Tiene tuberculosis...
Tiene tuberculosis...
Yuri no pudo evitar morder sus labios, luego de aquella noticia y empujo a la mujer para correr, correr sin saber hacia dónde se dirigía exactamente, al salir del burdel luego de cambiarse y pensarlo mejor corrió hacia el bosque no muy lejano, corrió hacia aquel lugar en donde previamente lo había llevado el amor de su vida.
—Tú no tienes eso... ¡Tú no puedes tener eso! ¡No te doy permiso de tenerlo! —Corrió con todas sus fuerzas como si intentase escapar de su realidad, adentrándose cada vez entre los árboles para ir al lugar exacto en donde había estado la noche anterior, no encontrando a nadie luego de llegar. — ¿Dónde estás? ¿¡DONDE ESTAS, VIKTOR!? — Grito en aquel lugar, viendo fijamente el agua que corría por aquella quebrada y comenzando a caminar en los alrededores de esta, esta vez a un paso más lento, mientras su corazón se destrozaba y dejaba salir su llanto amargo, recordando los pocos pero significativos momentos que este le había brindado. — Habías dicho que estarías a mi lado siempre... No puedo permitir que te vayas de esa forma... ¿Qué voy hacer...? — Termino por arrodillarse sobre el pasto, mientras llevaba sus manos hacia su cara intentando ocultar la cantidad excesiva de lágrimas que salían, al recordar cada cosa que le había dicho Lilia. Yuri más allá de preocuparse por cuantos diamantes, joyas o dinero podía conseguir como ocurría en el pasado, estaba sumamente desesperado al sentir que la situación se salía de sus manos, perdiendo a su gran amor.
Al levantar su rostro, pudo notar una pequeña cabaña a los lejos, la idea de que Viktor estuviese allí lo invadió por completo, así que de inmediato se levantó para correr hacia aquel lugar y así poder conseguir una solución a su desesperación. —Te amo... Te necesito... Debemos escapar... ¿Lo recuerdas? Como lo dijiste aquella noche... Romper los muros que están entre nosotros. — Se dijo así mismo, llegando luego de minutos hacia la casa, para caminar directo hacia la puerta y allí tocar de forma insistente, sin embargo para su mala suerte, no parecía haber alguien.
— ¿Dónde estás...? —Su pánico aumentaba al pensar, que quizás nadie vivía allí o quien lo hacía no era la persona que buscaba. — Yakov... Ya debe estar buscándome... Esto se complica cada vez más... Necesito verte cuanto antes. — Respiro profundo, para sentarse en las pequeñas escaleras de madera que parecían haber en la casa, para recostar su espalda sobre un muro y contemplar el pasto a lo lejos, escuchando el relajante sonido del agua correr, intentando calmarse, esperar lo que tenía deparado la vida para el. —Si fuese tú, es probable que estuviese en un lugar como este, porque esto es lo que me inspiras... Calma...—Dijo aquello para sí mismo, mientras intentaba relajarse y cerraba sus ojos un poco, para pensar que al final todo saldría bien, no podía dejar de lagrimear y empuñar su boca, con solo pensar que podría perderlo. Pero luego de minutos y confiando en que nadie lo encontraría, termino por dormirse.
Cuatro horas después en aquella cabaña.Había estado agotado por aquella noche con su amado y su despertar que había tenido con Lilia, no fue el más agraciado así que entre el estrés y el cansancio lo habían doblegado para caer en los brazos del sueño, sin embargo, luego con el pasar de las horas, este se fue disipando, permitiéndole abrir sus ojos, esta vez estando sobre una cómoda y cálida cama. — ¿Qué? —Esbozo, mientras intentaba recobrar la conciencia y se removía para observar a su alrededor, siendo invadido por el olor a madera y siendo iluminada su vista con la chimenea que estaba ante él, sintiéndose agusto en aquel lugar, mientras un brazo rodeaba su abdomen y al ver a su lado pudo notar que era la persona más hermosa que había visto dormir.
—Mi amor... — El rubio rozo su mano suavemente sobre su blanquecino rostro, para acostarse de lado y verle fijamente mientras se acurrucaba poco a poco en sus brazos. A su mente habían llegado la infinidad de temas que debía tocar con él, pero el momento era tan acogedor que no quería arruinarlo, por primera vez quería dejarse invadir por su calma.
ESTÁS LEYENDO
Diamonds for Love [Diamantes por amor] [Vikturio] [PLOV]
RomanceLa codicia puede aparecer, luego de constantes maltratos y fue así su vida... La vida del hombre que llegue amar, un niño recluido en un ambiente en donde le das tu cuerpo al mejor postor, mientras disfrazas aquel acto oscuro e insensible con music...