Ya han pasado varios meses desde que me fui de mi universo, no he vuelto a saber de error o de mi hermano.
" Solo espero que este bien"
- sii, claro que esta bien despues de todo es el gran papirus sin su molesto hermano...- susurre
Voy camino a waterfall a mi lugar escondido, estoy algo cabizbajo amo este lugar y a honey y berry pero quiero saber de el, se que quizas el no me extrañe y que estara mejor sin mi, pero aun asi me gustaria verle solo de lejos.
Nose en que momento llegue al basurero.
" Se suponen que me dirigiria a otro sitio, por que vine aca?"
Y entonces lo recorde, todas esas veces que vine aqui con el a recoger cosas humanas, recuerdo cuando encontro su primera espada y enseguida quizo ser guardia real.
- je... Que recuerdo..-
"Hermano..."
Mis pensamientos fueron interrumpidos por ruidos extraños, vire mi cabeza y lo vi.
- error- dije seco
- oh... Hola mustard... Que tal te ha tratado este universo?- me pregunta ironico
- bastante bien, aunque no creo que te importe, si viniste para tratar de convencerme nuevamente olvidalo....- dije con la mirada seria
- pues si ese es el caso.... Olvidate de tu hermano... No volveras si no me dejas ocupar tu love...- dijo serio y algo furioso
- no estare aqui por siempre- dije seguro
- je.. ya lo veremos, si cambias de opinion puedes buscarme - dijo para despues desaparecer por un portal.
"Este enfermo se quiere aprovechar de mi pero no se bien para que aun"
me enfurecí he inconscientemente active a mis blasters y muchos huesos rojos a mi alrededor.
- lo odio!!! me quito a mi hermano!!!- grite para luego con mis blater disparar al piso causando una gran lluvia.
- vaya a eso le llamo un diluvio-
me vire y lo vi a el, con su poleron naranja remarcando sus costillas y una hermosa sonrisa dirigid a mi.
me salieron lagrimas al verlo estaba desesperado y no sabia que hacer... solo quería su consuelo.-honey- me abrace a el
- nunca espere tan hermoso como este día, la lluvia te sienta bien enano- dijo tomándome la mejilla.
-lo viste?- caí en cuenta de el visitante que estuvo hace poco, y lo mire sorprendido.
- si, y escuche todo... tranquilo nada malo pasara- me dijo abrazándome nuevamente y haciendo caricias en mi cabeza, protectoramente.
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hasta que te conoci
Randomese pobre pequeño lleno de cicatrices nunca penso tener a un aliado tan poderoso como el destino para que llegase al rescate de su pobre alma.