Lady Lina

Capítulo 15

Tres días después

Pensé que cada día que pasaría se olvidaría más el tema, pero estaba equivocada. Cada vez que salgo la gente me mira con desprecio. Las mujeres me miran de reojo y me ponen malas caras y los hombres me dicen cosas inadecuadas que prefiero no decir

Mentiría si dijera que no estaba harta y solo han pasado tres días, pero tengo que aguantar y no dejar que Lady Taissa consiga lo que quiera porque me han llegado noticias de que va por allí diciendo soy una fulana que mete hombres a su habitación y como no está mi madre pues aprovecho la casa

En cambio, Byron no lo he visto desde entonces

Dejé de divagar en mis pensamientos y bajé a desayunar con Anida

-Buenos días, ¿Cómo has amanecido?- preguntó

-Bien- le di una sonrisa para que se lo creíera

-Me alegro

-Anida, saldré después de desayunar al pueblo para comprar algunas cosas- dije

-¿Quieres que te acompañe?- preguntó

-Estaría bien- respondí- ¿Cuántos días exactos quedan para que vuelva madre y tía Debbie?

-Exactamente quedan diez días

Soplé

-No te preocupes por tu madre- me cogió la mano- Estoy segura que te apoyará en esto

-Eso espero- dije- ¿Vamos al pueblo?

-Si

***

Llegamos al pueblo y compré las cosas necesarias. Anida y yo caminábamos por un parque mientras comíamos un delicioso helado de vainilla

-Lina- me llamó Anida

-¿Si?

-¿Quieres que después vayámos a casa de Aylana?

-Si claro- dije segura ya que me apetecía ir

Seguimos caminando hasta que llegamos a una zona donde no había mucha gente

-¿Volvemos ya?- pregunté

-Si

-Lina, ¿Me invitas a tu habitación?- escuché que dijo un hombre mientras sus amigos reían

-No les hagas caso- dijo en mi oído Anida

-Vámonos- entrelacé mi brazo con el suyo y caminámos a paso apresurado

Sentí como alguien me estiró bruscamente que me hizo daño y lo mismo otro hombre hizo con Anida. Nos metieron en un callejón

-Suéltame maldito bastardo- intenté zafarme de su agarré pero me tenis bien sujetada

-Yo quiero pasar un buen momento- dijo susurrando en mi oído

-Yo no así que déjame- empecé a desesperarme

-A Lord Byron si que te gustó meterlo en tu cama eh- dijo entre dientes

-Yo no he metido a nadie en mi cama- las lágrimas se empezaron a asomar

Vi que Anida estaba en la misma situación que yo

-Bésame- exigió

-Eso no ocurrirá- le di una patada en sus partes más privilegiadas e intenté ayudar a Anida

Fue inútil mi intento de escapada ya que me volvió a agarrar pero esta vez me tiró al suelo y se montó encima mío

Me dió un golpe en la cara que me hizo mucho daño

-Eres una maldita fulana y ahora mismo me complacerás- dijo más enfadado

Empezó a rompee mi vestido dejando a la vista el fino camisón que llevaba por abajo

-Déjame- dije en un hilo de voz pero audible

Mi vista estaba muy nublada y casi no veía nada pero si vi como Byron estaba allí y cogió al hombre que tenía encima para después golpearlo

Me levanté como pude intentando tamparme un poco y ayude a Anida para salir de aquel horrible callejón

-Gracias a dios que Byron estaba aquí- dijo Anida

Por suerte, ella no ha salido tan dañada como yo

-Seguidme- dijo Byron y eso hicimos

Subimos a su carruaje y prendimos un incómodo viaje hasta a casa de Aylana como ordenó Anida. No quería ir a nuestra casa ya que tenía miedo y cómo estamos solo nosotras dos, nunca puedes saber quien puede entrar

Al llegar, Aylana nos invadió a preguntas pero yo lo único que le dije fue que me dejara un vestido suyo

Subí a su habitación y elegí uno cómodo que era para estar por casa. Me lo puse y me miré al espejo. Toqué el moratón que tenía en la mejilla y empecé a llorar desconsoladamente

-¿Por qué me tenían que pasar estás cosas a mí?- me pregunté a mi misma

-Porqué yo fui el estúpido que te besó hasta que esto te pasara- me giré y me encontré con un triste Byron- Siento mucho por lo que estás pasando

-Es verdad que es tu culpa pero yo también la tengo- agaché la mirada- Cuando te besé por primera vez en la boda, no debí hacerlo

-No debiste pero a mí también me gustó- levanté la mirada atónita

¿Enserio le gustó?

No aguanté más y se lo dije

-Byron, cásate conmigo

-¿Qué?- me miró sorprendido- ¿Qué estás diciendo Lina? No sé si te has olvidado de que estoy comprometido

-Da igual- dije- Ahora nadie querrá unir su vida conmigo pensando que soy una meretriz y no quiero quedarme toda mi vida soltera

-Me da igual- su cara cambio a una más seria- Búscate a un hombre mayor que no se entere de nada pero yo no quiero hacerlo

Dicho eso, abrió la puerta para salir pero lo agarré del brazo

-Que sepas que esto que me está pasando es por tu culpa- dije sosegadamente y dejé que se vaya

Pero el resto de mi día fue llorar como una niña pequeña por su piruleta