Baby panda

SEUNGRI

   Pasear por el bosque esa mañana había sido una gran idea. Después de tan inesperado descubrimiento JI YONG se sintió un poco menos vacio. Su vida luego de seis meses sin él apenas estaba comenzando a recobrar un ritmo. La cabaña en medio de la nada a la que YOUNGBAE lo había arrastrado para alejarse del mundo, le había dado algo de paz después de tan larga tormenta. Su vida se volvió un huracán  de la noche a la mañana luego de esa llamada.

   El teléfono cayó al piso de inmediato resbalando de sus manos sin fuerzas luego de escuchar la última frase...

 -"SEUNGRI... Accidente... Muerto..."

   La lejanía de algunas voces a su alrededor como si los gritos fueran solo murmullos, como el ruido que hacían los grillos al dormir.

   El shock en el que había caído luego de la noticia fue captado por su mejor amigo, lo observó recoger el teléfono  y llevarlo a su oreja para responder, lo observó mientras este abría los ojos y decía algo que él no alcanzaba a entender, sintió unos brazos al rededor suyo, confuso. Miró las lagrimas de YOUNGBAE rodar por sus mejillas sin comprender porqué lloraba. Lo abrazó también, él era su hermano, no quería que sufriera, ¿Cuál era la razón de tal llanto?

Tres días. Tres días en los que vio desfilar frente a él cientos y cientos de personas que le decían frases como "Lo siento mucho", "Debes ser fuerte", "Estaremos contigo", y tantos abrazos de gente desconocida como familia. Se vio a si mismo vestido de negro y sosteniendo rosas. Era como un sueño, él estaba ahí, pero su mente estaba nublada, algo faltaba.

-BAE, ¿Donde está RI? - pero BAE solo lloraba sin responder, y se abrazaba a él, fuerte, firme, temblando después. Lo mismo pasó cuando se lo preguntó a SEUNGHYUN,  a DAESUNG, a YANG, y a todo aquél que se cruzaba en su camino. Nadie respondía, solo lo miraban y comenzaban a llorar.

   Aflojó un poco el nudo de su corbata cuando pudo ver frente a él un ataúd. ¿Donde se encontraba?, ¿Porque todos vestían de negro?, ¿Donde estaba él?, ¿Porque no llegaba para sacarlo de ahí?. Comenzaba a sentirse asfixiado, tanta gente, tantas flores, rosas rojas en sus manos, llantos, flashes, gritos y empujones... Y un ataúd...

-BAE... - habló con voz temblorosa - ¿Donde esta RI?, quiero irme de aquí... - de nuevo llanto y silencio y su cabeza moviéndose de lado a lado.

- T-te llevaré con él - le escuchó y sonrió un poco, al fin podría verlo y sentir sus brazos alrededor suyo, el único abrazo capaz de relajarlo  sería ese. Sintió el brazo de su hermano tomarlo y avanzó con él hasta quedar a un par de pasos del ataúd.

-BAE, no, quiero ir con SEUNGRI, llévame con él por favor - le suplicó, pero YOUNGBAE solo avanzó otro paso, acercándolo más al cuerpo que descansaba dentro de la dorada caja metálica - B-BAE, por favor, no quiero... Necesito ver a SEUNGRI... - no fue consciente del silencio que se hizo en el lugar, pero pudo percibir las miradas y comenzó a sentir un escalofrío recorrerle por completo.

   Sintió más fuerza en el agarre del brazo que cruzaba por detrás de su espalda y bajaba por ella hasta su cintura, intentando que él cediera y diera el último paso que faltaba para llegar al féretro. ¿Porque insistía tanto?, ¿Quién estaba allí?, ¿Era alguien importante?. Suspiró, dando el paso adelante, para ver por fin descansando dentro del vidrio a su alma gemela.

-¿S-SEUNG... R-RI?... - allí estaba él, durmiendo, mientras sus manos temblaban y su voz comenzaba a apagarse - SEUNGRI no es hora de dormir honey, despierta... - él lo llamaba, pero no le respondía, tocó el vidrio, las rosas en sus manos fueron a dar en sus pies - RI, por fa... Por favor cariño, despierta, quiero irme...  a casa - el temblor en su cuerpo y en su voz ya eran demasiado conscientes, demasiado evidentes para el resto, que siguieron llorando  a su alrededor.