Capítulo 7 "Revelaciones"

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Después de desayunar se dedicó a ordenar y limpiar un poco la casa, ya que estaba ahí sin pagar alquiler se le hizo justo colaborar un poco con el aseo, así Error no tendría que pagar en esos días por la limpieza si él la hacía desde antes.

Cuando Error volvió del trabajo Ink ya había terminado todo y se dedicaba a leer en el estudio que Error le había permitido usar. Error lo observó desde el marco de la puerta un rato antes de atreverse a interrumpir su lectura, y aunque Ink ya lo había notado llegar decidió quedarse en silencio también, fingiendo estar muy enfrascado en el libro.

— ¿Kiki? Me invitaron a comer en el restaurante de Ccino ¿Quieres venir?— Ink bajo el libro y le dio una sonrisa.

—Claro— Error sonrió emocionado y ambos se dedicaron a arreglarse para salir.

El restaurante estaba menos lleno que la última vez que habían ido ahí, Ink supo que se debía a que era un día entre semana, además de que la última vez habían estado festejando la inauguración del lugar, se sintió de pronto más cómodo también entre el círculo de amigos de Error, además de que esta vez el mismo Ccino los acompañó en la comida.

También se olvidó de pronto del rencor que les tenía al azabache y al albino, ellos eran muy buenos amigos de Error y en cada oportunidad que tenían le ofrecían su ayuda con lo que pudiera necesitar de ellos, siempre atentos a él, además de que se comportaron muy amables con Ink.

De Cross y Dream no podía decir nada diferente, Dream tenía todo para lograr ser un buen amigo a pesar que su actitud era muy diferente a la de su hermano y aunque Cross tenía unos modos más arrebatados como los del mismo Error, Ink se encontró disfrutando de sus bromas.

Más tarde, después de la agradable y deliciosa comida junto a los amigos de Error, condujeron sin un rumbo fijo, o eso creyó Ink hasta que Error se detuvo en un estacionamiento.

De ahí caminaron unas cuantas calles e Ink al fin lo vio, el famoso puente de Manhattan, era tan espectacular que ninguna foto que hubiese visto antes le hacía justicia, Ink estaba tan impresionado que no se contuvo en dejar ver su emoción.

Error lo notó de inmediato y lo invitó a pasear un rato por el lugar, había más gente de la que Ink hubiese esperado por la hora que era, en su mayoría había parejas que se dedicaban a hacerse cariñitos o a tomarse fotos de recuerdo.

Se detuvieron en algún punto admirando la enormidad del río que corría bajo ellos, admirando la belleza del propio puente y por supuesto, Error lo obligó a que se tomarán una foto, argumentando que sería el nuevo fondo de pantalla de su laptop, Ink accedió con la condición de que se la enviara por correo después para hacer lo mismo cuando estuviera en casa.

Esa tarde Error llevaba puesta su vieja gabardina, por lo que cuando Ink vio la foto en el teléfono de Error notó que los años casi no se notaban de una fotografía a otra, eso lo alegró bastante.

—Hay algo que quiero mostrarte…—Murmuró Error después de un rato, cuando llevó su mano a la bolsa de su gabardina, Ink no pudo evitar recordar lo que había descubierto esa mañana en aquella chaqueta y como si sus pensamientos fueran un presagio Error le mostró la caja que contenía los anillos.

Cuando la abrió Ink sintió un poco más acelerado el corazón, pensó que los nervios que lo invadieron de pronto se debían a que no quería que Error descubriera que había revuelto sus cosas mientras él no estaba en casa.

—Recuerdo que gastaste todos tus ahorros en estos aquella noche…— Ink volvió a sentirse un estúpido por permitirse hacer algo así.

— ¿Recuerdas todo de aquella vez? ¿Por qué no me lo dijiste? — Error bajó la mirada y como respuesta se encogió de hombros.

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