Una historia un poco diferente [Akatsuki no Yona]

Capítulo 11

»Búsqueda de la aldea del dragón azul«
Narra ___

-dragón blanco...- habló el hombre que nos recibió

-les dije que no debían despedirme- les dijo Kija a los aldeanos, aun así sonreía

-¡esto es demasiado!- gritó una aldeana- ¡no creímos que se iría tan pronto!

-¿que dicen? - preguntó sonriendo - mi ama ha aparecido, necesita mi fuerza- me miró sonriente - generaciones de Dragones blancos han legado su poder por este día - les dijo

-Dragón blanco...- dijo el anciano con mirada triste

- si dejo que me consientan al marcharme, buscaré la ira de los cielos

- protegeremos la aldea hasta su regreso - bajó la cabeza en forma de respeto

-cuento con ustedes - dijo nostalgico - aunque muera, un nuevo dragón blanco nacerá mientras la aldea esté segura- Fruncí el seño y lo mire fijamente

- *eso no pasará, esta prohibido morir antes de mí ya que no permitiré que nadie muera* - pensé seriamente- *después se lo aclararé*

- ¡no diga eso! - exclamó llorando el anciano mientras los otros lloraban

-¡nos hará llorar! - le reclamó otro agregandose

-¡dragon blanco, idiota!- chillo un tercer anciano

- l-lo siento - respondío ante la escena que armaban los aldeanos por su partida

-¡dragon blanco! - llegó la "abuela" del dragon blanco

- abuela... - dijo sorprendido y triste a la vez

- ¡llevese estas bolas de arroz con usted!- le lanzo una gran bolsa con dicho alimento- hará frío en su viaje, lleve los abrigos que le hice- le pasó ropajes- ¡también medicina para diez años y suero para preservar su atractivo, ¡también llevese a esta doncella!

Silenciosamente reí por lo bajo por lo gracioso de la nueva escena armada

-¡Abuela, no puedo con todo esto!- se quejó por el peso- abuela, me iré por un tiempo, los ancianos se encargarán de la aldea - le dijo sonriendo

- nadie me dijo nada de eso - se quejó- como la más vieja, es mi responsabilidad cuidar de ella - dijo con una mano en el pecho

- pero escuché que está perdiendo la vista- se le acercó preocupado

-no hay nadie mas sano que yo- dijo tercamente

-si tiene muchas energías...- le sonrió dulcemente

- pero... es desalentador- dijo tristemente- mañana no podré despertarlo...- sollozó- la más grande esperanza de nuestro clan se cumplió, pero no creí que sería tan repentino...- se inclinó comenzando a llorar

- abuela, levanta la cara- le dijo el dragón blanco, Kija tomando su mano- pasé mas tiempo contigo que con mis padres, me viste crecer, eres mi querida abuela - sus palabras me recomendaron a lo que viví con mi querido maestro- incluso en una tierra lejana, orare por su felicidad, por eso debes descansar y tener una vida tranquila

- ¡imperdonable!- gritó haciendome dar un pequeño saltito en el lugar por el susto- lo hace sonar como si solo le quedaran unos cuantos años- bajó la cabeza- no he vivido lo suficiente... cuando cumpla con su deber y regrese seré la primera en recibirlo- comenzó a llorar- lo prometo

Kija la abrazó con una mirada melancólica

- y para asegurarme de eso le haré una promesa delante de toda la aldea- dije dando un paso al frente- el dragón blanco, Kija, estará bajo mi atento cuidado y le prometo que no le sucederá nada mientras yo aun viva