dos piezas de color verde esmeralda, tanto la parte de arriba como la de abajo luchaban con contener semejantes proporciones de carne. El albino bajo de un solo trago la cerveza fría que llevaba en la mano. Una gota de sudor bajo por su frente y estaba seguro que no tenía nada que ver con el calor.

 Kagome que hace unos segundos parecía muy concentrada en sus asuntos ahora buscaba impaciente con la mirada algo o mejor dicho... A alguien. Dorado y azul chocaron, la chica le sonrió. Se zafó rápidamente de sus amigas y comenzó a caminar hacia el.

El ojidorado no se perdió uno solo de sus movimientos, el sensual campanear de sus caderas, como con cada paso rebotaba su busto, las gotas de agua que resbalaban por su blanca piel...

 --Sesshomaru viniste-- le dijo apenas y estuvo frente a el, con una alegría difícil de disimular.

 --Hum. 

Sin previo aviso lo abrazó. El le correspondió pero era difícil no abalanzarse sobre ella cuando sentía perfectamente sus senos mojados contra su pecho y su pelvis rozando su entrepierna. Paso su mano por su cintura, envolviéndola. Olía a jazmín, como siempre. Y entonces paso... Se puso erecto. Creyó que Kagome se desprendería de el sonrojada y saldría corriendo, pero en vez de eso, rozaba adrede sus caderas contra el.

 --Sesshomaru-- susurró. 

Su cabeza también estaba clavada contra su pecho, pero el albino alzo su mentón. Se miraron un instante, unieron sus labios y luego sus lenguas. En un beso desesperado, frenético. Cuando se separaron ella permaneció unos segundos con los ojos cerrados, impactada. Cuando los abrió vio que

Sesshomaru se estaba bajando los vaqueros y quitándose la camiseta blanca.

--¡¿Qué estas haciendo?!-- preguntó sorprendida.

 El no le respondió, se limito a seguir desvistiéndose enfrente del puesto de bebidas y frente a decenas de pares de ojos. No pudo evitar notar su musculatura, y como la tela se deslizaba por su cuerpo. Cuando menos lo esperaba estaba envuelta en los fornidos brazos del albino en forma nupcial. Contuvo un grito. Comenzaron a caminar hacia la playa. Se hundieron en el agua hasta que tapó al hombre hasta la cintura. Las olas chocaban contra su cuerpo.

 --Kagome-- susurró.

 --¿Si?-- preguntó ruborizada. ¡Por Kami era tan atractivo! Con ese cabello plata corto y ojos dorados.

 --¿Quieres ser mi novia?

 --¡Si si quiero!-- gritó extasiada-- ¡Crei que jamas lo preguntarías!

Por primera vez vio que el serio chico sonría. Se volvieron a besar y el resto del día se la pasaron revolcándose entre las olas y bueno... casualmente besándose en el mar.