Mi Vida alado tuyo

Cap39. Murmullos...

Eadlyn

Estaba durmiendo perfectamente hasta que los murmullos de la parte de afuera me hicieron despertar...

- Lucero, Lucero-dije intentado levantarla pero por lo visto ya no estaba.

Capaz que se fue a su casa para cambiarse.

Bueno que puedo hacer yo, mientras me seguía cambiando para ir al laboratorio, los murmullos seguían por fuera de mi habitación...
¡Qué irritable! Que estén hablando y hablando.

Mi estómago gruño, creo que he amanecido con algo de hambre. Que después de vestirme salí a la cocina en busca de comida...

En los pasillos no se encontraba más que guardias...
¿Y quienes eran los que provocaban los murmullos?

Bueno, llegue hasta la cocina y me encontré con Carlo que después de darme la comida se tuvo que retirar y me quedé sola...

-Chismes del Reino- no había notado que estaba una televisión en la cocina- Buenos días Cophenage.... ¡soy yo! André Nuevasueños... nuevamente claro está... Pero algo nuevo a ocurrido en el interior de las puertas del Palacio...
¿Ustedes lo saben?... ¡Pues yo si! Este es un chisme recién salido del horno perdón digo del castillo.
Se dice que nuestro principe por la noche... a encontrado nuestra princesa...

Casi escupi el café que tenía en boca... al ver ese reportaje, me quedé fría al ver que...

- Eadlyn-dijo Lucero llegando por la puerta de los despachos de comida- ¡el chisme es una bomba!- al parecer se encuentra contenta

-¿De qué hablas Lucero?- dije intentando calmarme y no mirarla a los ojos... mis manos jugueteaban con la taza del café

-¿Eadlyynnn?- dijo poniéndose al frente mio en el mesón- Bueno si no lo sabes te lo contaré y tu tienes algo que ver...

-A ver escucho y créeme no tuve nada que ver- para tranquilizarme tuve que tomar el café sorbo por sorbo...

-Jajaja mira como me rio- lo dijo sarcrasticamente pero igual con una sonrisa pícara en su cara- Todo lo que te voy a "contar"- lo dijo havienso comillas con sus dedos- está por el Palacio y por la ciudad...

-Rápido Lucero que me tengo que ir- dije algo pero sólo un poquito, con un poquitito de nervios... ¡a quien engañó!... estoy con nerviosa de lo que murmulla todo el Palacio y se trata sobre mi...

-Ay Eadlyn-dijo Lucero codeandome- Bueno... - se puso de pie- se dice que ayer por la noche, en el jardín,  el principe se encontraba con una chica ¿Sabes de estoy hablando Eadlyn...?- la pregunta lo hizo con picardía

Tuve que dejar el café en el mesón, empecé a toser antes de atorarme y quedarme sin respiración...
Y sí, sí sabía lo que Lucero trataba de decirme y sí sabía la historia completa.

- Claro que lo sabe Lucero- Anika se asomo desde las gradas de las habticaiones- Pero no sólo eso...- entró y argumento algo más a la conversación mientras Lucero intentaba calmar mi tos- Eadlyn creo que mejor después te cuento hasta que...

- No, ya estoy bien-dije con algo de dificultad mientras ponía una servilleta encima de mi boca- sólo era un poco cafeína... sigue te escucho Anika- por fin mi tos se calmó pero mis nervios y el miedo seguían aumentando.

-Esta bien...-dijo Anika con una sonrisa de oreja a oreja- sólo no se vieron en el jardín

-¿No?- tenía que disimular mis nervios

- No- dijo Anika moviendo la cabeza- también ¡se besaron!- salto de la emoción al decirlo.

Sentí que casi me desmallo otra vez pero no fue así... mi cara tuvo que mentir también,  fue como de admiración y sorpresa con un poco de felicidad.

-Vaya- dije intentando sonreír más de lo que podía- esta bueno el chisme pero me tengo que ir, chao chicas...

No regrese a mirar sólo quise salir de allí y calmar mis nervios...
Tambien necesito hablar con Adriano antes de que todo esto se salga de control.

Pero... ¿Qué podría decirle? ¿Cómo podría topar un tema así? ¿Cómo hablaría con él?

Todas esas preguntas rodeaban mi cabeza mientras caminaba hacia, hacia...
No se si Adriano se encontraba ya en el Parlamento o en su oficina.
La decisión fue algo difícil pero mejor fui caminando primero a su oficina...

El camino no se me hizo largo, eso que tuve que subir varias gradas, al contrario con el abrir y cerrar de ojos me encontraba al frente de las puertas del despacho.

Trague saliva, respire profundo y toque la puerta...
Por un momento me alivie en que no había nadie en el despacho pero...

-Pase- era la voz de Adriano... No sabía si salir corriendo o entrar calmada y hablar con él...

Abrí la puerta y mi actitud fue todo lo contraria... al ver que Adriano estaba viendo esos reportajes.

-¡Deja de ver eso!- mi voz no era calmada al contrario estaba furiosa

Me acerqué a él echa una furia

-¿Cómo es posible?- me fije que no tenía ni expresiones o palabras para decirme algo- Tú- lo señale con el dedo- dijiste no había nadie y dijiste que sólo estábamos los dos...

Estaba caminando de un lado al otro descontrolada...

- Eadlyn escuchame...- Adriano intento hablar

- ¡No! tu escuchame- dije regresandolo a ver desafiante- me dijiste que sólo estábamos los dos o tu lo dijiste a alguien o tu sabías que había alguien ahí para después pasarlo por todos los programas de televisión- estaba tan furiosa que termine dando "palmadas", que parecían mejor golpes, sobre el pecho de Adriano.

- Eadlyn, Eadlyn-dijo Adriano tomando mis manos y haciendo que parará- esos anuncios- señaló con la cabeza a la televisión- ya no estarán desde...

-¿Y porque los quitas?- intente soltarme de sus manos- Ahora sólo lo quitas y ¿ya?- dije algo exaltada y me solté de sus manos- Sólo dime algo...

- Eadlyn no te entiendo- dijo caminando por detrás de su escritorio- tienes miedo, voy a quitar los reportajes y después me dices que ¿Por qué los borro? No te entiendo Eadlyn- dijo poniendo sus manos sobre su escritorio...

Hice lo mismo que él, puse mis manos sobre su escritorio y no sabía si lo que hiba a preguntar es seguro...

-Solo dime algo Adriano- dije viéndolo a los ojos- Quieres que lo nuestro... - note que en su mirada se reflejaba tristeza y algo de miedo- ¿sólo sea un secreto?

Busque una respuesta en sus ojos y no lo tenía claro, se formó demasiado silencio a nuestro alrededor.
Un silencio que nos daba que pensar de uno a otro...