LA GORDA [COMPLETA]

Epílogo

DANIEL.

Hola, Vanessa. Espero que puedas escucharme y entender todo lo que te voy a decir. Quiero explicarte todo en esta carta.

Para empezar soy un idiota, de hecho es la última palabra que me dijiste antes de que te pasara esto.

Todo empezó cuando tu madre y el padre de Fernando se casaron. Él me pidió que te humillara ya que si él lo hacía tendría graves problemas con su padre.

Me dijo que el motivo era su ruptura con su novia Elena por tu culpa, además de tu físico. Pero en realidad era venganza por el sufrimiento de su padre.

Y yo me pregunté, ¿por qué no? Así que acepté, pero no sabía lo que iba a hacerte.

Fernando me pidió que te sacara fotos desnuda y se las mandara, eso era mi parte del plan. Pero para ello debía conquistarte. Y tenía que hacerlo en el menor tiempo posible ya que tu cumpleaños se acercaba, por eso nuestra relación avanzó tan rápido. Pero terminaste tu conquistándome.

Luego está el tema de Luna. Luna era mi novia hasta el día después de nuestra primera vez. El día en que nos hicimos novios, fue el día de la ruptura entre Luna y yo.

Tu madre (Hannah) se ha divorciado con el señor García y volvió con tu padre. Al enterarse de todo odió a la familia García y se está culpando tu muerte, "Si no me hubiera divorciado desde un principio, nada de esto hubiera pasado" dice siempre entre lágrimas.

Nunca vi a Fernando tan feliz, aunque su felicidad no duró mucho ya que murió hace dos días en un accidente.

Y yo aquí, sin poder olvidarte ni un segundo. Todos estamos destrozados, lamentando lo idiotas que fuimos. Y aquí estamos pagando lo que te hicimos y de la peor manera.

Yo... maté a tres personas sin usar ningún tipo de armas. Juro que cuando el enfermero me dijo: "No sobrevivieron, lo siento" sentí como mi corazón dejó de latir. Al preguntarle a qué se refería con sobrevivieron y me dijo que a ti y nuestro hijo, me sentí la persona más horrible del mundo.

Lamento no haber asistido a tu funeral pero de verdad que no podía.

Y bueno, sabes que no soy el mejor expresando mis sentimientos pero a tu lado me sentí tan feliz, tan cómodo, que aún no me creo que estás muerta.

Aunque en realidad nunca dejaste de existir para mí. Te quiero, y espero algún día me perdones.

Dejo la carta sobre la tumba de Vanessa después de leerla en voz alta y me seco las lágrimas.

—Entiendo si no me perdonas, no lo merezco, pero eso no hará que mis sentimientos cambien por ti, aún cuando no estás a mi lado. Te amo.

Cierro los ojos y siento algo posarse en mi muñeca. Al abrir los ojos veo que es una hoja de árbol con forma de corazón, y me pregunto cómo es eso posible si ni siquiera hay árboles en este cementerio.

Entonces sé que eres tú, quiero creer que me has perdonado, Vanessa.

La cojo y puedo ver el tatuaje que me hice hace dos días en mi muñeca derecha.

Una "V" en cursiva, que podía ser la inicial de muchas palabras, por ejemplo: Valentía, Victoria, Vicio, Volar, Vivir...

Pero en realidad es una "V" de Vanessa.

Hola, mis amores!!!

¿Necesitan pañuelos para secarse esas lagrimillas? Ay, no me lloren que me hacen sentirme mala aunque en realidad sí que lo soy.

Muahahaha.