Hero of Twilight [Link x Midna - TLOZ: Twilight Princess]

VI - La solución al deseo

Habría pasado media hora desde que Link salió del castillo en dirección al Circo del Espejo, y la ansiedad mezclada con emoción lo invadía por dentro. ¿Cómo entraría? ¿Qué es lo que lo esperaría dentro de aquel santuario? Preguntas como esas rondaron por su mente en lo que llevaba de viaje, hasta que un estruendoso saludo hizo que Epona se detuviera en seco y mandara a Link a volar.

—No era mi intención asustar.

—¡! —. Link observó atónito a la figura que habló.

—No me mires así. Ganondorf ha sido derrotado, así que ya no tenemos que seguir más órdenes —dijo el gran jefe orco.

Link aún recordaba la última que lo vio, quedando igual de sorprendido que ahora. Haber luchado con él tantas veces, pensando que era un verdadero enemigo, cuando en realidad él y los otros orcos estaban destinados a seguir las órdenes del malvado Ganondorf.

—Si vas al Circo del Espejo, tengo que advertirte sobre algo...—hizo una pausa—. Hay una gota de maldad que aún no se ha desvanecido.

—¡¡!!

— ¿Recuerdas...a ese lacayo llamado Zant? —Link asintió—. Pues sigue habitando en el Crepúsculo. Y si bien es cierto que murió a manos de Midna, en ese momento Ganondorf seguía vivo, por lo que fue capaz de resucitar su alma.

—¡¡¡!!!

—Además, no dudará en tomar venganza.

—¡¡¡¡!!!! —. A Link no le tomó mucho tiempo darse cuenta de lo que el jefe orco quería decir.

Midna estaba en peligro.

Después de pensar por unos segundos, lo miró y asintió con la cabeza en señal de agradecimiento. ¿Cómo es que él sabía todo eso? Link sintió curiosidad, pero se ahorró la pregunta. Se subió a Epona nuevamente y cabalgó hasta llegar al lago Hylia. La noche ya había caído sobre el reino de Hyrule y el joven héroe comenzaba a sentirse somnoliento. Sin embargo, la preocupación y el sentido de protección se apoderaban de su cuerpo, a tal punto, que fue capaz de superar el sueño y seguir con su travesía.

—————En el Crepúsculo—————

—No...No... ¡No! —exclamó Midna. Un libro tras otro fue arrojado al piso, mostrando así la impaciencia de la soberana—. No está por ninguna parte.

—————Flashback—————

La noche pasada, Midna había salido del santuario para luego dirigirse secretamente a la biblioteca. Quería encontrar algo que le ayudara a estar con Link para siempre. Ya no le importaba causar un desequilibrio a cualquiera de los mundos, simplemente anhelaba estar con su amado. No obstante, por más que buscara y buscara, no encontró nada.

—Niño —habló la soberana. Él guardó silencio un momento.

—Fado...

— ¿Qué?

—Mi nombre es Fado, princesa —sonrió levemente.

—...Si me estás revelando tu nombre...quiere decir que algo se aproxima ¿no?

—Es posible —Fado se acercó lentamente y observó a Midna—. A pesar de que se lo dije antes...Por favor, no deje que la codicia se apodere de su corazón.

—No sé a qué te refieres...—dijo frunciendo el ceño— pero no dejaré que eso pase —sonrió.

—...Si lo que estaba buscando...era una forma de permanecer con el joven Link...la hay.

—¡!

—En un sótano, cuya entrada se encuentra en la parte más recóndita de la biblioteca, hay un objeto que le será de ayuda. Y para descubrir aquella entrada, deberá sacar el libro correcto del estante correcto —dijo dándose media vuelta—. Espero que lo encuentre —y desapareció.

—————Fin del Flashback—————

Midna ya había sacado la mayoría de los libros ubicados en la parte inferior de la biblioteca. Por un segundo, pensó en darse por vencida, hasta que observó fijamente la última fila que le quedaba por retirar, percatándose de que faltaba un ejemplar. No supo decir si lo había quitado accidentalmente o no, pero su corazón empezó a agitarse cada vez más debido la idea que cruzó por su mente. Posicionó su mano en el hueco, como si de un libro se tratara, y jaló hacia abajo. Toda la habitación se sacudió en un dos por tres, provocando que el librero diera paso a una escalera iluminada por antorchas.

— ¿Cómo es que Fado conoce mejor mi castillo que yo? —se preguntó la soberana. Lentamente, fue bajando escalón por escalón, y a su derecha, avistó una especie de altar. Una antorcha a cada costado, y en el centro...

—Una espada.

Sé que Fado pertenece a otro tiempo, pero realmente es mi personaje favorito de la saga, así que quise incluirlo. Me disculpo si causé alguna confusión