וCuarenta y Seis•×

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Jungkook miraba a Yoongi con los ojos entrecerrados mientras tomaba de su batido de banana, luego miró a su rubio hyung y después nuevamente al pelinegro.

Yoongi estaba mostrándole una pequeña sonrisa en sus labios, cosa de la que seguramente no era consciente y, a pesar de haber pasado más de un minuto, aun veía ir y venir a Jimin de aquí para allá. Jungkook no pensó que Taehyung tuviera razón en que su malhumorado hyung le gustaba Jimin ¡Pero acababa de presenciarlo! Y podía apostar sus botas favoritas a que Jimin sentía lo mismo.

Cuando se acabó su malteada, siguió chupando de la pajilla hasta que el pelinegro le miró, le escaneó y suspiró.

-Ya sueltálo. -dijo el pelinegro, comenzando a comer su postre.

-¿Te gusta Jiminnie, hyung? -

-Hmm.

-Por que si te gusta no tengo ningún problema, Hyung. ¡Es mas! Apoyo totalmente su relación, Hyung. Y me alegra que por fin superarás a Hobi hyung y que te guste un chico como Jimin, porque él es un buen chico y es muy lindo y un bue...

-¿Quien dijo que me gusta? -le interrumpió el pelinegro, mirándolo irritado.

Jungkook quiso continuar con su diarrea verbal pero al pelinegro hablar, le había dejado sin habla ¿Que no le gustaba? ¿Acaso pensaba que él era estúpido? No lo era. Alzó una ceja y ni reprimió la sonrisa burlona que sus labios mostraban.

-Hyung, acabas de decirle (justo en frente de mi) que lo esperaras a la hora de salida de su trabajo ¡y está bien! Pero tiene que entender también que es la primera vez que usted hace eso ¡Ni siquiera con Hoseok!

Yoongi lo miró con una expresión indescifrable y luego volvió a soltar aire, se dejó caer en el respaldo de la silla y cruzo los brazos sobre su pecho. -¿Tanto se nota?

Jungkook le regaló una una inmensa sonrisa -Oh sí, justo ahora se notaba muchísimo. Y estoy segurisimo de que también le gusta!

Yoongi había tomado su móvil nuevamente y jugueteaba con él mientras miraba a su dongsaeng. Pensativo

-¿Crees que si le gusto? - miró hacia el rubio, que atendía una mesa al otro lado del local, había una linda sonrisa en sus labios mientras anotaba la orden del cliente. El pelinegro no dudó ni un solo instante que aquel chico si me gustaba, y mucho.

Yoongi tenia la sensación de que sí, oh por favor, el deseaba y exigía que fuera así. Maldecía por dentro el sentirse así, tan expectante con un chico. Joder que ni siquiera con Hoseok se sentía así.

-Obvio si, hyung.

-... Maldito mocoso, ¿Te crees ahora experto en el amor?

El castaño hizo un gesto indignado y llevó su mano al corazón. -Oh hyung, parece como si no me conoces! ¿Acaso no recuerdas mi yo pasado antes de estar en mi hermosa relación con mi alíen?

Oh sí, claro que recordaba, Jungkook era uno de esos chicos libertinos hasta que conoció a Taehyung, y gracias a Dios que entre sus muchas conquistas no hubiera contraído un ETS.

Siguieron hablando de su futura vida amorosa con el rubio (Jungkook tan emocionado que casi saltaba de su silla y el pelinegro con retilencia) hasta que los postres y el café del pelinegro se acabaron. En aquel momento, mientras el castaño iba a pagar, Yoongi se dio cuenta de que no tenia el número de Jimin, ni tampoco se lo había pedido. Y en sí, Jimin tampoco le había respondido a su proposición, solamente había dado por hecho que él estaría ahí esperando a su salida para caminar juntos por ahí.

Y sinceramente no había pensado en eso. Además, a él le interesaba mucho tener aquel número por meras necesidades personales.

Cuando Jungkook regresó, Yoongi ya estaba aburrido y mirando sus mensajes de whatsapp, no se molestó en enfadarse por el visto de Park, estaba más interesado en otros asuntos por el momento.

♠STALKER♠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora