Capítulo 5

2.8K 114 27
                                    

—¿Pero qué estoy pensando?—golpee mi frente.

Es una locura que yo escape de aquí, jamás podría hacerlo por más que quisiera. Livi ahora más que nunca me tendrá más vigilada.

—A menos que...

Haré lo posible por resolver esto, o tendré que irme de nuevo a casa. No puedo dejar a Livi así.

Días después

—Livius—entraba a su oficina

—¿Cómo va te dije que me llamarás?—me veía de reojo.

—Cariño—dije algo enojada—¿Necesitas algo?

—Mm ahora que lo dices tengo hambre así que vamos a comer—se levantó de su silla.

En el comedor

Había un silencio algo incómodo, pensaba y pensaba en un tema hasta que me acorde de algo muy importante para mi, los niños del reino.

—Cariño—odio llamarlo así, prefiero Livi.

—¿Qué quieres?

—Me gustaría que hiciéramos un proyecto juntos, en el cual hagamos un lugar para los niños huérfanos y...

—No.

—Y ayudarlos y...espera...¿Qué?

—Lo que oíste—siguió comiendo.

—Pero...Livi...ellos son el futuro del reino.

—No me importan los niños—se levantó algo indignado—Tengo mejores cosas que hacer.

¿Pero que le pasa? Esos niños necesitan ayuda y él no quiere hacer nada por ellos. Qué horror de persona.

Fui rápidamente a mi habitación, estaba muy molesta con él. Tenía que irme de aquí pero no quería dejar a esos niños, ellos no tienen la culpa. Como reina tengo que cumplir con proteger a mi súbditos.

—¿Nike-sama?

—Quiero que llamen a un arquitecto ahora mismo por favor—le dije a unos guardias—Estaré en la biblioteca.

—A sus órdenes—dijeron al unísono.

—Esto no se quedará así Livi—pensé molesta.

Horas después

Narra Livi

Después de comer fui rápidamente a mi oficina donde hablaría con un conde, al parecer llego días después de lo esperado.

—Rey Livius—hizo una reverencia.

—Me alegra que haya podido venir—hablé serio.

—Lamento la molestia pero tuve un problema con mis pequeños hijos—sonrió nervioso.

—Entiendo.

—¿Usted no planea tener hijos?

—No—conteste serio—Odio a los niños.

—Ah...—se puso nervioso—Entiendo su majestad, mejor hablemos de los asuntos importantes no cree.

—Me parece perfecto—entramos a mi oficina.

Odio a los niños. No soporto oírlos llorar, odio que hagan berrinche, crecen y piden demasiada atención.
¡Agh! Es odioso hasta pensar en eso.

Con Nike

Después de que llegó el arquitecto empezamos a trabajar en planos a escondidas, no queríamos que Livi se enterara de que estábamos haciendo.
Solo quiero ayudar a esos niños, y él no es un impedimento.

Semanas después

Livi no había podido estar con Nike ni siquiera para almorzar. Ella se ha sentido sola pero se había acostumbrado, lo hizo desde que cambió.

—Ah—suspiró—Otro día sin Livi—comía sola.

Veía mi plato de sopa, no tenía ganas de comer, de hecho no he tenido ganas de nada estos días.
Empecé a ver borroso, por más que parpadeaba no se iba el mareo.

—¿Nike-sama?—me llamo alguien pero no reconocí su voz.

Tape mi boca y corrí al baño para poder vomitar, tuve demasiados ascos en ese momento.

—Llamen al doctor—gritó alguien.

Horas después

—¡Livius-sama!—entraron a su oficina.

—¿Qué ocurre?—preguntó.

—Es Nike-sama.

Livi los miro confundido pero no lo dudo más, se quito los lentes y corrió a su habitación abriendo la puerta de golpe encontrándose con medio personal ahí adentro.

—Nike—se acercó a ella—¿Qué le pasó?

—Livius-sama—habló el doctor—Nike-sama tuvo una recaída por el exceso de actividades en su rutina y por algo más...

—¿Qué?—preguntó desesperado.

—Nike-sama está embarazada...

El paso del Tiempo (Livius X Nike)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora