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Había pasado una semana entera, y bueno tengo que admitir que el trabajo es bastante estresante, pa ricamente parezco la mayordomo de Harold, que si Leyla has estoy que si Leyla haz lo otro, ponme esta cita para tal día, ya me sabía sus frases de memoria, lo odiaba a veces pero otras otras me encantaba, me encantaba como al acabar el horario de trabajo él era diferente conmigo, charlábamos de cosas normales y bueno manteníamos una relación bastante cordial.

Hoy había una reunión importante así que tuve que asistir a la oficina una hora antes, Harold siempre quería que yo llegara antes que el.

Vi el ascensor y si ahí estaba el con su traje y maletín, se le veía muy estresado, y le caían pequeñas gotitas de sudor, así que se quitó la chaqueta, la verdad que era el típico jefe que te tirarías sin problema

-¿Todo bien?-pregunte al acercarme a él.

-No joder, todo mal, han aplazado la reunión para mañana estoy arto.-protesto.

-¿Un café?-Me pregunte.

-Si por favor. Y por cierto apúntame que a las 10 tengo una cita con una tal Kimberly, a veces viene bien quedar con chicas para despejarte.

¿Perdona? Auch eso dolia, no sabía esta faceta de él la verdad que no me lo esperaba.

-Ah y quiero que esta noche tú mientras te quedes a ordenar documentos.- Me dijo.

Cosas así me hacían odiarlo.

Había estado trabajando durante horas, a veces me entrenia viendo a Harold andar de un lado a otro.
Era la hora de comer así que salí a comprarme algo de comida rápida en el Burguer, era agradable que no hubieran colas largas en las afueras del pueblo.

Cuando tenia mi comida me dirigí a una mesa para sentarme casi todas estaban ocupadas pero por suerte me senté en una.

-¿Se puede?.-pregunto un chico haciendo señal a la mesa para ver si se podía sentar.

-Claro que si, no hay suficientes mesas, siéntate.-dije simpáticamente.

-¿Te llamas Leyla no?-pregunto.

¿Como sabía este mi nombre?

-Ehh si, ¿De que nos conocemos?-pregunte dudosamente.

-No,no nos conocemos, pero debo admitir que he escuchado hablar de ti?- dijo el.

-¿Que has oído hablar de mi?-pregunte curiosa.

-Nada interesante simplemente que eres las nueva secretaria de Harold, ah por cierto yo soy Damon, siento no haberme presentado antes.-dijo el.

El chico era bastante agradable y muy atractivo sus ojos azules combinaban con su cabello negro, parecía unos cinco años más mayor pero la verdad que el chico se cuida, me había dicho que trabajaba.
para Harold en temas de hacer publicidad hostelera.

Solo acabar de comer me despedí de él, la verdad era buen chico me gustaría más verlo por aquí para establecer amistad con alguien de aquí.

Subí arriba a seguir trabajando.

-Veo que has echo ya un nuevo amigo por aquí.-Me dijo Harold levantando la ceja derecha.

-No es mi amigo, solo lo acabo de conocer, pero estaría bien socializar con alguien de por aquí no conozco a nadie.-dije yo.

-Con conocerme a mi buen té sobra Leyla.-dijo Harold.

-Pero tú eres mi jefe.-dije yo.

-¿Te apetece mañana cenar en la ciudad?-pregunto Harold.

-¿Me estás pidiendo una cita?-dije divertida.

-Podría hacerlo pero no, solo es una cena de trabajo.-dijo riendo.

-Solo estaba bromeando, y si podré ir.-comenté yo.

-Bueno Leyla te dejo al mando de todo que yo sí que tengo una buena cita con una lady.-dijo.

El reloj ya marcaban las once de la noche, recogí mis cosas para irme a casa solo quedaba yo en la oficina, ya que Harold estaría pasándolo genial comiéndose el pastel de una.

Tiene café en la mirada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora