Junto a ti

"Intimidad"

Shingeki no Kyojin y sus personajes son propiedad de Hajime Isayama

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Junto a ti

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"Intimidad"

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Abrió los ojos, aun sintiéndose adormilada, apoyada cómodamente sobre el hombro de su compañero. Se separó levemente para observarlo, Jean dormía plácidamente a su lado con la cabeza ladeada hacia un costado. Mikasa amplió su rango visual y pudo notar cómo el paisaje de Trost había cambiado radicalmente a uno nuevo, donde había menos casas, pero mucha arena y mar. Sonrió.

–Jean, Jean – Lo movió con suavidad de un brazo, haciendo que despertara poco a poco – Parece que estamos llegando - Aun medio dormido, él giró hacia la ventana y observó el paisaje, habían llegado finalmente a la costa. Sus vacaciones habían empezado.

Luego de una temporada de mucho trabajo, Jean tuvo la oportunidad de optar por unos días libres y queriendo escapar un poco de la rutina, invitó a Mikasa a la costa a descansar. Duncan pasaría esos días en el cuartel de Trost, junto a Grunwald  y a su regreso tenían contemplado pasar a visitar a sus padres. Pero ya tendrían tiempo para pensar en eso, ahora el presente eran ellos y sus próximos días de relajo juntos.

– ¿Es idea mía o el viaje se hizo corto?- Dijo él, enfocando su mirada hacia ella. Mikasa sonrió con suavidad, alzando los hombros. Había sido un viaje de casi ocho horas y para ella también había sido bastante breve.

–Creo que dormimos demasiado- Respondió de buen humor. Le entusiasmaba la idea de un viaje junto a Jean. Tampoco le hubiese molestado quedarse en casa con él, pero nunca se hubiese negado a conocer otros lugares y otros paisajes a su lado.

Jean asintió sonriente, acercándose a ella para besar sus labios brevemente. Aun quedaba media hora de viaje en tren, por lo que aprovecharon ese rato para planificar sus próximos días. Habían arrendado una pequeña cabaña cerca de la playa, lo que facilitaría moverse por los lugares más interesantes del área. Gracias la urbanización y la construcción del puerto años atrás, lo  que permitió mayor comercialización, la costa se convirtió en un lugar turístico, donde la gente podía degustar los productos del mar y también pasear por sus alrededores, participando en diversas actividades.

Llegaron a la pequeña estación y descendieron del tren. Todo era tan nuevo, tan distinto para ambos. De la mano, con un pequeño equipaje en mano y con la ayuda de un mapa, se dirigieron al lugar donde alojarían los próximos días.

Hacía calor a esas horas de la tarde y el sol pegaba con fuerza. Jean se acomodó su sombrero preferido y se encaminaron rumbo a la costa. Cuando llegaron, pudieron apreciar las aguas cristalinas golpear sobre la arena, llenando la orilla de espuma. Algunas aves marinas nadaban cerca del muelle, extrayendo su alimento del mar.

Mikasa jamás pensó volver a ver el mar así. Le causaba tantos sentimientos encontrados, tantos recuerdos. Pero esta vez no permitiría dejarse llevar por el pasado. Hoy, estaba dispuesta a hacer de este viaje algo inolvidable para los dos.