Capitulo 4

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-¿Vamos a entrar en Chatroulette? ¡Somos menores de edad!

-¿Enserio? ¿Quien no miente en internet?

-Pero... aún así....

-Mmmm, ¿Que te doy para que te pongas?

-¿Tu que te vas a poner?

-¡Mi sudadera de monokuma! ¡Por supuesto! Y me voy a pintar debajo del ojo, la rayita roja de su lado oscuro. Pero tú... no sé que ponerte.-He suspirado

-Bueno, no puedo echarme para atrás.- he mirado a su armario- ¿Puedo?

Se ha quedado embobado mirándome.

-¡S-Si! ¡Claro!

He mirado su armario, lo cierto es que tiene bastantes cosas relacionadas con videojuegos. He cogido una gorra de Pokemon y ropa para vestirme como una entrenadora pokemon.

-Voy al baño al cambiarme.

-Esta al fondo del pasillo

-Vale, gracias

Le he mostrado una sonrisa y me he ido al baño. ¿Que se supone que voy a hacer? ¿A trollear en Chatroulette?

Dios... ¿Que estoy haciendo con mi vida?

He pasado al baño y he hechado el pestillo, me he puesto una camiseta y encima un chaleco, todo al estilo de Ash, luego me he puesto la gorra y he salido del baño. Como los pantalones no se van a ver, me los he dejado.

Cuando he vuelto a la habitación, Javier ya estaba vestido, tenia la gorra, la camiseta y la sudadera de monokuma, es un auténtico fanático.

-Ya estoy. ¡Me gusta como vas!- parecía monokuma versión humana

-Gracias, a ti también te queda muy bien.- me he puesto un poco nerviosa.

-Gr-Gracias.

Ha encendido el ordenador y ha puesto Chatroulette.

-¿Preparada?

-No- se ha reído y ha comenzado.

Hemos estado haciendo lo mismo todo el rato, primero comenzó Javier. Se comportaba como monokuma, decía frases de la serie y se volvía un sádico, luego me tocaba a mi, diciendo que quería una batalla pokemon, y hacia como si lucháramos. Y así íbamos hablando uno a uno. A veces nos entendían y otras no.

Nos hemos encontrado de todo, y hemos estado un buen rato, hasta que ya nos hemos empezado a cansar.

-Hagamos un último cada uno.

-Vaaale- he contestado, cansada.

Ha empezado él, y no me he podido creer lo que he visto. Javier parecía seguir, como si no lo conociera.

-¿Eres Wismichu?

-Si, ¿Y tú quien eres?- Lo ha dicho molesto, hasta que me he acercado más a la cámara. Soy Sara...

-Sora- me ha cortado Javier.

-Bueno, soy "Sora"- he dicho imitando su voz- soy una seguidora tuya, me gustan tus vídeos.

-Gracias, tu también me gustas- me he puesto más nerviosa de lo que estaba. ¡Estoy hablando con el mismo Wismichu!- ¿Y que hacéis vestidos así? ¿Estais haciendo cosplay?

Javier y yo nos hemos mirado.

-Más o menos.

-Si lo hacéis os pongo en mi vídeo.- He vuelto a mirar a mi compañero, ambos hemos asentido.

Diario de una otakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora