capitulo 1

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UN AÑO DESPUES...

POV DANTE...

Volví antes de lo normal a casa, no era una mansión, aunque tampoco era tan pequeña, era justo lo que Flavia y yo necesitábamos para ser felices, tiempo después de llegar a Moscú me entere que mi plan había resultado, en Italia ya me daban por muerto, eso me libraba de muchas cosas, así quizá nunca insistirian en buscarme, ahora vivía como cualquier persona normal, sin lujos, sin grandes empresas, solo con un normal empleo en una empresa, sabia sobre administración, cosa que me había valido para poder conseguirlo, debo admitir que nunca había vivido tan "modestamente", pero no me desagradaba en lo mas mínimo, entre a casa, crucé el pequeño pasillo hasta llegar a la sala, me sorprendió no escuchar ni un solo ruido, busque en la cocina pero tampoco encontré a nadie, comencé a preocuparme pues no era normal tanto silencio, siempre estaba el ruido, especialmente los desesperados gritos de Flavia, le encantaba el ser madre, y se le daba de maravilla, sin embargo de vez en vez se desesperaba cuando Lía lloraba y ella no sabia el por qué, eran momentos únicos, preocupado fui primero al jardín, nada, absolutamente nada, todo aquello me desconcertaba, ellas no salían, no sin que yo lo supiera, miles de pensamientos me invadieron, por desgracia ninguno era bueno

Subí a la habitación de Lía, tampoco estaban ahí, el ultimo lugar que quedaba era nuestra habitación, entre y podía jurar que el alivio que sentí fue mas que evidente, ahí estaban ambas, dormían tranquilamente, me acerque, Lía despertó, era una niña preciosa, grandes ojos turquesa, rubia y blanquita, era preciosa, abrió sus ojitos de golpe, estiro sus manitas para que la cargara, la tome en mis brazos para jugar un poco, era tan risueña que sus risitas despertaron a Flavia, se removió en la cama hasta que al fin se decidió a abrir aquellos hermosos ojos

-mmm, hola amor

-hola preciosa

-disculpa que no te recibí, es solo que esta pequeña cosita me rindió

-¿es verdad princesita?- bese su pequeña cabecita mientras ella, como de costumbre, reía

-¿que tal todo?

-bien, todo normal, ¿sabes?, como cuando llegue no escuche nada, cosa demasiado inusual, las busque por casi que toda la casa, te juro que cuando veia que no aparecían pensé lo peor

-no te preocupes, nadie sabe que estamos acá, a ti hasta muerto te creen, no creo que alguien pueda venir y hacernos algo, debes empezar a olvidar todo eso, yo ya lo hago y creeme que me va muy bien

-si, veo que se te a hecho fácil

-claro, es solo pasado, un pasado que quiero y sé, que podre olvidar , haz tu lo mismo, veras que así hasta vivirás mas tranquilo, es imposible que aquí nos pase algo, como te digo, nadie, absolutamente nadie sabe donde estamos

-lo se, lo se, aún así, siempre tengo cierto temor

-no te preocupes amor por favor, cambiando de tema, te tengo una gran noticia

-a ver, cuentame

-¿listo?

-si

-¡me aceptaron en la academia de arte!

-¡¿enserio mi amor?!

-¡si!, hoy por la mañana me llegó la notificación por correo, me aceptaron amor, al fin me aceptaron

-te lo dije, pero...tardaron demasiado

-si...así son esas cosas, tardadas pero efectivas, ya ves, además me beneficia el hecho de que sea hasta hoy pues así pude tener el tiempo necesario para cuidar a Lía, ya tengo quien nos ayudara a cuidarla mientras yo estudio y tu trabajas

-¿enserio?, ¿quien?

-la señora Olenka Belov

-¿esa vieja amargada?- realmente odiaba a esa mujer

-¡Dante!

-¿que?

-la señora Belov es muy buena persona, ella amablemente se ofreció a ayudarnos

-¿se ofrecio?, eso no me cuadra

-bueno, le pregunte si sabia de alguien de mucha confianza que pudiera ayudarme con Lía y  me dijo que ella lo haría con gusto

-amor, no quiero que te molestes pero esa mujer no me agrada en lo mas mínimo, no me parece que sea la clase de persona que debería cuidar a mi hija

-eres muy desconfiado, es cierto que tu y ella no se llevan muy bien, pero conmigo es un amor, además ya ha cuidado a Lía, y lo hace muy bien, además, aun hay algo que yo no entiendo,

-¿que cosa?

-¿por que ella y tu no se llevan?

-bueno...que te digo, es solo que ella siempre dice que yo soy un mal padre, que nunca paso en casa, que no le hago caso a mi hija, que no atiendo a mi esposa, en fin, se la vive criticándome, el problema es que mientras yo hago todo eso, ella no esta- reí ante su tono

-bueno, bueno, tranquilo, tampoco es para que te pongas así, solo quería saber, aunque tiene razón en ese aspecto

-¡¿en cual aspecto?!

-en que caso no me atiendes

-¡¿que?!

-si, ya llevas vario rato sin tocarme

-a ver, a ver, según se, tienes que guardar reposo por mínimo cuatro meses, tuviste una hija, fue parto natural, ¿como se supone que deba tocarte si hay riesgo de que te lastime?

-bueno pero...

-¿pero?

-¡pero me haces falta!

-si, y creeme que tu a mi, pero eso no quita que quiera, deba, y tenga que cuidarte

-si, si, si, di lo que quieras, el punto es que la señora Belov cuidara a nuestra hija y punto

-esta bien, y...¿cuanto se supone que hay que pagarle?

-eso es lo único en lo que piensas, dinero

-¡claro que no!, es solo que no creo que vaya a hacerlo de a gratis, ¿o si?

-no, pero tampoco es que cobrará millones

-lo se, lo se, simplemente debo saberlo para hacer el espacio en el presupuesto

-desde que tus millonarias cuentas se redujeron a las de un hombre normal, ahora te fijas en todos los costos

-bueno, ¿que quieres que haga?, jamas en mi vida había tenido...eh...limitaciones, por eso ahora debo cuidar mi dinero, ya no es "inagotable" como antes

-si, si, si, disculpe señor, se me olvidaba que usted nació en cuna de oro, que solo vestía de seda y vicuña, que disfrutaba de los mejores banquetes de caviar almas los cuales  comía en bajilla de plata y...- para entonces ya tenia una notoria expresión de rabia que sabia me servía solo para ocultar mis deseos de reir sin parar

-¡bueno ya! -comence a reír - no tenia cuna de oro, tampoco comía caviar, sabes que odio el caviar, es extraño lo se, pero lo odio, no toda la bajilla era de plata...lo de la vicuña pues...¿sabes que?, mejor vamos a comer que tengo hambre- tome a Lía, que para entonces estaba jugueteando en la cama junto a su madre, y sali, mi bella Flavia me siguió, mi vida era realmente perfecta...



Mi Dulce Pureza  (BTS Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora