• 𝔻𝕒𝕕𝕕𝕪 • [ ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ ]

05.

[ Una semana después... ]

—Entonces el contrato queda totalmente cerrado, las empresas Kim quedan aliadas con las nuestras.— hablo el señor Choi.

—Verá que no se arrepentirá de elegir nuestra empresa, señor Choi.—Dijo el rubio mientras sonreía cortésmente.

—Bueno, hermanos Kim, ¿algo más que agregar?—pregunto Choi bastante sonriente.

SeokJin volteo a ver a su hermano esperando un comentario extra de su parte, sin embargo lo único con lo que se encontró fue con el rostro de Kim bastante centrado en otra cosa totalmente ajena al contrato que acababan de firmar.

Su mirada, lejos de estar sobre los papeles en la mesa de la sala de juntas, se encontraba en dirección hacia la puerta del lugar, en donde se lograba divisar a un relajado azabache platicar de forma tranquila con Lisa, la chica encargada de la recepción de la empresa.

Una larga semana había pasado desde que Jeon había aceptado su dichoso segundo contrato, por lo que últimamente Kim se mostraba ensimismado y bastante emocionado con el menor. De alguna forma pasar tiempo con Jungkook se había vuelto uno de sus pasatiempos favoritos.

Se sentía como un niño pequeño al que le daban a probar un dulce nuevo y delicioso al cual se volvía adicto, llegando al punto de solo pedir ese dulce por un largo periodo de tiempo. En realidad era un nuevo sentir totalmente raro para alguien como Kim Taehyung, pues no acostumbraba a tener un amante habitual al cual recurrir.

Mordió su labio inferior al ver a su empleado dar la vuelta, dejando a la vista su trasero, el cual se veía bastante bien cuando traía esos pantalones de cuero negro que lo hacían enloquecer.

Si, Taehyung había desarrollado una nueva obsesión hacia las piernas y el trasero de su empleado.

Jin suspiro irritado, le dedico una mirada suplicante al señor Choi y este le devolvió el mismo gesto.

Los tres empresarios se despidieron, siendo Seok Jin quien se ofreció a acompañar al señor Choi a la puerta.

Taehyung suspiro aliviado y salió de la sala de juntas, paso junto al menor y empujó levemente su hombro llamando su atención. El menor al verlo se despidió de Lisa y camino tras el de forma discreta.

—Que bien te ves hoy—hablo Taehyung con una sonrisa ladina.

—Señor Kim, hoy no podemos, tengo demasiado trabajo, y no puedo dejar a Jackson con todo el papeleo—el menor suspiro.

—¿Por qué no? mandaré a Mark, tu vienes conmigo.

—Pero...

El pelinegro se apoyó sobre la pared y abulto sus labios.

—Últimamente pones muchos pretextos para evitar salir conmigo, ¿No crees que estás siendo un poco duro conmigo?—Cuestiono el mayor.

Jungkook suspiró con pesadez y abrazo los papeles que cargaba consigo, apegandolos a su pecho.

—Creo que estamos perdiendo bastante tiempo fuera de la empresa, su hermano ya lo a regañado bastante esta semana, ¿no debería ser un poco más responsable?

Taehyung resoplo molesto.

—SeokJin es un aficionado del trabajo, hace escándalo por cualquier pequeñez, además no te concierne a ti preocuparte por lo haga o no.

—Señor Kim, de verdad no creo que-

Sus palabras fueron abruptamente interrumpidas cuando sintió las manos del pelinegro tirar de sus caderas hacia el, pronto sintió los suaves labios de su jefe rozar los suyos, uniendolos en un suave pero profundo beso. Tal vez hubiera dejado que las cosas siguieran su curso, sino fuera porque recordó que aún estaban en el pasillo de la empresa y en cualquier momento alguien podría verlos.