V de Venganza.

Capitulo #3 Primer Asalto Pt. 1

Hoy era viernes y yo estaba desesperada por que tocaran la campana que indicaba que me podía ir a mi casa y hacer mi maratón de películas de suspenso. Era la hora del almuerzo y sentía unas inmensas ganas de comerme una hamburguesa.

Cuando al fin conseguí mi almuerzo después de diez minutos de espera, busque con la mirada una mesa sola. Ubique una hasta el fondo, alejada de todos pero dos mesas antes estaban sentados el equipo de americano y ahí sentado con Jordán en su regazo se encontraba John.

Jordán era la chica con la que John me había estado engañando todo el tiempo que estuvimos juntos, ella es la típica barbie, cabello rubio y con buenas curvas, alta y sus piernas parecían medir dos metros cada una.

Fruncí el ceño y recordé las palabras de John.

"Todo lo que dije y todo lo que hicimos estando solos fue real."

Mi corazón se detuvo por un microsegundo y suspire pesadamente. ¿Cómo pudo haber sido real si siempre estuvo jugando? Si todo lo que habíamos pasado fue una farsa, fue un acto para hacerme creer que  yo le importaba solo para conseguir lo que él quería.

Ver a Jordan en sus piernas solo hacia que sintiera asco y ganas de vomitar. Mientras la besaba a ella también me besaba a mi. ¿Como ella podía estar como si nada? Si. La prefirió a ella pero aun así estuvo conmigo. Aunque haya sido una farsa los besos que nos dimos fueron reales. ¿Como pudo no importarle?

Sacudí mi cabeza. ¿Desde cuando me importa lo que pase por la cabeza de Jordan? ¿Qué pasa conmigo?

Apreté los labios. Maldita sea. Si quería llegar a la mesa tenía que pasar a lado de ellos y la verdad no quería.

Recolecte toda la fuerza de voluntad que tenía y camine a paso decidido hacia la mesa pero al pasar a lado de ellos, sentí como se interponia un pie en mi camino haciendo que cayera al piso al igual que mi comida. Escuche la risa de todos en la mesa y cuando levante mi vista vi como John me miraba riéndose con los demás del equipo mientras Jordan me miraba con autosuficiente

— Que patética.— Dijo riendo y poniendo sus brazos alrededor del cuello de John.

John soltó una carcajada y vi como volvía su cara para poder besar a Jordán, sentí como mi corazón se rompía un poco.

Maldita zorra.

Fulmine a los dos con la mirada y me levante con toda la dignidad posible y comencé a recoger mi comida del piso, gracias a Dios la hamburguesa estaba en una cajita si no hubiera tenido que tirarla a la basura, les dirigí una mirada de odio a todos en la mesa y observe como Kevin me miraba con lastima en los ojos.

Respire hondo y oculte mi sonrisa de autosuficiencia. Ya verían esos cabrones. Caminé rápido hasta llegar a la mesa y cuando estuve frente a ella me desplome en el asiento; mire fijamente la hamburguesa que tenía enfrente. Se me había quitado el apetito así que solo suspire y empuje la bandeja alejándola de mí.

— Lindo espectáculo.— Escuche una voz ronca detrás de mí.

Gire mi mirada y vi como Harry rodeaba la mesa para sentarse enfrente mío. La mire sorprendida, vaya no pensé que Harry algún día se sentaría conmigo y menos el solo y por voluntad propia. Su compañero habitual no se encontraba a su lado.

Harry puso los codos sobre la mesa y me miró fijamente como esperando a que dijera algo. No me había dado cuenta que sus ojos eran verdes, como dos esmeraldas, tenia pestañas largas y labios en forma de corazón.

A decir verdad Harry era muy guapo, la mayoría de las chicas de aquí querían algo con el pero lo único que conseguirían seria solo una noche de sexo, todos los sabían. Harry no tenia novias, las chicas para el solo eran para un rato y ya está.