I.

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Maravillado.

Esa era la palabra perfecta para describir como se sentía el joven pupilo de All Might.

Con el uso del One for All full cowl, al saltar por los edificios por las noches, Izuku se sentía tan libre. Con sus risos esponjosos moviendose con el aire y este chocando con sus mejillas. Como si pudiese volar y alcanzar las nubes.

Ahora lo estaba haciendo, literalmente.

-¡Wow! ¡Estamos tan alto! ¡Es como si fuera una ilusión!- Exclamó el chico de iris esmeralda animado, estampado su cara en la ventanilla para apreciar mejor el bello paisaje.

-¿Es tu primer viaje en avión, Deku-kun?- Preguntó Uraraka asomando su cabeza a como podía por su baja estatura, pues se encontraba en los asientos atrás del mencionado.

-¡Si! ¡Es impresionante!-.

-Midoriya-kun no subas tanto la voz, podría molestarle- Habló Iida, asomando su cabeza también y apuntando al acompañante de asiento de Izuku. El estaba sentado junto con la castaña, atrás.

El aspirante a héroe se dio un golpe mental, ¿Cómo podía haberse olvidado de que no estaba sólo? O aún peor, ¿Cómo se le había ocurrido emocionarse tanto para acabar gritando, sabiendo que su compañero de asiento estaba dormido?

Poco a poco sintió que como algo se movía en su lado derecho y observó unos iris ojerosos que se abrían varias veces intentando enfocar.

-Shinsou-kun pe-perdón, no quería despertarte- Le dijo Midoriya nerviosamente, mientras el aludido se tallaba los ojos tranquilo.

-No te preocupes, igual ya dormí demasiado-.

-Tus ojeras me dicen otra cosa, Shinsou-san- Mencionó Ochako entrando en la plática, asomando su cabeza por segunda vez y causándole risitas a Deku. De seguro, si seguía viendo la cara de su mejor amiga, que apenas alcanzaba a hablar por estar con el cinturón abrochado, estallaría en carcajadas.

-Nah, las ojeras son comunes- Respondió sereno el de cabellos morados, restandole importancia. -¿No están preocupados por el examen?-.

-Claro que si, es el examen final para pasar a tercer grado. Además el práctico tiene mucho más valor que el escrito-.

-Eso es cierto, Iida-kun, sin embargo en vez de sentirme preocupada por el examen, me emociona mucho hacerlo- Confesó Uraraka, dándole la razón al de lentes.

-¡Será en Tokio! ¡Los villanos ahí deben de ser aún más fuertes!- Expresó Midoriya al hacer puños con sus manos, estaba decidido a dar lo mejor de sí para la prueba.

-¡No! Deku-kun lo mejor no son los villanos, si no los lugares a los que iremos. ¡Hay un montón de lugares a los que quiero visitar!- Contradijó la chica con su opinión, comenzando una conversación entre ella e Izuku sobre las cosas que se morían por hacer. Sería una semana larga fuera de su ciudad natal, en la cual cuatro días eran exámenes, y los otros tres eran libres.

-Yo sólo espero aprobar, con el festival deportivo de este año conseguí la oferta de transferencia a su clase. Segun el director, sólo necesito pasar ambos exámenes y en tercero seré tranferido-.

-Ojalá lo logres Shinsou-san-.

-Si, sería genial tener un compañero más en la clase. Como delegado me encantaría que eso pasara-.

-¡Esfuerzate en el examen! Te estaremos esperando Shinsou-kun- Dijeron el grupo de amigos, haciendo que una pequeña sonrisa se formara en los labios del mencionado de manera inconsciente mientras les respondía con un asentimiento.

ImprudentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora