(4) ¿Qué ocurre con los Cullen?

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¿Quería quedarse a hablar conmigo? Repentinamente me puse nerviosa.

-No, puedes quedarte. -Le dije.
-Perfecto.

Puso una sonrisa y se sentó en un tronco que había tumbado en la arena, yo hice lo mismo y me senté a su lado.

-¿Y cuanto tiempo llevas aquí?
-Vine ayer. -Le contesté.
-Vaya, entonces intuyo que aún no has visto la zona. -Dijo con una sonrisa.
-Eh, pues no, aún no la he visto.
-Podría enseñarte esto algún día, si quieres. -Se ofreció.
-Claro, me encantaría. -Dije con una ámplia sonrisa.

No tenía mucho que hacer estos días, además, me alegraba la idea de pasar el tiempo con Jacob, aunque apenas le conociera, aún.

-Por ahora lo poco que he visto a sido la casa de Edward y su familia. -La mandíbula de Jacob se tensó.
-¿Conoces a los Cullen? -Preguntó aún tenso.
-Si, Bella me llevó ayer para que los conociera, hoy hacen una fiesta por su cumpleaños. -Le dije.
-Van a hacer una fiesta... -Dijo casi para sí mismo, sentí como sus manos comenzaron a temblar ligeramente.
-Jacob, ¿estas bien? -Dije poniendo una mano en su brazo, sentí como se calmó.
-S sí, sólo tengo frío. -La respuesta hubiera sido convincente de no ser porque su piel seguía desprendiendo un calor abrasador.

No entendí esa reacción por la fiesta de los Cullen, ellos eran buenas personas.

Jacob se calmó y continuamos hablando, tanto de mi pasado como de Forks, aunque el tema se fué de las manos cuando empezamos a hablar de las cosas más vergonzosas que me pasaron.

-¿Enserio? ¿Quién se cae en un terreno liso? -Decía Jacob a carcajadas.
-¡Déjame! Ya has visto que soy demasiado patosa. -Dije roja de la vergüenza. -Tenía que parecerme a Bella en lo peor. -Maldije, aún riendo.
-Bueno, también os parecéis en otras cosas, los ojos, son iguales. - Dijo Jacob. -Que por cierto, son preciosos.

Dijo clavando su mirada en mis ojos, no pude evitar mirar los suyos y perderme de nuevo en ellos.
¿Qué me esta pasando?

-Gr-gracias. -Dije al fin.

El me sonrió, iba a devolverle la sonrisa cuando noté que mi móvil vibró, lo tomé y me extrañé al ver la hora, se había hecho más tarde de lo que pensaba.
Jacob se percató.

-¿Sabes? Podría enseñarte donde vivo antes de que te vayas.
-Buena idea. -Acepté con una sonrisa.

Nos levantamos y comenzamos a caminar, yo me dediqué a seguir a Jacob pues no sabía la dirección.
Dirigí mi vita hacia él, parecía pensativo.

-Parecías asustada antes de que se rompiera la rama.
-Si, esto... vi algo extraño en el agua.
-¿Algo extraño? -De repente prestó su atención en mí.
-Si, era como un humano, pero en el fondo del mar, seguramente sea un pez, desapareció rápidamente.

Sentí como él cuerpo de Jacob se tensó a mi lado, le miré atentamente, tenía la mandíbula cerrada con fuerza y el ceño  fruncido.

-Esto... si, será un pez. -Dijo, aunque en su voz se notaba la preocupación y el temor.

Me preguntaba que le incordiaba tanto.
En unos 5 minutos escasos llegamos a una casa que se veía grande, era de una planta, el techo era oscuro y la fachada de color rojo, fuera de ésta había un coche.

-Bueno, esta es mi casa. -Dijo Jacob.

Sonreí, me gustaba la casa, desde aquí aún se podía escuchar la brisa del mar.
Jacob me dirigió hasta la puerta, entré y lo primero que vi fue una pequeña sala de estar, con un sofá y una tele, algunos muebles y decoración variada, me llamó la atención un cuadro de un lobo y un texto debajo el cual estaba escrito en un idioma desconocido para mí.

De una habitación salió un hombre en silla de ruedas, era mayor, de piel morena y pelo largo y oscuro.

-___ , él es Billy, mi padre. -Me informó Jacob, después, se dirigió a su padre. -Ella es ___ Swan, la hermana de Bella.
-Encantada. -Dice acercándome a él para darle la mano.
-Igualmente ___ , eres bienvenida cuando quieras. -Dijo amablemente.

Le agradecí, Jacob tomó una camiseta negra de maga corta y se la puso, me enseñó parte de la casa y estuve allí un poco más, hasta que llegó la hora de marcharme.

-Puedo acompañarte, para que no vayas sola. -Se ofreció Jacob mientras íbamos camino a mi coche.
-No hace falta que te molestes.
-No es una molestia. -Insistió.

Al final terminé aceptando y se montó en el asiento de copiloto y yo me monté en el de conductor.
Arranqué y fuí de camino a casa.

-Es raro que Bella dejé que le hagan una fiesta.
-Si, ella sigue sin estar convencida, odia las fiestas. -Admití.

Llegamos en pocos minutos a la casa de Charlie.
Bajamos del coche y Jacob se puso a mi lado.

-Un momento. -Dije cuando me percaté de algo. -¿Cómo piensas volver?

Jacob se rió, lo cual no entendí e hizo que me pusiera más nerviosa.

-Yo puedo llegar a pie fácilmente. - Dijo sin importancia.
-¿Estás loco? Te dejaré mi coche.
-En serio, no me hace falta, pero gracias. -Dijo y dió un paso hacia mí.

Yo le miré sin entender, pero él parecía tranquilo, incluso divertido.

-Pero... -Me interrumpió.
-Tranquila. -Dijo cerrando la conversación, dejándome desconcertada.

Tardaría casi una hora en llegar, ¿cómo va a ir a pie?
Entonces salió Charlie por la puerta.

-¡Hey Jacob! ¡Cuánto tiempo! -Gritó.
-Hola Charlie, lo mismo digo. -Respondió él.

Nos acercamos a él y salieron de la casa Edward y Bella.

-¿Cómo está Billy? Esta noche iré con el a ver un partido.
-Bien, esta deseando que vayas. -Siguieron charlando.
-Hey ___ . -Me saludó Bella, quien se acercaba junto a Edward. -¿Qué tal te ha ido? -Me preguntó.
-Genial. -Respondí con una sonrisa.

Edward me miró como si estuviera concentrado en lo que digo, entonces, sonrió.

-Por cierto, muchas felicidades hermanita. -Dije dándole un abrazo.
-¡Te dije que no lo hicieras! -Gruñó.
-Vamos, te vas a hacer mayor. -Dije con ilusión, ella me puso una mirada asesina.

Edward y yo reímos.
Charlie entró a la casa y Jacob se acercó a nosotros poniéndose a mi lado.
Intercambió una mirada con Edward la cual no entendí.

-¡Bella, felic...
-¡Ni se te ocurra! -Le advirtió ella

Ambos rieron y se dieron un abrazo.
Edward se quedó bastante serio y no apartó en ningún momento la mirada de Jacob, no se porque, yo tampoco sonreí.

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¿Quién dijo que sería fácil? / Jacob Black y tú.  [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora