Dian
Me había quedado en la casa de James, luego de la cuarta ronda de sexo me había quedado completamente molida, eran las 6 de la mañana y no tenia ganas ni de levantarme me dolían partes del cuerpo que ni siquiera sabía que te podían doler, con una sonrisa de estúpida en el rostro me levante de la cama y fui directo al baño para darme una ducha, Sali de la ducha y me coloque mis vestido sin ropa interior, necesitaba salir de ahí antes de que el bello durmiente despertara, no necesitaba charlas y mucho menos que me desviara de mi cometido de llegar a tiempo a mi trabajo, en el camino hacia la salida le llame a Johana para que me llevara una muda de ropa a mi trabajo, esto sería vergonzoso pero esperaba que nadie dijera ni una sola palabra
No creía poder aguantar todo el día y hoy habría una junta luego del trabajo para ver cómo iban los números, sabia que mi programa era de los numero uno no solo en mi ciudad sino también en todo el país y en otros también, podía decir que era una persona famosa, pero no quería presumir demasiado
Me monte en mi auto y conduje hasta estar delante del edificio de la empresa, mi amiga me sonrió como psicópata y agito ambas manos, suspire con cansancio ahí venia su tanda de miles de preguntas e insinuaciones sucias, baje de mi auto y un remolino me recibió
—Quiero y te ordeno que me digas todo, quiero que me digas cuantas veces te la metió y también cuantas veces te hizo sexo oral, y también cuantas veces se la mamaste
Se atasco mi saliva en mi garganta al escuchar lo descarada que estaba siendo
—Eres una entrometida, además de que eres una sucia, no te diré cuantas veces lo hicimos, ni mucho menos cuantas vece hubo sexo oral de por medio
—Ah así que si hubo sexo oral — me miro emocionada — creí que morirías con la vagina seca por falta de sexo
—Idiota — golpee su brazo — pero me alegra haber roto la abstinencia, ciertamente era deplorable el hecho de tener una vida sexual tan inactiva
—Eso es justo lo que yo diría — me abrazo — me robaste las palabras de la boca
—Pero aun así eres una pervertida
—Lo se y por eso me amas
Luego de eso nos despedimos y yo me cambia en mi auto, justo en el estacionamiento, para poder entrar a mi oficina como si nada hubiera pasado o al menos eso creía hasta que vi algo que no necesitaba ver en este día, Denis medio desnuda con Marcos entre sus piernas, en mi oficina y en nada más y nada menos que mi escritorio, o era al maldito karma o a todos les gustaban mis lugares para terminar teniendo sexo en todos ellos
—Vaya
Hable con una sonrisa de burla en mi rostro, ellos de inmediato de pusieron como locos para intentar arreglar sus ropas, pero vamos Denis casi estaba desnuda, al parecer lo habían notado en mi mirada ya que ella se escondió detrás de Marcos quien me miraba sonrojado
—Que les hice para que estén allanando mi escritorio y mi oficina de esta manera
—Lo siento tanto Dian, es solo que las cosas se dieron así y en verdad lo siento
Trate de mantenerme lo más seria e imperturbable, pero vamos no era como si esto no me estuviera causando un poco de gracia, mi lado malo me decía que los hiciera sufrir un poco más, a mí me rodeaba el sexo por todos lados, tenía a los actores porno en mi casa y ahora también en la oficina
—Denis ve al baño a cambiarte
—Como ordene jefa y siento todo esto
—Anda ve antes de que alguien mas entre
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Golpe del Destino
RomanceDian Morei Mi vida giraba en torno al periodismo, desde que era pequeña soñaba con ser famosa en ese ámbito, soñaba con ser reconocida y por fin lo he logrado, 3 años luego de mi graduación y ahora aquí estoy siendo una de las mejores reporteras y...