Equivocado.

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¿Alguna vez habéis experimentado la incomodidad? No encontrar las palabras adecuadas para romper el silencio. Evitar el contacto visual. Mantener la distancia. ¿Os suena? Tensión. Nervios. ¿Lo habéis sentido? Probablemente si. Aunque, dudo mucho que de la misma manera que yo. Incomodidad unilateral.

Subí a mi cuarto en busca de algo que ponerme. Habría escogido el conjunto más espantoso, de haber tenido alguno, claro. En mi armario  únicamente hay espacio para mis lujosas prendas, obviamente. Me decidí por una camisa añil y unos pantalones del mismo color junto a un cinturón burdeos y una gargantilla negra. Acomodé mi rubia cabellera con ayuda del peine y esparcí algo de colonia sobre mi cuello. Perfecto, como siempre. Una vez arreglado, fui en busca de Hansol y ambos abandonamos la estancia. Caminamos en silencio durante varios minutos. Estaba claramente mosqueado. Me esforzé por contener las ganas de asfixiarle allí mismo.

-Hansol.

-¿Si?

-Dime la verdad.-suspiré. Enfadarse no iba a servir de mucho- ¿Por qué haces todo esto? Es decir, ¿es para fastidiarme?-negó-¿Entretenerte?-error-¿Entonces? No lo entiendo.

-Creí haberlo repetido varias veces.-declaró- Haré que te enamores de mi. Quieras o no.-y vuelta la burra al trigo.

-Otra vez con lo mismo.-rodé los ojos-Bien. Suponiendo que sea así, ¿qué ganas con eso?-ladeó ligeramente la cabeza para verme. Su clara mirada recorría cada centímetro de mi cuerpo, adentrándose profunda e intensamente en mi, haciéndome  sentir completamente desprotegido y desarmado ante ella. Una mirada intensa, sincera, pura...
Una mirada cálida, protectora, reconfortante...
Una sola mirada haciendo estallar miles de sensaciones en mi. Sensaciones nunca antes experimentadas.

-No se trata de lo que yo gano, sino de lo que tú estás perdiendo.

Grabé aquella frase a fuego en mi mente, sin llegar a notar cuando la guardé en mi corazón. ¿A qué se refería? En cualquier otra situación, habría admirado aquellas palabras, tan seguras, tan profundas... No fui capaz de apreciar su verdadero significado. La confusión no lo permitía.

-¿Y qué es lo que según tú, estoy perdiendo?

-Eso es precisamente lo que intento enseñarte...Quiero evitar que lo pierdas antes de tenerlo.-miraba al frente decidido mientras caminábamos lentamente en dirección cualquiera.

-¿Tener el qué?-pregunté.

-No lo sé. Es algo que tú mismo debes descubrir.-alzó la vista al cielo-Sin embargo...algo me dice, que sólo yo te lo puedo mostrar. Puede que suene ridículo, pero, así lo siento. Es curioso ¿no crees?-declaró sonriente.

Quizás lo juzgué mal. Aquel joven castaño frente a mi; se veía tan diferente...
Su prepotencia, indiferencia, ego...todo aquello había desaparecido. Dando paso a la humildad, sinceridad, amabilidad...
Aquellas palabras tan cálidas. No podía creer que hubieran sido dichas por el. Verle tan decidido era en parte motivador. Indescriptible.

-¿Sólo tú?

-Sólo yo-afirmó sonriente.

-¿Por qué estás tan seguro?

-Porque sé que soy el único capaz de llenar el vacío que hay en tu interior.-reí.

-¿Y eso porqué?

-¿Alguna vez oíste hablar del hilo del destino?

Hola!!! Si, lo sé, es super corto. Pero es que el final quedaba tan bonito!!!! No pude resistirme.

Sin duda este es mi capítulo favorito. He disfrutado mucho escribiéndolo, me ha quedado muy artístico. Por primer vez siento la historia como mía, y es que, al principio no podía reconocerla como tal. Ya tiene mi marca. Me va lo poético XD.

Espero que hayáis disfrutado del episodio tanto como yo y que la historia esté siendo de vuestro agrado.

Nos leemos en el próximo capítulo de «Entrelazados».

Gracias por vuestro apoyo.

Minmin

Entrelazados [Verkwan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora