En un mundo paralelo, imposible de... imposible a secas...

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Bueno, pues esto prometía ser una especie de cenicienta moderna protagonizado por Amaia, y al final ha resultado ser una cosa raruna en forma de falso documental, a lo Paquita Salas.

La parte reivindicativa va dedicada con todo el "amor" a aquellos especimenes que aún creen que los que venden lo hacen por la carpeta y no por su talento.

La otra parte va para nosotras, las románticas, shippeando desde tiempos inmemoriales por el bien de la humanidad.

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Érase una vez una discográfica súper poderosa llamada Carpet A. Records, donde toooodos trabajaban en pareja... a estas parejas se les conocía como carpetas, por el nombre de la discográfica, obviamente, y sus miembros eran los carpetitos.

Un día llegó un cantante nuevo, llamado Alfred García. Alfred era un gran compositor, gran músico, pero no tenía pareja artística, ni de la otra, así que como era el cantante más demandado para dar conciertos había que buscarle una, o eso pensaban los directivos.

Así que idearon un concurso llamado "Operación Carpet A." donde él sería el jurado.

La noticia corrió como la espuma, y todos los medios se hicieron eco, así que el canal de música más importante del país nos envió a nosotros, dos de sus mejores trabajadores a cubrir el evento, que para que fuera más hípster y esas cosas pidieron que se hicera en forma de documental, con su voz en off y todo.

Mi nombre es Javi Calvo y esta es la historia de aquel concurso.

[...]

Afueras de Carpet A. Records:

Justo a la hora acordada llegamos a los jardines exteriores de la discográfica, al poco rato se nos aproximó un muchacho joven, con cara de hastío:

―A ver, vosotros sois los del documental, ¿no? Seguidme.

―Perdona, ¿tú no tienes pareja?

―No, yo estoy casado con mi trabajo, aunque sea una puta mierda, como todos los matrimonios.

―¿Nos dices tu nombre, para que quede constancia?

―Martí.

―Vale, gracias.

Una vez dentro, Martí nos dijo que fuéramos a nuestro aire, que grabáramos lo que nos saliera del papo, menos el wc.

―Ay, mira aquí tenemos a alguien, parece la chica de la limpieza, ¡oye perdona!

―Ay que susto, hola que tal...

―Hola guapa, trabajas aquí, ¿verdad? ¿Como te llamas?

―Amaia, Amaia Romero, ¡ay, pero eso es una cámara! ¿estáis grabando? Buah, que horror, con estas pintas que llevo...

―Anda ya, todos somos diferentes y eso es lo que nos hace únicos... debes ser tú misma, así la gente de casa diferente se verá reflejada en tí, ¿me entiendes?

―Vale, pero eso es muy fácil decirlo cuando se viene con ropa de marca...

―Si, ya, esto... ¿cuanto tiempo llevas trabajando aquí?

―Muy poco, un par de semanas.

―¿Y tú tampoco tienes pareja? El chico que nos ha recibido nos ha dicho que no tiene.

―Ay Martí... no yo no tengo pareja, yo soy yo y mis frases icónicas.

―Interesante... pues gracias Amaia

En un mundo paralelo, imposible de... imposible a secas...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora