Capítulo 6: La decisión y un nuevo comienzo

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El mismo día de la partida de kentaro, Sorata espero a ver como sus padres volvían a prestarle atención, pero eso no sucedió, pensó que aún era pronto. Decidió esperar a que el tiempo. El primer día después de la marcha de su hermano nada cambio, Sorata continuaba convencido que pronto volverán las cosas a su sitio, y decidió seguir esperando. Pero para su desgracia los días pasaron y nada cambiaba. Durante esos días su madre al inicio lo despertaba, pero esto siempre lo hacía, así que para Sorata no era un signo de cambio, también comían todos juntos, pero ya sea porque Sorata era tímido o por que sus padres no hablaban mucho durante las comidas, estas se realizaban en silencio, después de acabar sus padres directamente se iban hacer sus respectivas tareas. Su padre se iba al puerto a trabajar y en cuanto a su madre, limpiaba la casa y posteriormente visitaba a sus amigas de la ciudad, esto último empezó a ser cada vez más habitual, al inicio era lo de siempre, se iba por una o dos horas, pero con el paso de los días, volvía más tarde. Hasta que llego el punto que no volvía hasta altas horas de la noche. Su padre no se preocupaba de esto ya que el también empezó a salir con sus amigo y compañeros de trabajo, después de acabar con su trabajo.

Al inicio Sorata pensaba que esto no estaba mal, ya que a él le daría la tranquilidad que necesitaba para continuar leyendo, pero cuando sus padres al paso del tiempo empezaron a llegar cada vez más tarde se empezó a preocupar. Se preguntaba de que tanto hablaban con sus amigos, a esta pregunta encontró respuesta un día que se cansó de leer y salió a dar un paseo por la ciudad. Ahí fue cuando encontró a su madre con otras mujeres de su misma edad hablando en una teteria, se alegró al ver a su madre y fue en dirección a ella, cuando se estaba acercando por fin logro oír de lo que estaban hablando. Cuando escucho su conversación se detuvo en seco, ya que el tema del cual estaban hablando era de su hermano kentaro. Comentaban sobre las noticias que les llegaban y hablaban del progreso de su hermano a la hora de aprender los cuatro elementos, también hablaban de como kentaro había conocido al rey de la tierra y a sus altos funcionarios, de como asistía a cenas de gala, y conocía a mucha gente importante. De como las noticias alababan a su hermano, pero sobre todo quedo devastado al escuchar a su madre hablar solamente de kentaro.

Al final se dio cuenta que sus padres se convirtieron en gente popular en la ciudad debido a que su hijo se convirtió en el nuevo avatar.

Sorata volvió a casa, y justamente fue ese día que sus padres regresaron muy tarde, tan tarde que ellos se fueron a cenar con sus respectivos amigos y olvidaron por completo de su otro hijo, el cual se encontraba acurrucado en el suelo con la cabeza gacha entre sus rodillas.

Cuando llegaron sus padres, estos le vieron en el suelo en con las luces apagadas, su madre se enfadó.

Madre - que haces aun despierto a estas horas tendrías que haberte ido a dormir hacer dos horas

Padre - ve a tu cuarto y duerme ahora mismo

Sorata al escuchar a sus padres no pudo aguantar más.

Sorata - de que maldición estáis hablando, no os habéis acordado de mí en todos estos días, e incluso hoy no he podido cenar debido a que no había nada que comer!!!!

Ante la reacción de Sorata sus padres se quedaron con la boca abierto, no podían creer que su hijo menor que era mucho más obediente e introvertido reaccionara de esa forma, antes de darle tiempo a hablar, Sorata continua desahogándose.

Sorata - seguramente solo os importa hablar de mi hermano, hasta el punto de olvidaros de mí, yo soy más obediente e inteligente que mi hermano, y seguramente si me dejaseis entrenar mi control de la tierra sería más fuerte que mi hermano cuando seamos mayores, kentaro se fue tendrías que prestarme más atenc....

Un Avatar en el mundo ShinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora