Si Señor... [JeongCheol]

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La comida continuo en silencio por mi parte, los amigos de Seungcheol bromeaban acerca de personas, y temas que no comprendía, por lo que me limité a quedarme callado. Cuando terminé mi comida junte mi plato junto con el vaso, y cuando volví me di cuenta que los demás también habían terminado, por le que me acerque al chico que tenía mas cerca y le pregunté. 

-¿Quisiera algo más Señor?

-No, Jeonghan, puedes llevarte el plato, gracias. 

Le hice una reverencia y seguí juntando todos los demás, cuando terminé la última ronda de platos y estaba por comenzarlos a lavar alguien me tomó de la cintura, y depositó un beso en la parte de atrás de mi cuello causando que me tensara. Cuando giré para ver quien era me encontré con el rostro de Seungcheol a escasos centímetros de mi rostro. 

-Lamento lo de hace rato, prometo que lo voy a arreglar. 

¿Y que mierdas se supone que eso significa? ¿Que va a dejarme en paz? ¿Que me va a despedir? ¿Qué carajos? No tuve tiempo de preguntar ya que simplemente dejó un corto beso en el mismo lugar y después salió de la cocina. Terminé de lavar la vajilla intentando olvidar lo que había pasado. Cuando lo hice tuve por fin tiempo de revisar mi teléfono, y vi que tenía dos llamadas perdidas de Joshua, lo llamé de vuelta para ver que necesitaba. 

-¿Bueno?

-Shua, soy Jeonghan. 

-Ah claro Hannie, ¿Qué sucede? 

-Me llamaste, y quería ver si algo sucedía. 

-Ah si, llamaba para preguntarte si estaba bien que mejor nos quedemos donde trabajas, así puedes volver al trabajo si te necesitan. 

Mierda. Había olvidado completamente que había quedado de salir con Joshua, no podía decirle eso, lo tomaría como que no me importa, cosa que no es cierto. 

-¡Claro! Eso es mejor, ¿recuerdas como venir?

-Sip, ya voy para allá. 

Cortamos la llamada y me fijé en la hora, y apenas eran las 4:15 minutos, por lo que decidí subir a cambiarme, ya que aun tenía el uniforme de trabajo. Entré en la habitación y tomé unos jeans negros, una camiseta blanca simple, y sobre esta me puse un saco negro para agregarle un toque mas formal, todo esto con unos tenis básicos blancos. Cepillé mi cabello para que perdiera la "forma" de la cola de caballo que tenía previamente, y lo puse detrás de mis orejas. Tomé de nuevo mi celular y baje rápidamente, encontrándome a  uno de los amigos de  Seungcheol en las escaleras. 

-Jeonghan. 

-¿Si? ¿Necesita algo?

-No, yo no, pero Cheollie me mando a buscarte, esta en el patio. 

-Muchas gracias. 

Baje las escaleras y me dirigí al patio donde estaban el y el resto de sus amigos, dos de ellos en la piscina completamente vestidos. 

-¿Si Señor? ¿Qué necesita?

Estaba riendo histéricamente, mas al verme se calmo un poco, se giró para verme y después hablo. 

-Ah si, estos idiotas- señalando a los dos chicos dentro de la piscina- no saben comportarse, ¿podrías traerles una toalla?

-Claro Señor, ¿sería todo?

-Si, gracias Hannie. 

Hice una reverencia y entré a la casa para buscar las toallas, tomé dos, y por si acaso una tercera y las lleve al patio, se las entregué a los chicos dentro de la alberca, el chico mas alto de todos los presentes, y el chico de orejas chistosas, después me dirigí a Seungcheol. 

-Disculpe, ¿Podría hablarle en privado?

-Claro, vamos adentro. 

Entramos a la casa y fuimos a la cocina, estaba un tanto incomodo por eso, ya que cuando estaba con el nunca sabía como iba a actuar, podría hacer las cosas menos pensadas en cualquier segundo. 

-Ammmm, pues vera... Jo-Joshua vendrá por que quedamos de ver-vernos hoy. ¿Podría el quedarse aquí? 

-¿Qué?

Mierda, sonaba molesto. 

-D-digo, así puedo aun atender mis deberes si u-usted o sus amigos lo necesitan. P-pero si a usted le incomoda podemos estar afuera y prometo que esta vez n-no descuidaré mis deberes. 

Maldito sonrojo, odiaba no poderlo controlar, y mi piel al ser palida se notaba facilmente. Comenzó a acercarse a mi lentamente. Mierda, mierda, mierda. 

-Hannie, no tienes por que pedirme permiso, claro, que venga. 

Y dejo un beso en mi mejilla. ¿Qué carajos esta pasando? ¿Me dice que esta bien que lo invite, y después me besa? ¿Qué clase de juegos esta jugando conmigo? Intenté no prestarle atención y conteste. 

-Gracias Señor, si no necesita na-nada más... Me retiro. 

Hice una reverencia y salí de la cocina para mandarle un mensaje a Joshua, preguntándole si estaba cerca, y esperé a su respuesta. 

Tocaron el timbre, por lo que fui rápidamente a la puerta para abrirla, revelando detrás a Joshua. Llevaba una playera blanca con detrás negras, una camisa azul cielo abierta encima, unos jeans azul marino, y unos tenis negros, se veía malditamente hermoso.