Love like chocolate by PandaOcean (En español)

Capítulo 10

Cálidos rayos de sol proyectándose a través de su cara, picaron gentilmente a Donghae hasta que abrió los ojos; sus brazos instintivamente enredándose en las sábanas como lo hacían cuando él realmente descansaba. Sólo que ésta no era su cama- porque las sábanas eran más suaves y cálidas que las suyas en casa, y él usualmente no se sentía con ganas de quedarse todo el día en ellas.

Las cortinas de pared cubriendo las grandes puertas del balcón estaban abiertas, y a través de ellas él podía ver el claro cielo azul iluminado por el sol salpicado con lo que parecían cometas, al igual que los techos de algunos edificios y las gran torre en sí misma a lo lejos en la distancia. Él se dió cuenta de que debió haber dormido demás, y volteó la cabeza hacia el reloj mientras pasaba la mano por su labio; preguntándose si alguien más se había levantado ya cuando este marcaba un par de minutos después de las ocho.

El hotel tenía una atmósfera tradicional en el- muebles de Arce rodeadas por puertas y las ventanas del balcón de Palo de rosa- y ricos plateados, púrpuras y blancos para los muebles, sábanas, alfombras y accesorios de iluminación dorados. Olía a ámbar, lucía como un castillo y se sentía como un sueño. Empujándose fuera de las enormes almohadas de la cama que definitivamente podían ser dos de las suyas y restregándose fuera el sueño de los ojos, sus pies se curvaron en la suavidad de las alfombras cuando se puso de pié y caminó hacia las puertas de cristal del balcón cubiertas por la espesa cortina; empujando el grueso terciopelo a un lado y deslizándola abierta para dar un paso en el fresco aire de la mañana. La brisa picó en contra su piel y el fué más afuera después de hubo acostumbrado a la temperatura del aire y las baldosas; pasando sus manos sobre las flores de las enredaderas cubriendo las barandas y dejando sus ojos escanear la superficie del agua del canal que podía ver a unas millas de distancia.

-Ha despertado.

Él inhaló bruscamente cuando miró a su derecha para ver a Eunhyuk en su terraza, bebiendo una taza de café a unos pasos de su propia baranda donde él también había estado observando la vista. Sus balcones se encontraban separados por una parrilla baja que podía abrirse fácilmente o incluso caminar sobre ella, y aunque ambos tenían una mesa con sillas para cada uno, la del pelirrojo contenía una jarra de café que todavía tenía vapor saliendo de su boquilla.

Usando una mano para arreglar su cabello con una tos distraída- Donghae miró atrás a la entrada abierta que llevaba hacia su habitación. Se sintió consciente de cómo debió verse en ese momento- el cabello de Eunhyuk estaba bien peinado y levemente mojado por una ducha reciente, pero él todavía lucía impecable en sus shorts marrones, camiseta blanca y sandalias. Él por otra parte estaba en calzoncillos y una arrugada camiseta con una enorme cara sonriente en ella y probablemente se veía como un idiota.

Era difícil pasar como desagradable frente a un empleado cuando este se encontraba de momento ante él en su ropa de dormir.

-No necesitabas hablar para arruinar mi mañana. Podrías tan sólo haber esperado a que viera tu cara.

-¿Qué puedo decir? Me gusta hacer un especial esfuerzo por las personas más gruñonas de mi vida. Demuestra cuanto me importa -el pelirrojo inclinó su tasa hacia él-. ¿Dormiste bien?

-Mejor que tú, aparentemente. ¿Preocupado de no estar a la altura?

-Primero que todo, siempre me levanto temprano. Segundo, ¿Cuándo admitirás finalmente que soy un buen chef?

-Ya sea cuando te conviertas en uno o nunca. Las dos son lo mismo.

-Es una sorpresa que tengas amigos.

-Podría decir lo mismo de la única neurona flotando por ahí en esa cabeza tuya.

-Todavía más de las que tienes tú -el pelirrojo se rió para sí al tiempo que bajó sus ojos y tomó otro sorbo de cálida cafeína.