Lost Boys

Capitulo 7. All, la aldea de Todos.

Capítulo 7

All, la aldea de todos.

En la tienda principal de la aldea, se encuentra sentado el jefe del pueblo de "La aldea de todos", su esposa y en el medio su joven y sonriente hijo, frente a ella se encuentra una bella mujer de piel canela y cabello rojos, a su lado su joven pupilo de piel pálida y cabellos negros.

Ambas mujeres estaban de brazos cruzados con sus cejas casi juntas al mantener su ceño fruncido, por su parte los más jóvenes eran otra historia, el de cabellos rubios no dejaba de sonreír y desbordaba felicidad en todo su ser, no ha despegado la vista del otro joven de cabellos negros quien considera en sus adentros no mirar la segadora sonrisa del otro, más era inevitable, pues no importa lo que su mente pensara sus ojos siempre lo buscaban.

—Nuevamente. -habló el jefe de la aldea, llamando a la atención de todos menos de su hijo-. Pido disculpas por la interrupción de mi hijo.

—Se nota lo impulsivo que es, eso podría costarle caro en la batalla. -respondió Hana, cosa que indignó a Nana.

—No considero eso como una debilidad, eso incluso ha salvado la vida a cientos de mis guerreros.

—Pues es una mala estrategia. -responde cruzando sus piernas aun con sus manos cruzadas en el pecho-. De hecho con Sorahiko ya había hablado muchas veces sobre eso. -Torino recibió la mirada de su esposa en desaprobación, sabía desde hace mucho tiempo que ellas no eran las mejores amigas del mundo y la raíz del giro de la situación su injustificada rivalidad crecía un poco más.

—Nuevamente pido...

—Pues Sorahiko, Mi esposo -interrumpió y recalcó a Nana, con un tono de voz poco común en ella-. Esta de testigo que en las últimas 6 lucha a la cual hemos apoyado, ninguno y recalcó, ninguno de mis guerreros ha padecido. Además de eso mi hijo con solo 14 años es el principal candidato para portar la espada del guerrero legendario.

—... 14 años ... -Susurró Shota cubriendo suavemente su boca para no ser escuchado, más Yagi si lo escucha claramente y más alegre que antes responde.

—Cumpliré los 15 en el sexto mes del año que viene, mido 1.75 y soy parte de los guerreros de la aldea. –El otro joven de negros cabellos no puede evitar imaginarse una cola salir de atrás de aquel chico junto a unas peludas orejas de cachorro, definitivamente a pesar de su altura, sin duda parecía un atento cachorro esperando órdenes, sus órdenes. Por su parte la maestra del peli negro, aunque impresionada por la actitud del joven no se demostró sorprendida delante de Nana, pues sería su derrota.

—Toshi. -le habló su padre, tocándole el hombro-. Porque no llevas al joven aprendiz de Hana, Shota, a conocer la aldea. -a pesar de que tanto las mujeres como el mismo Shota querían desistir a esa orden dada, Toshi fue más rápido y toma la mano derecha del joven y lo arrastró fuera de la tienda, con una sonrisa incluso más deslumbrante que la poseía minutos antes, sin dejar espacio para la vacunación del mayor. Ambas mujeres observan con un poco de tristeza la salida y sólo regresan en sí cuando Sorahiko aclara su garganta fuertemente-. Ya que los menores se han ido, me gustaría que habláramos seriamente, pues no creo que la maestra Hana haya viajado tanto solo para disfrutar las fiestas de mi pueblo.

—Me agrada que no pierdas esa perspicacia que te caracteriza Sorahiko. -la mujer se apoya en el respaldo de la silla en donde se encuentra sentado, su expresión ahora denotaba mucha tristeza-. Como sabrán soy un dragón de segunda generación, más no por eso soy débil, al ser concebida una de las primeras, mi conexión con la magia que existe en la tierra es mucho más fuerte que cualquier de mi generación, por eso últimamente he estado ayudando a canalizar la magia del telar del destino que maneja Oráculo en la isla de Aku-sama. -la mujer se detiene un momento y cambia su semblante de uno serio a uno melancólico-. Pero hace diez lunas ... -la mujer suelta un suspiro cansado y prosigue luego de reordenar sus pensamientos-. Varios hilos del destino fueron rotos, en su mayoría son mundos paralelos a estos, pero hay cuatro que pertenecen a este mundo.