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Un mes después.


MyungSoo acarició con la yema de los dedos los muslos de SungYeol, abriendo con cuidado sus piernas para posicionarse entre ellas. 

El menor lo abrazó por el cuello y él lentamente entró en su interior. 

—MyungSoo —Gimió el menor intentando no romperse el labio con sus dientes —Más, dame más. Más fuerte Doctor Kim. 

El pelinegro se hundió una vez más en él sintiendo cómo se corría en su interior, sus músculos se tensaron por un segundo y luego su cuerpo se relajó por completo. 

—Te amo SungYeol —Susurró MyungSoo buscando los labios del menor. 

Pero no lo encontró, se vio solo en una cama encima de una almohada. 

Despertó de golpe sentándose en la cama y buscando el móvil para apagar la molestosa alarma, suspiró profundamente y se frotó los ojos cuando se dio cuenta de que todo había sido un sueño. 

Cuando se movió para colocarse de pie, sintió un líquido espeso y caliente entre sus piernas, miró dentro el pantalón de buzo y se movió con cuidado hasta llegar al baño. 

No sólo su corazón extrañaba la presencia de SungYeol, ahora su cuerpo inconscientemente pedía a gritos estar con él. 

Pero hasta el momento las cosas iban bien, hablaba con SungYeol todos los días, antes de ir al hospital y cuando llegaba a casa porque tampoco lo quería molestar durante el día en su internado. 

El pequeño progreso favorable de MinKi lo mantenía feliz y con esperanzas de que todo podría salir bien. 

DongWoo era un excelente médico, muy cálido con los pequeños y se encariñó mucho con MinKi a quien parecía agradarle también. 

Nunca aceptó una salida con él a pesar de que no veía nada malo en ello pero después de estar todo el día en el hospital, esperaba llegar al departamento para bañarse, comer algo y dormir. 

No quería pensar en divertirse mientras estaba allí. 

Pero si se reunían en la cafetería del hospital o en la oficina de DongWoo para hablar sobre los avances de MinKi. 

Jamás consideró que DongWoo lo mirara de otra forma, tenían muchos temas en común como para formar una amistad. 

Pero sólo eso, él estaba casado y tenía una familia a la cual proteger y amar. 

—Sé que es un número bajo pero esto significa que el cuerpo de MinKi está aceptando el tratamiento —Comentó DongWoo enseñando los análisis de sangre —Hay que ver qué ocurre en una semana más. 

—Bien —Suspiró mirando la hora en su móvil. 

—¿Estás cansado? 

—Un poco. 

DongWoo se levantó del asiento y rodeó el escritorio parándose detrás de MyungSoo, masajeó sus hombros y el pelinegro inmediatamente reaccionó alejándose de él. 

—Lo siento —Se disculpó sin tener un motivo claro para él —No sabía que no te gustaban los masajes. 

—No te preocupes, discúlpame, ando un poco estresado hoy —Tomó su chaqueta —Iré a despedirme de MinKi. 

Salió de la oficina y encontró al pequeño jugando con peluches que le había llevado en la tarde. 

No le molestaba DongWoo pero hace dos días lo tocaba más de lo permitido y quizás cualquier otra persona lo miraría normal, lo era pero de alguna razón sentía que le molestaría a SungYeol. 

—¿Aún sigues despierto? —Entró a la habitación de MinKi. 

—No tengo sueño, quiero ver a mi papi SungYeol. 

—Ya estaremos junto a papi SungYeol —Dijo MyungSoo y DongWoo logró escucharlo desde la puerta. 

Esperó a que MinKi se quedara dormido para irse a casa pero cuando salió de la habitación DongWoo tomó su muñeca. 

—Sé que no debería entrometerme en la crianza de tu hijo pero no es bueno que le mientas. 

—No sé de que estás hablando —Dijo MyungSoo confundido. 

DongWoo miró por la ventanilla asegurándose de que MinKi estuviese dormido y luego volvió a MyungSoo —Sé que debe ser difícil para MinKi pero es mejor decirle la verdad, me comentaste cuando te conocí que él ya la sabía lo de sus padres, no debes mentirle, sólo lo confundirás y puede ser peor para ti. 

—No te estoy entendiendo. 

—Acerca de su papá SungYeol, no le digas que lova a ver pronto cuando sabes que falleció.

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❥Amorterapia | ➳[MyungYeol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora