El amor te cambia

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Narra Diedre

- Daven, hijo de...- dejo las palabras en el aire mientras observo al elfo situado en el trono- ¿Diedre Lokidottir?- pregunta el elfo levantándose del trono- La misma- digo con voz autoritaria- Cuánto tiempo, princesa- dice con una sonrisa burlona- Para mí ha sido muy poco- digo frunciendo el ceño. Observo toda la sala que nos rodea hecha de marfil y bronce, como la fachada. Pero esta se para en una mujer situada al lado de Daven- Princesa de Asgard es un placer conocerla- dice la mujer haciendo una pequeña reverencia- Debo suponer que usted es la prometida del...rey- digo divagando un poco al terminar la frase, lo que hace que Daven entorne los ojos. La mujer solo suelta una pequeña risilla, coje la mano de su prometido y los dos se acercan a nosotros- ¿A qué se debe vuestra repentina vista?- pregunta la próxima reina aún con la sonrisa en la cara. Yo me quedo en silencio lo que hace que dé pie a Thor para hablar- Necesitamos ayuda, por un secuestro- dice con voz firme colocandose al frente de los reyes- Y queréis saber si hemos visto algo fuera de lo común- dice desinteresado Daven mientras se da la vuelta y vuelve a su estúpido trono de ramitas- ¿Por qué debería ayudaros?- pregunta ladeando la cabeza. Fruncí el ceño y tengo la intención de sacar una de mis dagas pero una mano me lo impide- ¿Sabe lo bueno que sería para usted que todos los reinos se enteraran de las paces entre Asgard y el Reino de los Elfos Luminosos? ¿Hacer algo que vuestros antecesores ni pensaron? Ya está consiguiendo la igualdad con su amada, ¿por qué no seguir adelante?- dice T'Challa con una sonrisa. La mujer se gira hacia su prometido con una sonrisa- Cambiaríamos muchas cosas, amor. Serías recordado por siempre- Daven se levanta de su trono y se acerca a su prometida para cojerle la mano- Seríamos recordados por siempre- los dos se quedan mirándose alelados- Que bonito, que precioso. Bueno que, ¿nos ayudas o no?- interrumpo antes de que dé un ataque de diabetes. Noto como Natasha me da un golpe por mi interrupción- ¿Qué? Esto se estaba volviendo incómodo- digo encogiéndome de hombros. La pelirroja rueda los ojos, para después Daven hablar- ¿A quién hay que encontrar?- Thor sonríe de oreja a oreja y dice- A mi hermano, Loki Odinson- la cara del elfo cambia, pero su prometida niega con la cabeza- Os ayudaremos a encontrarlo, todo sea por la paz- dice con una sonrisa aún más grande que la anterior. Daven suspira y asiente- De acuerdo, pero la noche comienza a caer y será más difícil encontrar cualquier pista. Os invito a descansar en palacio y mañana, al alba partir. Parte de mi ejército y yo mismo os ayudará a buscar al hijo de Odín. Os seguiremos a cualquier planeta que vayáis- sentencia el rey- Porfavor, llevad a nuestros invitados a sus aposentos temporales- ordena de manera gentil (Extraño en él) a sus sirvientes- Nos veremos en la cena, os avisarán- me dice la futura reina. Yo asiento y comienzo a caminar hacia la puerta- ¡Por cierto! ¡Mi nombre es Sade!- grita la mujer antes de que yo salga por la puerta- Diedre Rogers- digo con una sonrisa triste para después salir y seguir a mi equipo. Caminamos por los pasillos en completo silencio observando cada parte del lugar. De vez en cuando nos encontrábamos a alguien familiar de la corona que se nos quedaba mirando asombrado- ¿A qué se deben esas caras? Me ponen nervioso- dice Barnes colocándose a mi lado- Sois forasteros, y ninguno de los reyes había dejado hospedaje a forasteros- informa uno de los sirvientes, los dos fruncimos el ceño- Sade ha cambiado mucho al rey Daven. El amor te hace cambiar, princesa de Asgard- dice el elfo con una sonrisa antes de pararse frente a una puerta- Estos serán vuestros aposentos- me informa mientras me abre la puerta- Sígame, los suyos están cerca- le dice el sirviente a Barnes mientras comienza a andar- Nos vemos más tarde- dice con una pequeña sonrisa para después seguir al elfo. Cierro la puerta y me dirijo a la enorme cama, tumbándome al instante. Me quedo observando el techo, no puedo evitar pensar como estará...Si seguirá vivo o su cadáver ya será alimento para gusanos. Un suspiro lastimero sale de mis labios justo antes de que llamen a la puerta. Me quedo en silencio esperando que el que haya llamado se marche pero insiste- Die, sé que estás dentro- dice Steve con voz pesada mientras abre un poco la puerta dejando ver solo su cabeza- No tengo ganas de hablar Steve- digo cansada mientras me doy la vuelta dándole la espalda. Él no dice nada, solo escucho sus pasos acercándose, para después sentir como la parte vacía de la enorme cama se hunde- Lo encontraremos- dice susurrando mientras se acerca a mí. Al notar su calor me giro para enfrentarlo- ¿Y si ya está muerto? ¿Y si esto no está sirviendo para nada?- digo con voz neutra mientras mis ojos rojos se llenan de lágrimas que evito soltar- Loki es fuerte. Estoy seguro que seguirá aguantando, sabiendo que termine como termine te verá junto a él- respiro profundamente y agacho mi cabeza mientras me acerco más a él hasta que acabamos en un abrazo. Ya echaba de menos esto, el sentirte protegida, el saber que nadie te hará daño. 

Despierto sola en la cama, ¿cuándo me había dormido? Estiro mis brazos, he dormido demasiado bien. Observo un vestido encima de mis piernas junto a una nota.

Sería estupendo que te lo pusieras para la cena, a las 22:00.

Estarás hermosa,

Sade.

Observo el vestido con pesadez, no es que no sea bonito, claro que lo es...Solo que lo mío no son los vestidos, como ya sabéis. Pero tampoco quiero que se ofendan.

 Me levanto de la cama y me dirijo al baño donde hay una bañera ya llena de agua con espuma y un rico aroma a ¿menta? Lo que inventa la gente. Me desvisto para meterme a la enorme bañera donde me quedo un largo rato hasta que obserbo un reloj, es demasiado tarde- Mierda- mascullo mientras salgo de la bañera con rapidez. Tardo demasiado en colocarme el vestido debido a las tantantas cuerdas que tiene para poder atarlo. Me coloco unos zapatos planos que van a conjunto con el vestido y salgo a toda prisa del cuarto- ¡Diedre!- me gritan por detrás lo que hace que yo me pare abruptamente- ¿Reina Sade?- pregunto confundida, ya debería estar en el salón- No hace falta que vaya con esas prisas, digamos que Daven no es muy puntual- dice con una sonrisa divertida- Parece que no ha cambiado tanto como yo pensaba- digo haciendo una mueca. Ella se ríe y me indica que la siga con la mano- Antes de conocer a Daven era la sirvienta de la reina, me encargaba de que siempre estuviera perecta para sus invitados- narra mirando a la nada con nostalgia- Pobrecita- digo con una mueca- No lo sabes tú bien- dice riéndose. Las dos caminamos hasta llegar frente a una puerta- No puedo permitir que una princesa invitada aparezca con esos pelos a la cena, permíeteme que le arregle un poco- dice con una sonrisa mientras me obliga a sentarme en una silla frente a un enorme espejo- Será una reina increíble- digo con una pequeña sonrisa mientras ella me sigue peinando- No estoy segura de ello- dice con una sonrisa triste- Debes estarlo Sade, eres bondadosa y amable, a parte de que tienes experiencia en distintas cosas. Lo que no te hace una reina inútil que solo calienta una silla con su trasero- ella suelta una pequeña risilla- Me gustaría ser aunque fuera una tercera parte de lo buena reina que fue tu abuela. Me dolió muchísimo su partida al Valhalla- las dos nos quedamos observando el espejo con una sonrisa triste- Ya está- dice mientras recoje el cepillo en uno de los cajones. Mi cabellera tiene un peinado simple, una trenza adornada con pequeñas flores rojas que contrastan con mi vestido gris y mi cabello castaño- Gracias- digo mientras me levanto de la silla- De nada, princesa- las dos salimos del cuarto y nos encaminamos hacia el salón donde se celebrará la cena. Al entrar vemos como todos estaban hablando entre ellos y como era de esperar Daven no estaba entre ellos- Iré a buscar al perdido- dice divertida mientras se da la vuelta y comienza a caminar de nuevo por el pasillo. Todos estaban vestidos con los trajes de aquí. Natasha con un  vestido fino llenos de telas que se cruzaban formando bonitas flores, Wanda con otro rojo escarlata con un lazo alrededor de su cintura. Los hombres con simples camisas de lino y pantalones de cuero de distintos colores a conjunto con una especie de chaleco de piel aderida a cada torso- Ni que los hicieran a medida- dice Barnes apareciendo a mi lado. Me giro a verle y estaba realmente distinto. Sin poder evitarlo frunzo el ceño- Te ves distinto- susurro mientras le observo de arriba a abajo- Tú te ves preciosa- dice con una sonrisa antes de marcharse a buscar un sitio libre. Me quedo estática en mi espacio sin poder hacer nada. ¿Dónde se había metido aquel hombre irritante que no paraba de preguntar? ¿Porqué ahora me parece un hombre más... apuesto y amigable? ¡Por Hel! ¡¿Qué pasa conmigo?!

Born to die (Bucky Barnes) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora