Lady Lina

Capítulo 13

Esta noticia solo empeoraba las cosas. La gente no tendrá compasión por lo que me ha pasado, si no que se encargarán en criticarme más por lo último que escribieron en el periódico, "Seguimos con la duda de que hay entre ellos dos y que hacían en el bosque"

¿Por qué la sociedad es tan complicada?

-Lina- gritó Aylana entrando a mí habitación seguido de Jay y Byron

-Hola- saludé

-¿Cómo te encuentras? Nos ha explicado todo Byron. Lástima que no sepamos quien fue- dijo enfurecida

-No quiero saber quien fue, ya no me importa- dije cabizbaja

-Pero debe pagar por lo que ha hecho- dijo- Bueno da igual. ¿Bajamos al salón?

-Si- respondí levantándome

Empezaron a salir pero al levantarme sentí un horrible dolor en la herida. Volví a caer sobre la cama apretando donde la herida

-Ven que te ayudo- levanté la vista para encontrarme a Byron

Pasé mi brazo por alrededor de su cuello y el lo hizo por mi cintura. Al principio me puse nerviosa y casi que no quería su ayude pero ya no

Me sentó en el sofá

-Gracias- lo miré y quedé estática. Parece que su mirada congele a la persona

Se sentó a mi lado y comenzaron una conversación en la que no estaba participando. Estaba pensando en otras cosas, como en él.

Escuchamos como alguien abrió la puerta principal. Al principio me asusté pero se asomó madre, tía Debbie, la madre de Byron

¿Qué hacían ellas aquí?

-Madre, tía Neida- Anida corrió donde ellas y las abrazó

Yo haría lo mismo pero me cuesta moverme con la herida

-Estoy muy enfadada- dijo madre

¿Enserio dice eso después de días sin verme?

-¿Cuál es la razón?- preguntó Aylana

-Pues la razón es esta hija que tengo- me aseñaló y pude ver que estaba muy furiosa- ¿Cómo se te ocurre? ¿Cómo se te ocurre dejarme mal frente a la gente?

-Madre...- me interrumpió

-¿Sabes que me ha dicho un hombre cuando venía?- hizo una pausa- Me dijo que a cuánto se vende tu hija

Empecé a sentir las lágrimas salir

-Neida cálmate- intentó calmarla la señora Chamberlian pero no sirvió

-No Clarissa, la he dejado unos días en casa y ya sale en los periódicos como una fulana cualquiera- empezó a caminar de un lado a otro- Y además con su hijo, que supuestamente ya tiene prometida

-Madre déjame expli...- me interrumpió con una bofetada en la mejilla

-No quiero que me expliques nada. A partir de ahora las cosas van a cambiar entre nosotras- salió del salón seguida por tía Debbie, Clarissa y Aylana

Yo solo sollozaba mientras tenía la cara guardada en mi brazo contra el respaldo del sofá

Byron

No puedo verla más de esta manera, sufriendo por mi culpa.

Salí de la casa de las Fricon y fui a la de Taissa. Tenía que hacer lo que voy a hacer

Abrió la puerta una doncella y me dijo que Taissa está en el jardín

-Taissa- le llamé

-Byron, has venido a verme- dijo abrazándome

-Taissa tengo que hablar contigo- dije serio

-¿Qué pasa?- preguntó cambiando la cara a una más preocupada

-Taissa...debo acabar con este compromiso

-¿Qué?- gritó ya llorando

-Lo siento, no quiero casarme contigo sin sentir nada por ti

-Pues eso no es lo que decías cuando te metías en mi cama

-Cállate Taissa- dije furioso

-No me voy a callar- dijo- Me dejas por Lina, ¿Verdad?

-No, no es por ella

-Si lo es y que sepas que no la dejaré en paz ni que viva feliz contigo- dijo con malicia

-Ni te le acerques- dije entre dientes

Salí de allí y me fui a mi casa.

Bebí toda una botella de whisky. Estaba confundido, no sé que es lo que sentía realmente por Lina, pero me gusta estar cerca suyo. Me encanta ella.

Tocaron la puerta de mi despacho y entró madre

-Byron, ¿Por qué has dejado a Taissa?- preguntó calmada

-No la amo madre, no quiero pasar una vida con ella. No me gusta

-Está bien cariño- me acarició la espalda- Y respecto a Lina...

-¿Qué?

-Pobrecita por lo que está pasando por tu culpa- dijo- Antes se desmayó porque le costaba respirar entre la herida y el agobio que llevaba

-¿Enserio? ¿Y cómo se encuentra?- pregunté preocupado

-Está mal- respondió triste- Está mal por todo en general. La herida le sangraba y hemos tenido que llamar a un médico

-Voy a ir a visitarla- me paró

-No Byron. La cosa está muy mal en esa casa entre ella y su madre. Es mejor que no te vea Neida- dijo- Ves mañana si quieres

-De acuerdo- respondí sentándome en el sofá

Mi mente estaba ocupada solo por ella.

¿Por qué soy un idiota? ¿Cómo pude lastimarla y jugar con ella?

Fui idiota cuando la besé solo para escuchar que si me quería y yo responderle con un "Lástima que no pueda decir lo mismo", pero lo que me partió el alma fue lo último que me dijo "pues no juegues" sentí como un dolor en el pecho pero yo lo único que hice fue darle una maldita sonrisa de maldad