Aquí no existe principe azul

¡Especial Diego 2!

Nueva casa, nueva hermana.

Mudarnos fue increíblemente tedioso. Me dolían los huesos terriblemente y eso solo el primer día. Aún los días siguientes estuvimos desempacando y ordenando mucho, desventaja de tener tantas cosas. Si mamá dejara de comprar cosas inútiles...

Además establecerme en el lugar fue difícil, no tenía amigos, y las personas como yo tardamos mucho en hacerlos. No soy de mucho tratar con la gente. Además muchos discriminan a la gente como yo. No es que me interesen ese tipo de personas pero es difícil estar e un ambiente donde todos te miran como si fueras anormal.

Me comunicaba con mis amigos por internet pero no era lo mismo. Ya no podía practicar con ellos, y como vocalista la voz no suena igual a través de un micrófono. Además era un problema coincidir en nuestros horarios conectados. Lo bueno es que a pesar de todo ellos seguían ahí dándome ánimos. Cada vez que veía mis cicatrices en la muñeca izquierda me acuerdo de como ellos me hicieron salir de esa oscura parte de mi vida. Realmente son lo mejor que puedo hallar.

Claro que el cambio más grande fue el de una nueva integrante en la familia. Mi madre siempre quiso una niña y cuando se embarazó de mi tuvo complicaciones; quitándole la oportunidad de tener hijos de nuevo; razón por la cual nunca fui muy apreciado por ella. Ni por mi padre.

Al final, como cambiamos a una casa más grande —demasiado, diría yo— decidieron adoptar. La nueva era una chica de trece que llevaba once años en ese orfanato sin ser adoptada. Se llama Marilin, es muy enérgica y alegre a pesar de todo. También es muy curiosa, mucho para mi gusto pero no me molesta. Además sabe respetar ciertas cosas donde no debe preguntar acerca de mi y eso lo aprecio mucho.

Luego de unas semana donde ya la casa estaba lista, mi nueva hermana establecida y mi “nueva vida" me decidí relajar un poco. Estaba en Facebook mirando cosas aburrido cuando encuentro de casualidad el Facebook de ella. ¿Saben a quien me refiero no? Teníamos un amigo en común y era Anastacia, una muchacha que conocí hace un tiempo y que me agradó porque respetaba mucho mi manera de ser; según ella su lema era “dejenlo ser".

Entré a su perfil, y vi que casi no tenía fotos de ella, sin embargo las que tenía eran... lindas. Se veía muy diferente a cuando está trabajando.

—¿Esa es la chica que te gusta?

—¡PUTA MADRES! ¡Marilin! ¿Cuanto tiempo llevas ahí?

—Como cinco minutos —respondió con inocencia—. Y no digas palabrotas.

—¿Porqué no tocas la puerta?

—Primero, estaba abierta. Segundo, sí toqué pero no me hiciste caso. Y en lo que estaba ¿ella es la que te gusta?

No respondí.

—Por tu reacción veo que si. ¿Y le mandaste una solicitud.

—Estaba pensando si hacerlo o no.

—Antes que nada hay que ver tu perfil —Me quitó el mouse y entró a mi perfil como si fuera el suyo—. Bueno, hay un problema. Si quieres atraerla tus fotos no funcionan. Te ves muy delgado. Mira esta —señaló una en la que estaba en la playa—, nada de músculos, todo un fideo blanco y delgado. Necesitas ejercitarte.

—Si, claro muy bien. Ahora dame el mouse.

—No, ahora vamos a ejercitar músculos. Venga, vamos a un gimnasio.

—¿Así de pronto?

—Pues claro. Vamos, ponte una ropa de hacer ejercicio que voy a avisar a mamá y papá.

Y salió de la habitación sin permitirme decir más. Es increíble, yo siempre temía decir “voy a avisar a mis padres" pues sus respuestas siempre eran despectivas, negativas y cargadas de odio. Les tenía miedo. Ella tiene la libertad y el privilegio de que la traten como una princesa. No la envidio, al contrario me alegro de que ella no tenga que caer en el mismo punto que yo estuve. Mis padres pueden ser muy crueles cuando quieren.

Unos minutos después llegó otra vez con un pantalón de deporte y una blusa ancha blanca. Me tomó del brazo con todo ese entusiasmo arrastrándome hasta la salida.

—Espera, ¿A cual gimnasio iremos?

—Hay uno a tres cuadras de aquí.

Y sin dejarme responder me hizo correr hasta el gym sacandome el aire de los pulmones.

Fue el día más agotador y cansado de toda mi vida. Duré tres horas sometiéndome a todo lo que ella decía, sin descansar un segundo. Creo que no hubo una sola máquina de ejercicios que no haya probado.

Al día siguiente el cuerpo me dolía como si un tractor me pasara por encima tres veces. No podía ni levantar un dedo.

—¡Hey, no seas holgazán! Todavía no veo musculosa en esos brazos así que cobra ánimo porque mañana vamos a salir a correr.

Así, durante meses Marilin me obligó a mantenerme haciendo ejercicios. Llegó a un punto en el que ya estaba acostumbrándome y realmente obtuve resultados. Verme al espejo era interesante pues no era Vin Diesel o algo así pero ahora no estaba tan flácido. Y debo decir que ella fue una gran ayuda durante todo ese tiempo para mantenerme con animo, y no sentir la indiferencia en mi familia.

También conocí un amigo, cortesía de Marilin. Era tan energético como ella, pero no me caía mal. Además de que ya le había enviado la solicitud a Amy porque según ella “Ahora estás deseable hermano". Y ella la aceptó.

Supongo que estos cambios no fueron tan malos, y aunque estoy lejos de los que quiero, sé que cuando vuelva a verlos ellos estarán orgullosos de ver que he seguido adelante.

—¿Qué escribes? Los diarios son para niñitas Diego.

—¡Joder contigo Marilin! ¡Deja de espiarme! ¿Cuando aprenderás?

—Nunca.

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Pues ya ven que pasó con Diego cuando se fue. Creo que he mostrado algunas pinceladas de porqué Diego es como es. Pero me he mantenido ocultando las partes importantes claro :p

¡Diego tiene musculosa! e.e pero no tanta ok? No crean que es un príncipe, todavía no, y no lo será.
Primstone 9 esta vez subí temprano XD
Bueno, espero que este capitulo les haya gustado, pues estos días estaba  corta de ideas. Pero pensé que podía poner este extra (>^-^)> ♥
Besos.