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Hoy desperté con los ánimos por los suelos, por suerte hasta pasado mañana entraba a la universidad.
Me dormí hasta tarde recordando la imagen de David tocándose y después recordando que hace un año habría casi  jurado que  lo había olvidado y sólo lo veía de nuevo como un hermano y nada más, pero creo me equivoqué.

Tres veces estuve a punto de tocarme pensando en el, pero me detuve porque sabía que después me sentiría culpable.

Como sea, me levanto, voy al baño a enjuagarme la boca porque sería estúpido lavar me la sin haber desayunado y luego volverme la a lavar, sólo provocaría daños a mi esmalte dental por tantas lavadas.

Me cambio de ropa o más bien me pongo ropa y bajo las escaleras. A penas son las diez de la mañana, algo tarde a como estoy acostumbrada a levantarme.

–Buenos días! –dije lo más sonriente que pude, aunque mi sonrisa se borro cuando cerró el refrigerador y vi que no traía camisa.

»Con semejante lavadero, si ando lavando a mano«

–Buenos días! –dijo sonriente y acercándose a mi, se claramente que el notó como me le quede viendo.

Di media vuelta y rodé la isla.
–Qué vamos a comer?

–Hice croquetas de pescado y arroz blanco... Por cierto, hoy vendrá Kim a cenar con nosotros y puede que se quede a dormir.

Detuve el tenedor a medio bocado.
–Quién es Kim?

–Mi ... Novia.
Asentí mientras masticaba el arroz–Quiero que la conozcas.

Sentí un nudo en la panza, celos. No iba a soportar esa cena si se encontraba ella. O tal vez si.
Así que en un impulso de estupidez, empecé a hablar.

–No podré estar en la cena.

–Por qué? Kim es una persona agradable– se que lo decía para estar picando me.

–Es que Raúl me llevará a conocer la ciudad –era mi turno.

Ahora fue el que dejó de comer.
–Yo te puedo llevar.

–Paso, tienes una cena y yo una salida, asuntos pendientes.

Antes de que siguiera hablando, tomé mi plato y lo metí al lavavajillas, saliendo  de la cocina.

Ahora tenía que solucionar esto, y tener una cuartada. Por suerte o por acción divina tenía un mensaje de Raúl, lo se porque en el mismo mensaje decía que era el.

Salimos? Es que pasado mañana entro a la universidad y me vendría bien un tour.

Su respuesta no se hizo esperar.

–Claro! De paso podemos salir a un bar.
–Bueno, si quieres!:)

Esto me serviría para no pasar la noche, o al menos la mitad de la noche aquí.
–Claro;)

–Paso por ti a las seis.

–Espera, deja te paso mi dirección

–No es necesario, aquí todos saben donde vive David Abasca. ;)

La primera vez que te vi (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora