Mi Vida alado tuyo

Cap38. Luz de luna

Eadlyn

Creo que se me está secando la garganta de tanto hablar con las chicas...

Mientras seguiamos hablando sacaron el tema de Adriano, no me incomodó mucho, pero me daba risa de lo que imaginaban sobre el.

"Debe ser muy añiñado" " Nos hablara con cortesía" " Sólo le importa su Reino" "No quiere a su madre" "Busca dinero".... más y más..., todo lo que dijieron al principio no me gustó y Lucero noto mi cara lo decía todo pero hasta que todas concluimos el tema con "Pero es bien Guapísimo" eso sí me levanto el ánimo y nos comenzamos a reír.

Las risas callaron poco a poco, no creía que las chicas pensarán así de Adriano... pero igual me divertí un poco con sus locuras dichas.

-Miren que hora es...- dijo Marie señalando el reloj que se que encontraba en la pared de la habitación

-Creo que no vamos a poder despegarnos de las sábanas el día de mañana- dijo Anika bostesando...

Eso era cierto, es más de media noche, por lo visto en todas las chicas tenían sus ojos y sus parpados con sueño.

-Creo que tienes razón...- dijo Karolina estando de acuerdo con Anika

-Bueno chicas- dijo Lucero igualmente bostesando- creo que debemos ir a descansar

- Tienes razón Lucero-dije mientras estaba sentada en la mitad de la cama- chicas muchas gracias por estar aquí conmigo

- Eadlyn somos como familia- dijo Tara cogiendo mi mano- pero de diferente sangre ¿No?

- Tienes razón- dije y todas nos dimos un fuerte abrazo.

- Entonces nos despedimos Eadlyn-dijo Marie poniéndose de pie- descansa duerme bien...

-Gracias- respondí

-Recuperate- dijo Tara dándome un abrazo

-Gracias Tara- dije en su oído

-Nos vemos mañana- Karolina se despidió moviendo su mano y salió de la habitación

-Adiós Eadlyn-dijo Anika por último- Lucero ¿vamos? - regreso a ver a Lucero.

-Adelantate- dijo Lucero llevándola a la puerta- vendrán a retirarme

-Esta bien-dijo Anika por el marco de puerta- Adiós, nos vemos luego...

-Adiós- dijimos Lucero y yo

Lucero cerró la puerta apenas Anika piso in por fuera del pasillo.

-Por fin- dijo Lucero exausta, poniendo su cabeza sobre la puerta

-Tranquila Lucero-dije mientras me sentaba bien- ya vendrán por ti y te podrás ir...

-Por eso no te preocupes...- dijo Lucero chasqueando su lengua- pero permiso para quedarme a hacerte compañía.

-Gracias...- me quedé sin habla- pero no es necesario que te quedes

-Si es necesario- dijo poniéndose al frente mio con sus brazos cruzados- ya que tu "compañero"- dijo haciendo comillas con los dedos- no me dejo quedarme contigo en las noches que estabas incosiente, se quedaba él por la noche y yo por el día. Eso no tiene gracia...

- Ay Lucero, Lucero- lo dije sarcrasticamente- mejor que no te dejo con migo por las noches...

-¿Por qué?- dijo alzando una ceja

-Porque amanecerias con ojeras- dije pensando que hoy por la tarde, Adriano no había dormido bien- como él.

-Bueno eso sí- dijo acariciando su cara- primero la belleza ante todo, ¿y?....- me regreso a mirar