Capítulo 26

130 8 0
                                    

- Te quiero, Zayn. Te quiero.–Lo dije por fin. Una gran sonrisa floreció en el rostro de Zayn, aunque fue interrumpida para besarme, esta vez en los labios, mientras nos abrazaba, a mí y a la gata.

Cerró la puerta, y me desnudó poco a poco entre besos y caricias que iban cumpliendo los deseos que mi piel exigía. Nos adentramos en las sábanas, y como me dijo, me devolvió el favor con un maravilloso sexo oral, que me hizo llegar rápidamente a la mejor sensación que existía.

Saqué la camiseta del pijama del bolso y me la puse. Me metí otra vez en la cama con Zayn.

Se durmió enseguida, mientras que yo estuve un rato reflexionando e intentando creer lo que había pasado, lo que estaba pasando con mi vida. El vuelco que había dado, hacia un camino iluminado por la llama del amor que Zayn desprendía directamente hacia mi frío y roto corazón.

Solo con esa noche que me había otorgado, ya me estaba ayudando a ser feliz, tal y como me había prometido. No es que lo fuera aún, porque el dolor no se esfuma fácilmente, pero sí que es cierto, que cuando estaba con él olvidaba todos los recuerdos que me atormentaban día tras día, toda mi vida.

Yacía en la cama, delicadamente. Cuando dormía pasaba de parecer un malote a mostrar lo que es en realidad: una persona con un corazón enorme. Las apariencias engañan, no voy a decir siempre, pero muchas veces.

Que tengas pinta de no tener compasión y de que solo te preocupes por ti mismo, no significa que sea así, y es el claro ejemplo de Zayn. Así como que rías y parezcas feliz, tampoco significa que lo seas.

Cada persona es distinta, y elige mostrar su verdadera personalidad o no, y en el caso de hacerlo, de qué forma. Y es esto lo que nos hace tan distintos a todos los seres humanos. Aunque haya dos almas gemelas, en apariencia van a parecer totalmente diferentes por el motivo anterior.

Tras un rato de estar filosofeando, mi mente se fue calmando poco a poco, hasta que los pensamientos me dejaron dormir.–

POV. ZAYN

–Mi sueño se interrumpió a eso de las once de la mañana, raro, pero así fue. Rebecca dormía plácidamente, con una sonrisa contagiosa, por lo menos para mí.

Le di varios besos en la mejilla y le acaricié el pelo para despertarla poco a poco. Se quejaba y se encogía mientras se envolvía en la sábana como para protegerse. Yo me reía al respecto, era muy mona. La besé en la boca, y aunque estaba medio dormida intentaba seguirlo. Tras apartarme, parecía que se había despertado, aunque seguía haciéndose la remolona. Abrió los ojos y los volvió a cerrar, ya que la luz le molestaba.–

- Zayn...–Musitó con voz de dormida.– Eres un puto plasta... Déjame...

- Estoy despertándote, son más de las once. Levanta, pedazo de vaga.

- Voy...–Se sentó en la cama, con los pies fuera de ella.–

- Qué guapa estás por la mañana.

- Que te jodan, Malik.–Me dijo sacándome el dedo corazón.–

- También me encanta tu buen humor.–Bromeé, y ambos reímos.–

- Eres gilipollas, no sé por qué me gustas, ni tampoco por qué te gusto a ti.

- Me van las bordes.–Guiñé un ojo.–

- Te estás ganando una hostia...

- Me amas. Lo sé, lo sabes, lo saben. Y yo te amo a ti también, todos felices.

- Amar es una palabra muy fuerte, no se debe usar así como así.–Comentó.–

- Tienes razón, es demasiado pronto para "amar" propiamente dicho. Pero algún día podremos usarla.

- Yo solo amo el chocolate y la nutella.–Dijo con una amplia sonrisa.– Y puede que tardes en estar a su altura.

- Puta gocha. Hablando de comida, vamos a desayunar.

–Fuimos a la cocina e hicimos huevos fritos, beicon y tostadas. Ella tomó un vaso de leche con cacao, ya que no le gustaba mucho el café, que fue lo que bebí yo.–

- Rebecca, si quieres puedes quedarte a comer.–Le ofreció mi madre.–

- No quiero molestar, bastante que ya me he quedado una noche.–Se excusó educadamente.–

- No es ninguna molestia, quédate.–Insistió mi madre.–

- Está bien, muchas gracias. ¿Puedo darme una ducha?

- Sí, sígueme.

–Subimos y le expliqué todo lo que necesitaba saber para ducharse. Cogió la ropa de cambio que había traído, y se duchó. Yo mientras me quedé con su gatita.

Salió del baño, y estuvimos un rato pensando nombres para la gata, y nos decidimos por "Darkness".

Después de un rato charlando, fuimos a comer. Fue una comida agradable, llena de risas y entretenidas conversaciones. Me encantaba que Rebecca se llevara bien con mi familia, y que se sintiera como si fuera parte de ella, ya que nunca ha tenido una, ni si quiera cuando sus padres vivían. Tampoco sabía exactamente sus problemas familiares, pero por lo que me había dicho no era precisamente feliz su relación.–

POV. REB

–A continuación de esa maravillosa reunión familiar, que yo nunca había tenido el placer de experimentar, subí a guardar todas mis cosas. Cogí a Darkness, y una vez más, Zayn me llevó a casa.

Llamé a Ashton para ver si podía venir un rato y avanzar todavía más con el asunto. Me afirmó que podía pasarse el tiempo justo para poder hacerlo.

La verdad es que tampoco sabía muy bien cuándo se iba a terminar esto, ¿cuál era el momento apropiado? Esperaba que esta fuera la penúltima vez que me tuviera que acostar con él.

Cuando llegó, fuimos directos al meollo del asunto. Probamos bastantes posturas que yo conocía, pero nunca había puesto en práctica.

Cada vez se notaba más que era simplemente sexo. La primera vez fue algo confuso, no se sabía muy bien si estábamos haciéndolo porque tocaba, o si había sentimientos de por medio. Pero ahora yo tenía en mente a Zayn, y él quería mantenerse al margen. Aun así, fue un coito bastante logrado, que ambos disfrutamos. Cuando terminamos, se marchó prácticamente de inmediato.

Tenía miedo de estar perdiendo su amistad por lo ocurrido. Se mostraba algo distante, como si no me conociera y como si solo fuera a acostarse conmigo. Solo nos saludábamos y nos despedíamos. Ni un "¿Qué tal?" salía de nuestros labios. Y todo por mi culpa.

Le fallé, y ahora se está notando que fue así. Me arrepentía muchísimo de no habérselo dicho cuando tocaba, y que se hubiera tenido que enterar al vernos juntos. Pero a lo hecho, pecho, y ya no se puede hacer nada.

Pensé que lo habíamos arreglado, pero ya veo que sigue guardando rencor.–

HIGH LOVE (Zayn Malik)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora