Obsesión [PARK JIMIN] COMPLETA

[010]

Desperté en una habitación totalmente blanca, mi vista poco a poco fue volviendo a la normalidad permitiéndome distinguir los objetos de dicho cuarto. Algo desorientada miré el aparato que indicaba los latidos de mi corazón, tenía muchos cables conectados a mi cuerpo, una bata de hospital era lo que tenía puesto, algo presionaba mi abdomen, allí había una venda que abrazaba mi torso, recordé los cortes que había recibido por JungKook, en mi brazo derecho había una venda también por el corte hecho allí. Me incorporé lentamente teniendo cuidado, la puerta se abrió permitiéndome ver una chica tan joven como yo, la identifiqué recordando la foto de la agenda, vino corriendo a mí y la abracé sollozando.

— Ya se acabó, la pesadilla terminó, Sunny—susurró acariciando mi espalda. No la solté en ningún momento, creo que fue el abrazo más largo que daba a alguien—Hice lo que me dijiste.

— ¿Por qué esperaste tanto? —pregunté al alejarme. Me recosté de nuevo en la cama mirándola, ella era una completa desconocida en mi vida, me refiero a que sabíamos sobre la existencia de la otra, pero listo, no había nada más, Yuri había sido mi salvación total.

— Quería poner a prueba a JungKook—comentó tomando asiento en una silla cerca de la cama—Tenías razón, él quería engañarme o tenderme una trampa.

— ¿Cómo lo supiste?

— Mi madre es psicóloga y mi padre psiquiatra, ellos siempre me han dado pequeños tips para identificar rasgos peligrosos en las personas—explicó mirándome—JungKook sobrepasaba todos ellos, no es necesario que me trate bien o mal, su expresión corporal lo delataba por completo, tenías toda la razón, Sunny.

— Gracias—quise llorar de nuevo—Ellos...están locos, JungKook tomaba a Jimin como cómplice, su casa era su refugio. Jimin necesitaba que me enamorara de él, pero...su amigo lo influenciaba...

— No debes contarme nada, dos policías vendrán en unos minutos a interrogarte, diles todo eso y no ocultes nada—aconsejó tomando mi mano—Te recuperarás, eres fuerte, Sunny.

— ¿Dónde están ellos? —quise saber.

— Recibiendo lo que merecen—contestó seria—JungKook le disparó a Jimin, cuando lo sacaron de esa casa escuché que le habían dado en la espalda...

— Espera, ¿Fuiste con los policías?

— Claro que sí, estuve allí cuando te sacaron inconscientes y vine al hospital en la ambulancia, perdías mucha sangre.

Enserio tenía mucho que agradecerle a Yuri, volví a abrazarla sin saber cómo agradecerle, pero siempre estaría en deuda con ella.

— ¿Y JungKook?

— Lo arrestaron por supuesto, está totalmente loco—suspiró—Gracias por advertirme, nunca tuve en mente tener algo con él, de hecho, no sabía cómo quitármelo de encima.

— Gracias a ti, te debo una muy grande.

[...]

6 meses después

Decir que volví a la normalidad sería mentira, sigo algo paranoica cada vez que salgo o conozco a alguien. Después de lo sucedido los policías vinieron a interrogarme ese día, respondí a todas sus preguntas y a los chicos los llevaron a juicios. Park Jimin recibiría ayuda psiquiátrica, al parecer el juez tenía algo de esperanza de que el chico mejorara, pero eso no significaba que saldría impune, estaba acusado de mucho daño que me había hecho incluyendo el haberme drogado y forzado a tener relaciones con él. Jimin no había asesinado a nadie por ahora, él estaba "relativamente" limpio, pero era cómplice de alguna manera.

Jeon JungKook estaría el resto de su vida en la cárcel, jamás vería la luz del día, estaría encerrado como el animal que es. La última vez que lo vi fue en el juicio, sus ojos me atravesaban la mayor parte del tiempo, intenté no sentirme intimidada porque esta vez yo había ganado. Jimin recibiría su condena exacta al salir de su ayuda psiquiátrica, pasaría un año en el centro y luego decidirían que hacer, el punto es que no quería verlo nunca más en la vida.

Yuri y yo habíamos hecho una buena amistad, ella ha sido un gran apoyo en estos meses, en cuanto a mí recibo ayuda psicológica, por las noches tengo pesadillas de Jimin en mi habitación o creo estar encerrada de nuevo. Sé que saldré adelante poco a poco, pero era imposible no sentirse mal por todas esas chicas que murieron por JungKook.

Debía salir adelante no sólo por mí...

— ¿Estás bien? —preguntó Yuri mientras cenábamos. Miré la ensalada que comíamos recordando como el hilo de sangre había caído en esa ensalada de hace tiempo...— ¿Sunny?

Parpadeé varias veces negando con la cabeza.

— No tengo hambre.

— Oye, de nuevo te quedaste en trance—comentó—Debes comer, el bebé lo necesita.

Bajé la vista a mi vientre abultado, lo acaricié sabiendo que él también lo sentía porque sí, unas semanas después de lo sucedido me enteré que estaba en estado, sabía quién era el padre y en un comienzo quise abortarlo, me sentía sucia teniendo eso dentro de mí. Me recordaba a Jimin y terminaba alterándome, pero...la primera vez que escuché su corazón...cambié de opinión.

— ¿Crees que él sabe que será padre?

— No podría saberlo, está en ese centro, ¿Recuerdas?

— Lo sé, yo...—suspiré mirándola—Tengo miedo de que él venga por nosotros.

— Eso no pasará—intentó animarme—Jimin no volverá a lastimarte, te lo prometo.

— Quiero irme de Seúl—comenté—Estuve pensando en ir a otro lado, quiero alejarme de esta ciudad, siento que estaré más tranquila si lo hago.

— ¿Hablaste con tu psicóloga?

— Sí, ella cree que es buena idea, así podría empezar de cero con este bebé.

— No pienso dejarte sola, iré contigo.

— Gracias, Yuri—sonreí de lado.

— Pero ahora come, necesitas alimentarte bien.