La apuesta

Parte VII

Hace 4 meses:

Julia

¡Feliz sábado para mí y mi soledad! Estaba deprimida, aburrida y lo peor de todo, sola. La idea de llamar a Lisa pasó casi mil veces por mi mente. Me bloqueó de casi todas partes y para peor, ni siquiera me habla en el trabajo y eso que soy su jefa, técnicamente.

Después de estar veinte minutos con el teléfono en la mano, le marqué.

Uno… dos… tres pitidos y nada. Quería cortar y acostarme a llorar. Me odia. Me odio.

—¿Hola? —respondió una voz femenina. Pero no era la de Lisa.

—Hola… —intenté decir— ¿se encuentra Lisa?

—Sisi, aguarda un minuto —dijo la chica y alejó el teléfono. Con un simple “cariño, te buscan” mi corazón se partió en mil pedazos.

Kevin

Hoy saldríamos en una cita doble con Ash y Amalia. Me sentía mal por no invitar a Julia pero para empezar, era una cita de parejas y con lo que ha estado sufriendo por Lisa le haría peor y no solo eso, no podríamos hacer de parejas porque Julia no sabe nada de esto. Nos planeamos una mentira de las buenas, Josh y yo le dijimos que iríamos donde Gianluca a ver una pelea, Ashton que tenía una cita con la chica que entrena en el gimnasio y Amalia le dijo que saldría a cenar con sus padres. Eran mentiras creíbles para Julia. En su lugar, decidimos ir al cine a ver alguna mala película de los años 00’s y luego cenar en Marrocos.

Julia

Define inutilidad: llamar al amor de tu vida, que esté con otra chica y como no tienes idea de que decir le pidas la carpeta con los papeles que se supone ella debe llenar. Además de tener el corazón partido en cien millones de pedazos, debo llenar estúpidos papeles.

Le dije que cerca que las ocho pasaría a recogerlos, eran las cinco. Suficiente tiempo para llorar.

Kevin

Amalia se aburría como hongo, pero no puedo entender como no le emociona ver Star Wars. Crecí con Ashton y Josh mientras que año a año esperábamos por estas películas ¡son mi maldita adolescencia!

Julia

Me monté en coche y conduje mientras escuchaba horribles canciones deprimentes. No debía llorar, no podía humillarme así frente a ella y ese gato que debe de tener como novia

¡Pero que perra que es! La odio, la detesto con mi vida ¿qué mierda tiene ella que no tenga yo? De seguro es una imbécil que no la merece ¡yo no la merezco! Nadie la merece. Es demasiado, para cualquiera.

Kevin

Después de la película nos fuimos a por un helado y nos sentamos en la rambla. La vista a la playa era hermosa y quería compartir esto con Julia. Sería todo cien mil veces más divertido. Pero no podía, no me animo a decirle esto ahora, simplemente no puedo.

Ya cerca de las ocho nos fuimos a Morroco ¡me moría por las costillas con salsa barbacoa!

Julia

Había sido una tortura ver a esa chica, ver a Lisa tan… tan desigual a todo y yo con mi cara de muerto ¿cómo puede olvidar tan rápido? Dios.

Alterada, desesperada, conduje hacia la avenida principal. Frente a Morroco hay una tiendita que vende unos burritos que pueden rellenar el agujero de mi alma. Mientras buscaba un lugar para estacionar un Nissan Sentra color plateado llamó mi atención ¿Ashton trajo a su cita a Morroco? Pasé con el coche intentando no llamar mucho la atención y miré por la ventana.

Estaba Ashton, pero también Amalia, Josh y Kevin. Todos en una misma mesa. Mi corazón se detuvo y el pecho se me contrajo. No podía creer lo que estaba viendo.

Kevin

Le pedí silencio a los chicos, Julia me había marcado. Nervioso, atendí el móvil.

—Hola —dijo una voz ronca desde el otro lado— ¿vendrás a cenar?

—Nono, vinimos a comprar unas cosas a una tiendita. Comeremos donde Gianluca —dije intentando parecer relajado.

Un enorme silencio me inundó. Julia no se encontraba bien.

—Oh, está bien —dijo Julia finalmente— llamaré a Ashton a ver si terminó su cita.

—Vale, te quiero nena —dije rápido y cortó. No respondió.

Los chicos me miraron bastante alterados, intenté calmarlos con un “llamará a Ashton pronto” pero no podía calmarme. Algo andaba más que mal.

Julia

No solo perdí a Lisa, acabo de perder a mis mejores amigos, para siempre.