Líneas tangentes

Capitulo 2 ¿Enserio?

Habían pasado tres semanas desde que llegue a Sevilla y la vida definitivamente no me sonreía. Solo trabajaba, iba a mi habitación,veía tele y quizá leía algún libro. Si juntábamos a eso que moría de ganas por ver a mi familia y amigos era un Cóctel letal.

Había días, tales como hoy, que me entretenía leyendo hasta altas horas dela madrugada en el Hall del hotel. Me gustaba ese ambiente. Entraban infinidad de personas de nacionalidades distintas al día, Franceses,Alemanes, Japoneses, Indios, Musulmanes. Si podía entablaba conversación con ellos, me apasionaba aprender sobre los países extranjeros y su cultura y ¿porque no? soñar con visitarlos algún día. De vez en cuando veía pasar a Joel por allí, con nuestro característico uniforme de pantalón negro, camisa blanca, chaleco y corbata roja. Mentiría si no admitiese que cada vez que nos cruzábamos sentía como mi estómago daba un vuelco tremendo, aun así, hacía tiempo que nuestros horarios no coincidían así podía librarme de trabajar con el.

Eso si...la factura de teléfono tuvo que subir como la espuma ya que mantenía al menos cuatro conversaciones diarias si no eran cinco.Una con mis padres, otra con Gabri, la siguiente con Eva y poco después con mi mejor amiga Lorena. Conocí a Lore estudiando fuera,mientras compaginaba la universidad con un trabajo a media jornada en un restaurante, pronto nos hicimos inseparables. Era alocada,divertida y extremadamente habladora, castaña clara de ojos violeta.Trabajaba como cocinera en un hotel de Galicia, muy lejos de mí, ami pesar. Dos años atrás conoció a Erik, con el que compartía una extraña relación que al menos a mi me ponía de los nervios. Elinsulso de Erik, no me caía nada bien, era introvertido, feo y tenía una extraña y obsesiva relación con la iglesia. No era amor deamiga (que también) pero ella merecía algo más que una simple relación vía whatsApp a 1000km de distancia con un treintañero insulso sin ganas de emanciparse.

-Hola chusma.¿Como vas ? Dijo mi amiga.

-Pensé que no llamarías, es muy tarde. Refunfuñé regañandola .Nuestras charlas interminables eran de las pocas cosas que me alegraban el día.

-Tenia mucho trabajo, pero sabes que no podemos dejar de hablar ni un día,me deprimiría. Ella estaba bastante integrada en Galicia, tenia un grupo de amigos enorme y un trabajo muy bien remunerado ¿el problema? Trabajaba demasiadas horas como para tener una vida social activa.

-Lose...lo se . Asentí triunfante.

-¿Y a ti que tal te va? ¿Has conocido ya algún sevillano guapo que te quite el sentío? Preguntó ansiosa por saber la respuesta.Nunca entendí porque mi amiga tenia que llegar a ese punto en todas las conversaciones. Le dejé claro antes de mudarme aquí que lo último que buscaba era enamorarme.

-Nil o busco ni lo quiero. Ya lo sabes. Espeté cansada.

-Por tu voz noto que hay alguien rondando esa loca cabecita. Rodél os ojos y separe un momento el teléfono de mi oreja para mirarle de frente haciendo cucamonas.

¿Cómo podía saberlo? Bien es cierto que dos persona rondaban mi pensamiento desde hacía días. El primero de ellos era Raul con su dulzura y tacto a la hora de tratarme. Estas dos semanas se había comportado increíblemente bien conmigo haciendo que me sintiese integrada y respetada. Sin hablar de su cuerpo, su cara y su TODO,demasiado hombre, jamas se fijaría en alguien como yo. ¿El segundo?Joel y sus dañinos comentarios y miradas hacía mí ¿Seriamos enemigos a muerte en otra vida? No lo sabía, lo único que tuve claro desde el primer momento en que le ví era que sus intensos ojos marrones me intimidaban demasiado y no entendía porqué . Dos hombres totalmente opuestos el uno con el otro pero paradójicamente amigos íntimos.

Joel sentía una extraña admiración por su jefe, le consideraba su ejemplo a seguir y Raul gustoso le había aceptado como su pupilo con un cariño parecido al de un hermano mayor. Esa idílica relación de cuento de hadas mas que favorecer me perjudicaba, ¿Porque? Sencillo¿A quién creería Raul en caso de un nuevo encontronazo entre ambos? ¿A Joel o a mí? La respuesta estaba clara.